“Interpreta mi silencio” es el título de la segunda exposición colectiva de los alumnos del Taller de Arte “Rehilete” que se realizó en La Biblioteca Central “Fray Servando Teresa de Mier” el pasado 7 de diciembre.
Pequeños desde los 5 hasta adolescentes, participaron con las creaciones que realizaron durante este año, donde se inspiraron en varios temas.
Aves, flores, rostros, paisajes y mariposas son algunos motivos que los niños artistas eligieron para hacer los 37 cuadros que fueron seleccionados para esta segunda edición en la que trabajaron con óleo, acrílico, resina y collage.
La directora y maestra de esta escuela, Rubí Aguilar Díaz, mencionó que en tiempos de mucho ruido en palabras e imágenes, es difícil encontrar algo de quietud, por lo que cada vez nos acostumbramos a poner menos atención.
“¿De qué otra forma se pueden hacer oír las personas en el bullicio actual si no es con un mensaje concentrado, asertivo? y, por lo mismo ¿no consideran primordial que niños y adolescentes sean capaces de definir aquello presente en su interior?, este es el objetivo de Rehilete, aún cuando en específico, lo buscamos pintando”, señaló.
Agregó que los estudiantes trataron de materializar algunas de sus inquietudes y plasmaron en su cuadros sueños, recuerdos y otras imágenes que consideraron importantes.
“Hubo quien incluso pintó sus temores. Irónicamente es algo muy audaz. Nos enorgullece, pues es valioso ser capaz de expresar estos sentimientos y también es un signo de honestidad en la persona”, añadió.
Destacó que cada joven artista dedicó a su pintura cerca de 20 horas de trabajo, con ensayos, errores y mucho apoyo de las maestras.
“Algunas obras son elocuentes por su sencillez figurativa. Otras son atrevidas, experimentales, al pisar el terreno de lo surrealista. Pero la pieza final la pondrán ustedes, queridas familias.
“Conocen a sus hijos, deben hacer un intento por descubrir aquello que han plasmado en el lienzo. No habrá ruido de palabras, tampoco ‘instrucciones’, pero es seguro que nuestros estudiantes dejaron un mensaje importante encerrado en sus cuadros”, concluyó la directora del taller.
Aguilar Díaz entregó los diplomas a los participantes y posteriormente se cortó el listón para que familiares y amigos apreciaran la exposición y posteriormente los chicos tuvieron una convivencia en la cafetería de la biblioteca ubicada en la Macroplaza.