La obra Reen, del compositor regiomontano Eduardo Caballero, fue seleccionada por el Cluster Prize 2018, y como parte del premio fue estrenada el 20 de mayo en un concierto en el Auditorium Scuola Fuoricentro de Lucca, Italia y el día 23 en el Centro Arte Moderna e Contemporanea da La Spezia.
El Cluster Prize es un reconocimiento que la Asociación de Compositores de Lucca y Cluster otorgan cada año a los compositores de música contemporánea a nivel internacional que se distinguen por su talento musical, la calidad de su trabajo que se desarrolla en la enseñanza y la divulgación de la música contemporánea.
Caballero dijo sentirse muy honrado por ser el seleccionado de este año, pero lamentó no poder estar presente en el recital, debido a que el premio no incluía el traslado.
“Lo que incluye este premio es que se toque la obra; la primera vez se va a tocar en el concierto del 20 de mayo y posteriormente el día 23 en La Spezia, también en Italia, y además se edita la partitura por Edizioni Sconfinarte”, señaló.
El director titular del Ensamble Noodus, agrupación dedicada la promoción y difusión de la música de los siglos XX y XXI, también ha obtenido los siguientes premios: finalista en el ALEA III International Composition Competition 2015, Boston, Estados Unidos; finalista del Concurso de composición N.E.O.N. (Nevada Encounters of New Music) 2009, University of Nevada, Estados Unidos.
Fue además ganador de National Competition Ensemble Intercontemporain Composition FORUM 2007, UNESCO; Isabel Padro and Valiente Felow en 2006; Members of Patron ́s Circle de New York, Estados Unidos, por mencionar algunos.
“He tenido otros premios internacionales pues hace tiempo hice una residencia artística en el estado de Nueva York (Millay Colony of the Arts, N.Y.), en medio de la nada, y esa residencia fue una de las más fructíferas del año, por lo que me dieron un reconocimiento.
“También he sido finalista en Boston, y en México he ganado varios concursos de composición; considero que me ha ido bien, aunque últimamente he aplicado poco porque me he dedicado más a componer”, señaló el catedrático de la Escuela Superior de Música y Danza.
Caballero se ha dedicado en los últimos años a componer obras en las que combina la música electrónica, porque considera que el resultado es muy interesante.
“La parte que más me gusta es la del instrumento con la electrónica en vivo, porque hay muchas formas de trabajar con la electrónica; una de ellas es trabajar el instrumento con una electrónica ya grabada, y otra es solamente la electrónica ya grabada presentada en varias bocinas.
“Y otra, es presentar el instrumento y que la electrónica se procese en tiempo real, es decir, que la señal del micrófono entra a la computadora y hay todo un algoritmo que procesa el sonido y el resultado es una combinación de electrónica con la música instrumental, pero se desarrolla en ese momento que se toca”, precisó.
ÓPERA RULFIANA
Para su proceso creativo, Caballero se inspira en la literatura y en las artes plásticas, prueba de ello es que compuso una ópera titulada Los Derrepentes, que se desprende de la novela Pedro Páramo, de Juan Rulfo.
“Los Derrepentes es una ópera que estoy buscando cómo realizarla; en Nuevo León hay ópera, pero es ópera tradicional, también se han hecho algunas cosas de ópera contemporánea, entonces, Los Derrepentes es muy sencilla porque se requiere solamente de piano, voz, con mica electrónica de manera opcional.
“Y es un poco influenciada por la novela Pedro Páramo. Y es que, en este caso, por más realismo mágico que sea la literatura de Juan Rulfo, hay un texto en concreto. Cuando hablamos de algo puramente musical no hay algo que te dice algo exacto, siempre hay un grado muy grande de abstracción”, explicó el compositor regiomontano.
Y en cuanto a la influencia pictórica en la música, refirió que la obra de Wassily Kandinsky y Jackson Pollock le provocan sensaciones que se traducen en notas musicales.
“Para mi puede ser más fácil la pintura abstracta. Una pieza que hice hace años, Punto y línea sobre plano del libro de Kandinsky, porque hizo dos libros sobre su técnica: Filosofía del arte y Punto y línea sobre plano, entonces yo hice una obra en la teoría de Kandinsky.
“También he hecho varias obras de Pollock, porque una vez visité el museo Tate, en Londres, y cuando entré a la sala había muchos cuadros de Pollock enormes y al acercarme, me impresionó mucho, incluso me imagino sonidos cuando veo su obra”, expresó.
Sobre el título de la pieza ganadora, Reen, indicó que estaba leyendo un ensayo de Octavio Paz sobre el ritmo y buscaba otro nombre, pero durante la lectura se topó con la palabra “reencuentro”.
“Entonces pensé cómo lo dirían en otros idiomas y empecé a buscar otras palabras y di con reencuentro, con reelaborar, re-algo, y esta pieza la hice después de muchos años sin componer para guitarra, aunque es mi instrumento.
“Y ahora con esta obra compuse nuevamente para guitarra, es como un reencuentro con el instrumento; es decir, tiene muchos significados. Y para las notas del programa pienso buscar muchas palabras que inicien con ‘re-en’ como reentrelazar, por ejemplo”, añadió el compositor.
Las obras de Eduardo Caballero se han interpretado en países como México, España, Austria, Francia, Australia, Inglaterra y Estados Unidos, siendo algunos de los intérpretes L´Intant Donné, Ensamble del Conservatorio de las Rosas, InterConteporain Ensemble, William Lane, Wilfrido Terrazas, Yukio Tagai, Irasema de Andrade, Mauricio Nader, Ensemble Arcema, Juanmanuel Flores, Cuarteto Cromano, Ensamble SecuenzaSur, Contemporanea Ensamble de Guitarras, Ensamble 3, Orquesta de Cámara de la Facultad de Música UAN, Contemporánea Ensamble de Guitarras, Orquesta de Cámara de la Facultad de Música UANL, Talea Ensemble, entre otros.
Actualmente se desempeña como profesor de contrapunto, fuga y armonía en la Facultad de Música de la Universidad Autónoma de Nuevo León y como profesor de composición, director artístico de la Cameráta Tamayo, coordinador del Festival de Música Contemporánea Ramiro Guerra y director del Laboratorio de Música Electrónica en la Escuela Superior de Música y Danza de Monterrey.