Estaba el otro día viendo el partido Tigres contra Morelia cuando me acordé del debate y le cambié por puro morbo y ¡zas!, que me tocan los 15 segundos de fama de la “edecarne” que se robó el programa. Lo más divertido fue ver cómo a Gabriel Quadri se le salía la baba y cómo Enrique Peña Nieto redoblaba esfuerzos para no clavarse en ese escote pronunciado y pecaminoso.
Sin duda eso fue lo mejor del debate, lo que dio de qué hablar porque todo lo demás fue “pan con lo mismo” o también “PRI con los mismos” y “Peje con lo mismo”.
Mejor entremos en materia porque ahí mucha información -algunos les dicen chismes, pero a mi nivel hay que tomar las cosas con seriedad-.
En la edición antepasada hablamos acerca de lo que había sucedido con el reportero de Multimedios Televisión, Jonathan Tapia, quien fue a “trabajar” aparentemente en estado inconveniente y que su propio jefe, José de la Luz Lozano, constató con sus propios ojos.
Nos referimos al mensaje enviado por la empresa hacia el interior y hacia el exterior, pues Jonathan sólo fue sancionado con dos días de suspensión, que al unirlos con sus día de descanso se convirtieron en unas mini vacaciones que, más que un castigo, fue un premio el estar ebrio completo en horas laborales.
Al respecto encaja perfectamente otra pregunta: ¿cuál fue el mensaje que les mandó el reportero a su jefes, específicamente a Pepe de la Luz?
Ya ven que mis amigos de los medios me mandan muchas cosas que aparecen en las redes sociales y después del vergonzoso incidente de Tapia, en el facebook circulaban fotos donde los reporteros se pitorreaban de José de la Luz.
Jonathan Tapia aparecía en fotografías “dando autógrafos” en los ejemplares de la Hora Cero, donde apareció su fotografía y la penosa información que nadie desmintió, obvio, por ser tan cierta como el Arco de la Independencia en Pino Suárez.
A ver, señores de Multimedios Televisión, quedamos en el entendido de que lo que pasó con el reportero -a quien sus amigos llaman “El Bebote”- fue una gracia y que no pasa absolutamente nada si este señor llegar como placa de tráiler a trabajar, y encima se burla de lo que hizo y de que en la empresa le hicieron lo que el aire a Juárez.
Tarde o temprano estas actitudes pasarán la factura a la empresa de mi amigo Francisco “Pancho” González -Don Francisco para la prole-. Peor aún peor, parecería que alguien se está beneficiando con las indisciplinas de los de la Colonia Roma. Habrá que esperar, pero de El Apuntador se acuerdan.
Siguiendo por el mismo rumbo, en Multimedios traen la bronca personal con Poncho DeNigris. Dos veces le intentaron boicotear su nuevo programa llamado El Club del Italiano que daría inició en Televisa. En la primera ocasión fue un martes, día en que Poncho debutaría, pero en Multimedios salieron con la novedad de la boda de Konan Big con su gaviota, y en la empresa de Privada Pipo tuvieron que cambiar el arranque de programa para el lunes 7 de mayo.
Pero la sorpresa fue que ese mismo día en la empresa de don Francisco González sacaron el programa titulado El 15 años de Orata, para darle en la torre al rating de Poncho, quien trae pleito casado con Chavana y Mauricio Alatorre.
¡Qué manera de perder el tiempo en tonterías!
Por cierto, en la misma empresa de la colonia Roma, muchos camarógrafos de las noticias se quejan del reportero Juan Carlos Rodríguez, quien dicen se ha vuelto muy especial.
Por cierto, en esto días habrá iniciado la transmisión de Milenio Radio, en el 103.7 que era FM-TU, para comenzar con una programación de radio hablada. Esta es una respuesta a la aparición de Dominio Radio, en el 95.6 de FM.
Donde las cosas no pueden estar peor es en Televisa Monterrey, en donde con la contratación de Poncho DeNigris buscan atraer de nueva cuenta a los televidentes, pero en el área de noticias sigue la mata dando.
Ahora resulta que la reportera Alejandra Bejarano está a punto de dar a luz y Roldán Trujillo el gerente de noticias, le anduvo organizando un “baby shower” ¡en la sala ejecutiva de juntas!.
Cuentan que esto le cayó como patada de mula al jefecito Eugenio Azcárraga quien con tal de que Trujillo “haga migas” con el personal no le dijo nada, pero se la dejó guardadita para un futuro próximo.
Hablando del mismo personaje, Trujillo contrató a César Vargas, un ex reportero de El Norte de la Sección Deportiva y su misión en la televisora será revisar ortografías de los reporteros de quienes el gerente de noticias se queja amargamente.
Vargas, quien estaba en prensa de Apodaca y también tiene una mini columna en Publimentro, ahora será el chivo expiatorio de Roldán en una estrategia que no pudo ser más evidente.
Lo penoso es que en esa televisora se han marginado a personas como Ernesto Jiménez y José Luis Herrera Duque, quienes como buenos soldados aguantaron vara y que le saben bien al negocio.
A otra cosa mariposa. Siguen los acomodos entre los jefes de prensa de los políticos aspirantes a un cargo de elección popular en Nuevo León.
Alonso Alvarado y Clemente Almaraz, de los municipios de García y Guadalupe, respectivamente, pidieron permiso temporal y entraron de lleno a las contiendas, mientras que Edgar Martínez y Carmen Romo, de Apodaca y San Pedro, claudicaron al caer su candidato.
Los que llegaron ahí andan en la talacha, mientras los que se quedaron fuera, fueron cobijados por sus jefes. Ahí está Edgar, quien sigue bajo el manto de Oscar Cantú García, ahora diputado local, además de continuar en la empresa Cemex, mientras la saltillense Romo está respaldada por personas cercanas a una televisora. Será para la otra, tanto para los jefes de prensa como para los que querían ser alcaldes.
Hay dos personajes de la raza de medios a quienes los funcionarios públicos les huyen cada que los ven y que deambulan en el Congreso del Estado con la segadora bien afilada. Pero no crean que con la pluma y la libreta y la cámara.
Cuentan que gusta de agarrar a los jefes de prensa y “bajarlos del macho” a cambio de “protección” en una columna que sale un día si y un día no, donde se habla de lo que pasa en el mundo de la comunicación local. Y no nos referimos a La Caja de Pandora. Hay niveles.
En esta ocasión nos reservamos la identidad de estos personajes tan folclóricos, y sólo les daremos una pista: trabajan en un periódico diario y en una televisora.
Felicidades a Josué Becerra, el conductor de Telediario matutino, por el nacimiento de su pequeño heredero Iñaki.
De por sí Josué se levanta muy temprano para ir al noticiero, pues de ahora en adelante los maquillistas hagan su mejor esfuerzo por aquello de las delatadoras ojeras, Enhorabuena.
Reporte Indigo llegó en mayo a Monterrey, pero su impacto ha sido casi imperceptible para los lectores regios que muchas veces no lo encuentran en la calle. Las expectativas de una edición impresa eran altísimas tomando en cuenta que Ramón Alberto Garza es conocido como un “gurú” de estos menesteres, pero ¡oh, sorpresa! esta vez no ha pasada nada.
La cosa fue extraña desde que no hubo mucho “revuelo” entre los colegas de los medios de comunicación y realmente las contrataciones fueron escasas. Eso nos llevó a pensar -a mí y a mi grupo de sabuesos- que el esfuerzo no iba a ser tan intenso como alguna vez se pensó.
Si Reporte Indigo salió con la intención de apoyar a un determinado candidato a la presidencia, se tardaron un poco y ya las tendencias estaban marcadas.
Por ejemplo, “24 Horas” apareció desde finales de 2011 y su escencia era “tricolor”, por lo que su función cumplió con fortalecer las intenciones peñistas.
Actualmente en el centro de Monterrey circulan con mayor efectividad los periódicos gratuitos ABC y Publimetro, que todos los días son entregados a los automovilistas. Hasta el momento estos dos rotativos no se han “descarado” en torno a un partido o candidato, lo que los mantiene como neutrales.
SOLIDARIDAD CON HORA CERO
Pasando a otras cosas, tenemos por obligación abordar los recientes sucesos que pusieron a Hora Cero, en su sede central de Reynosa, en el ojo del huracán y en la mesa de las conversaciones tanto en Tamaulipas, Nuevo León y en otras partes del país.
De entrada, queremos agradecerles a todos nuestros amigos quienes expresaron su preocupación, solidaridad y múltiples muestras de apoyo para directivos, redacción, publicistas y todos los que integran la gran familia de Hora Cero Tamaulipas-Valle de Texas.
Es en estos momentos cuando nos damos cuenta quiénes son nuestros verdaderos amigos e, incluso, enemigos, porque como seguramente ya lo saben, hubo quienes andaban muy contentos con los rumores que empezaron a surgir sobre las razones que provocaron que nuestra empresa estuviera cerrada desde el lunes 7 de mayo a mediodía hasta que abrió sus puertas el jueves 10.
Al final tenemos que reportar que todo está bien, que las cosas aunque no fueron sencillas, tampoco estuvieron tan graves como llegó a decirse, principalmente por las exageraciones de unos cuantos corresponsales que ya parecen integrantes de la Fuerza Aérea, por aquello de que son bien voladores.
Para que nos entiendan, estamos hablando de los representantes de la Agencia France Press (AFP), la agencia alemana DPA (con sede en Monterrey) y la tamaulipeca Julia Antonieta LeDuc (pato en francés) que salieron buenísimos para aquello de escribir telenovelas y culebrones que serían la envidia Corín Tellado.
Resulta que el lunes 7 de mayo en horas de la tarde, los citados corresponsables enviaron una nota que fue reproducida por cientos de periódicos, portales de internet y noticieros de radio no sólo de México, sino de todo el mundo.
Aquí les transcribimos una de esas notas basadas en el reporte de quienes hoy son conocidos como los “Voladores de Monterrey”.
La sede del periódico mexicano Hora Cero, de Reynosa, fronteriza con Estados Unidos, fue tiroteada ayer por unos encapuchados instantes después de recibir una llamada amenazadora dando 10 minutos para evacuar el edificio, informaron testigos presenciales.
“Los balazos dañaron la fachada y hubo ventanales quebrados en el nivel superior, donde está el estudio de televisión y la cabina de radio, y sobre todo el impacto sicológico, porque la gente no quiere regresar a trabajar”, dijo a la AFP vía telefónica la fuente, que pidió mantener el anonimato.
“Este nuevo ataque contra la prensa mexicana tiene lugar después del asesinato de cuatro periodistas y una trabajadora de prensa en el estado de Veracruz (este), vecino al de Tamaulipas, donde se encuentra Reynosa, y de varias manifestaciones en el país exigiendo seguridad para los medios de comunicación.
Alrededor de las 13H00 hora local (18H00 GMT), los directivos de Hora Cero ordenaron la evacuación del edificio, situado en la periferia de Reynosa, después de recibir una llamada telefónica advirtiéndoles de que “iban a tronar (destruir) el edificio” y dándoles 10 minutos para desalojarlo.
“Algunos testigos llegaron a ver un grupo de al menos seis personas vestidas de civil y con el rostro cubierto, quienes les permitieron retirarse para después abrir fuego con rifles de asalto contra la fachada de dos niveles”.
La empresa editora del periódico, Demar, que también edita varias revistas, siempre ha eludido el tema del narcotráfico debido al riesgo que entraña en algunas regiones del país, particularmente en Tamaulipas, uno de los más afectados por la ola de violencia generada por los cárteles del narcotráfico.
Los ataques contra la prensa se han convertido en algo habitual por parte de las organizaciones criminales, que buscan disuadir a la prensa de publicar algunas informaciones, particularmente referentes a asesinatos, o bien de difundir otras, por lo que muchas agresiones no son denunciadas y nadie se atreve a informar de ellas públicamente.
La semana pasada fueron asesinados en el estado de Veracruz, vecino a Tamaulipas, tres fotoperiodistas y una empleada de un periódico, cuyos cuerpos fueron desmembrados y arrojados a un canal, pocos días después de la muerte por estrangulamiento en esa misma entidad de la corresponsal de la revista Proceso.
Según la estatal Comisión de Derechos Humanos, 79 periodistas han sido asesinados en México desde 2000. De ellos ocho desde 2011 en Veracruz.
Aquí es bien importante aclarar una serie de puntos en los que los “Voladores de Monterrey” exageraron.
Primero: No hubo ni un solo disparo en contra de las instalaciones de Hora Cero. Los vidrios de la fachada fueron quebrados con piedras y palos y no con disparos de “rifles de asalto”, como se afirmó en los despachos informativos.
Obvio que tampoco es cierto eso de que las instalaciones recibieron “al menos 100 impactos de bala”, como dijo la otra voladora de la LeDuc (pato en francés), quien incluso hasta se inventó declaraciones de personal de la Procuraduría Estatal.
Segundo: Los ventanales del segundo nivel no fueron dañados y si hay un desgarriate en el estudio de radio y televisión, es porque los compañeros del noticiero La Voz en ocasiones son bastante desordenaditos y no recogen muy seguido que digamos.
Tercero: La empresa Demar no edita Hora Cero. Edita el periódico El Mañana de Reynosa, que es propiedad de la familia Deándar. El grupo que se encarga de editar Hora Cero es Verbo Libre Editores, quienes también se encargan de publicar Clase, Conexión, Contralínea y el portal de internet www.horacero.com.mx.
La verdad es que consideramos conveniente hacer estas aclaraciones pues después de todo la situación en el país es muy delicada y los medios de comunicación tenemos que ser muy responsables con lo que publicamos, más cuando en ello va de por medio la integridad física de decenas de personas.
Porque estarán de acuerdo que tanto los “Voladores de Monterrey”, como Julia Antonieta LeDuc, pudieron haber respetado los principios básicos del periodismo y hubieran preguntado sobre lo que realmente estaba pasando en lugar de andar inventando fuentes anónimas y peritos de la procu buscando “ganar” una nota que, al final, va a estar en la sección de más leídas por 15 minutos antes de que pase de moda.
De hecho, eso fue lo que hicieron en The Monitor de McAllen, quienes aunque también se fueron con la finta (que raro, ¿verdad?) de que balearon las instalaciones, por lo menos tuvieron la decencia de llamar y citar en su nota a Héctor Hugo Jiménez, director editorial general de este changarro.
El directivo de esta empresa negó al periódico texano, la misma tarde del lunes 7, que el edificio de Hora Cero fue rafagueado por armas de grueso calibre.
Y para el jueves 10 de mayo, como viene sucediendo hace más de 14 años, de nuevo se abrieron las puertas de nuestra empresa y dentro sus fieles empleados haciendo su trabajo para sacar a la calle los periódicos y cumplir los compromisos con nuestros clientes.
A otra cosa mariposa. Este Apuntador no es que sea mala leche, sino que por deformación profesional siempre anda buscándole tres pies al gato. Resulta que hace unos días viendo la edición de Telediario Matutino se topó con un reportaje de investigación sobre la Evaluación Universal a los maestros del país que pretende hacer la Secretaría de Educación Pública.
La información presentada por Eduardo Mendieta llevó a este picateclas primero a la incertidumbre, después a la indignación, para pasar por último al escarnio y la pena ajena. Pero no, no es por el hecho de que los maestros que pastorea Elba Esther Gordillo se nieguen a que los califiquen ni a que la SEP ceda a las presiones sindicales. No, el batidillo de sentimientos se debe a que la nota presentada como reportaje de investigación estaba mal estructurada y pior, así, pior presentada.
Lamentablemente en la Mesa de Contracciones de Multimedios y las juntas editoriales parece que no hay personas conscientes de los textos de periódicos, en este caso Milenio Diario de Monterrey, no deben de presentarse igual que para Televisión o Radio. Es decir, cualquier novato debe de entender que son códigos y formatos diferentes. No basta con solo meter imágenes para rellenar el texto del reportero, sino de cuidar que éstas coincidan con el tema que se aborda. Y peor aún, el presentar los audios que Mendieta (a quien antes se le apodaba como El Tablitas, porque se dedicaba a hacer gráficas de tooodassss sus notas), a leguas se apreciaba que eran entrevistas de teléfono, y después grabadas en micrófono de cabina de radio o televisión, es decir, se oían “enlatadas”, con eco y viciadas. Ora pues, en la era de la HD y la digitalización, lo que se presumía como reportaje de investigación para un impreso, para televisión y (con radio, por su replica en AW), quedó del nabo. Tache para todos.
El periódico deportivo Récord cumple 10 años en Monterrey aunque al principio fue una amenaza para El Norte, nunca pasó nada con ellos. El que promete retirarse si hay una final Tigres-Rayados es Roberto Hernández Jr. Ojalá cumpla.
Y la pregunta de esta edición: ¿por qué sigue habiendo periodistas que exageran los hechos en vez de verificar lo que realmente sucedió?
Chismes, reclamos y recomendaciones de sitios para irnos a descansar enviarlos a:
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