El sueño de todo músico es presentarse en el Carnegie Hall, el auditorio por excelencia a nivel internacional. Seis niños mexicanos y su maestra hicieron ese sueño realidad al obtener medallas y diplomas por su participación el pasado 8 de enero en el Forte International Music Competition en su edición 2010-2011.
Los hermanos Jorge Ian y Madely Eileen Mata Gómez de 11 y 14 años respectivamente, junto con María Fernanda Hernández Mercado de siete, Aarón Martínez Hernández de 17 y Gerardo Garza Ayala de 20, se llevaron las palmas y sorprendieron a los jueces que a decir de la maestra Natalia Tibets fueron muy exigentes.
“Es un trabajo bastante arduo y es un proceso difícil que en realidad ocupa años para ir formando poco a poco, semana tras semana, mes tras mes, año tras año, los hábitos profesionales y todo; es trabajo muy largo y no hay nada garantizado.
“Uno aporta y espera que haya frutos, pero no sabemos qué podemos obtener al final. La verdad es que yo quedé muy satisfecha con este viaje porque cuando lo planeé mi intención era que ellos tuvieran una visión más amplia, que vieran cómo otros chicos de otras partes del mundo se preparan para competir”, señaló.
Natalia Tibets imparte clases de piano de la Facultad de Música de la UANL y en el certamen también obtuvo su reconocimiento como mejor maestra por mayor puntaje de sus alumnos.
Tibets reiteró que su principal objetivo era motivar a sus alumnos a través del viaje, pero siempre se tomó muy en serio esta oportunidad ya que después de que envió los videos a YouTube , y posteriormente fueron seleccionados, literalmente pusieron manos a la obra y ensayaron el mayor tiempo posible.
“Mi sueño era sacarlos de aquí aunque sea un ratito para que conocieran lo que es un nivel más alto. Yo quería que vieran a alguien tocando mejor que ellos, pero no esperaba ganar porque siempre hay que pensar que hay alguien que toque mejor que nosotros.
“Claro que de todas maneras le apostamos y nos preparamos muy bien para el concurso, pues en las vacaciones estuvimos trabajando dos veces a la semana aquí conmigo, pero en su casa lo hacían a diario”, señaló la pianista de origen ruso.
MEDALLAS PARA MEXICO
La maestra Natalia se siente muy orgullosa del desempeño de los alumnos, pues comentó que los jueces calificaron en forma minuciosa y precisa la técnica, la interpretación y el estilo de los competidores, y por otro lado, gracias a la disciplina y voluntad de sus discípulos, el nombre de México quedó en alto.
“Algo muy importante es que nosotros éramos los únicos mexicanos entre músicos de diferentes nacionalidades, pues había participantes de Canadá, de China, de Singapur y de Estados Unidos.
“Yo sabía que los muchachos harían un buen papel, porque nos preparamos lo suficiente para ello, pero lo que me hizo sentirme muy orgullosa es que los míos sacaron lo mejor de sí y tocaron de la mejor manera, porque me di cuenta que se concentraron mucho en el momento de su ejecución”, expresó Tibets.
Agregó que el logro de estos jovencitos tiene mucho mayor mérito debido a que superaron las expectativas de los jueces, quienes además de otorgarles las mejores calificaciones, se sorprendieron gratamente al ver el nivel de los pequeños músicos mexicanos.
“El jurado fue bastante exigente. Fue internacional y estaba compuesto por maestros de diferentes nacionalidades y había criterios muy profesionales para evaluar a cada participante. Se tomaron en cuenta todos los aspectos para el puntaje total”, destacó.
Además de la emoción y la satisfacción de traer a nuestro estado las medallas y diplomas obtenidas por sus alumnos, la profesora saborea el triunfo por haber sido premiada también.
“Lo que me gustó particularmente en que en este concurso se tomó muy en cuenta la existencia del maestro detrás de cada uno de los alumnos. Considero que es importante que se reconozca la labor del maestro, porque es un trabajo en conjunto: tiene que ver el talento, su perseverancia y la dedicación y por último, la enseñanza del maestro”, enfatizó la profesora de la Facultad de Música de la UANL.
FUTUROS MAESTROS
Sobre la importancia de la educación musical en México, la instructora de piano que llegó a nuestro país hace 16 años, señaló que hace falta estimulación temprana para este propósito.
“Yo recuerdo que en el kínder yo tenía clases de música y la maestra tocaba el piano mientras que nosotros cantábamos y bailábamos. Desde ahí me llamó la atención por ejemplo estudiar piano.
“También en mi país es común que vayan los maestros de academias musicales al Jardín de niños a detectar el talento que pudiera haber en los pequeñitos, para luego otorgarles una beca para que estudien con ellos y desarrollar sus aptitudes”, indicó.
Tibets recordó cómo en Rusia los primeros maestros de música en las escuelas fueron extranjeros y posteriormente los alumnos que llegaron a la excelencia en esta materia, se convertían en maestros.
“Cuando abrieron los primeros conservatorios en Moscú en el siglo XIX los maestros eran extranjeros: italianos y alemanes. Esos conservatorios empezaron a preparar sus propios maestros, como por ejemplo Tchaikovsky precisamente fue el primer egresado del conservatorio en San Petesburgo y casi de inmediato lo invitaron a dar clases en el segundo conservatorio de Rusia que se abrió en Moscú”, precisó Tibets.
En el caso de México y concretamente Monterrey, la pianista confía en que los alumnos destacados que se van a estudiar una maestría al extranjero regresen a su patria a contribuir en el desarrollo cultural para formar a las nuevas generaciones de músicos.
“Tengo mis alumnos que ya se graduaron y están trabajando aquí en la Facultad ayudándome con sus alumnos chiquitos , por lo que ya empezó la cadena. Yo tengo frutos de mi presencia aquí, de mi existencia, veo los frutos de mi vida aquí y eso me da mucha satisfacción”, manifestó la también ganadora del Forte International Music Competition 2010-2011.
EXPERIENCIA INOLVIDABLE
Para los niños que demostraron su talento en el Carnegie Hall esta experiencia ha sido inolvidable, pues según la opinión de Lourdes Gómez, mamá de dos de los premiados y también maestra de la Facultad de Música, aunque todavía no asimilan del todo la magnitud de este evento, se portaron a la altura y tuvieron mucha confianza en sí mismos.
“Me sentí muy emocionada y seguí el consejo que mi mamá siempre me dice: Que respire lentamente y me ría. Es la primera vez que participo en un concurso internacional, pues ya he estado a nivel nacional”, expresó Madely Elieen Mata Gómez quien obtuvo medalla de plata superior.
“Mi mamá siempre nos ayuda y nos aconseja que nos encerremos en una burbuja para concentrarnos en tocar”, dijo a su vez Jorge Ian, el hermano de Madely y quien por su participación ganó medalla de oro.
Por su parte Aaron Martínez, quien realizó el dueto con Madely por la cual también obtuvo la medalla de plata superior , mencionó que estuvo nervioso antes de la presentación, pero al estar ahí se puso a tocar normalmente.
Gerardo López Ayala, otro de los alumnos que participó, dijo que se sintió muy emocionado pues él tiene apenas dos años de estudiar piano.
“Estaba muy emocionado, porque fue la primera vez que concursé internacionalmente y simplemente confié en Dios y todo salió bien”, compartió el joven de 20 años acreedor de medalla de oro y dos reconocimientos: Mejor técnica pianística y presencia artística.