
Desde muy pequeña Nancy Guzmán sabía que se dedicaría al arte. Recuerda que a sus siete años ya “jugaba” con cerámica y tomaba cursos en Arte A.C., y desde entonces moldea sus sueños y los transforma en hermosas figuras.
“Me gustaba jugar con colores; recuerdo desde que era muy pequeña tuve la oportunidad de estar en los cursos de Arte A.C. que en ese entonces los coordinaba doña Romelia Rangel de Milmo y muchos artistas eran los maestros y a mí me tocó participar con el escultor Jorge Elizondo, quien era mi maestro y también Gerardo Azcúnaga, quien sigue siendo mi mentor”.
Nancy Guzmán es orgullosamente regiomontana, pero ha representado a Monterrey y a México en China, pues estuvo trabajando algunos años como diplomática, y esta experiencia le dejó un gran aprendizaje pero sobre todo la hizo sentirse más orgullosa de ser mexicana.
“Estuve como agregada cultural de México en China, entonces fue muy enriquecedor estar allá y representar a nuestro país que me encanta, pues mucho de mi inspiración para mis piezas son nuestras raíces, mucho del arte prehispánico.
“Yo creo que algo que fue muy importante para mí al estar en un país tan distinto como China es que finalmente te das cuenta que hay cosas universales en los humanos, es decir no importa que estén al otro lado del mundo, pero la forma y el color es un lenguaje universal”.
FIGURAS DEL ZODIACO
“Las Damas del Zodiaco” es la primera exposición individual que se exhibe actualmente en la Universidad Regiomontana y en la que Nancy trabajó más de un año en la elaboración de las 12 figuras que representan a cada uno de los signos que integran el círculo de constelaciones.
“Esta serie que acabo de inaugurar el jueves (6 de agosto) es acerca de las 12 damas del zodiaco, gané el año pasado con la que representa a Piscis -y casualmente es mi signo- y parte de ese premio era hacer esta exposición donde presenté esta docena de piezas más dos que estuve trabajando este año y que son más grandes; con la que terminé pesa más de 40 kilos”, indicó la artista egresada de la licenciatura de Artes de la UdeM.
Comentó que trabajar con mayor volumen fue todo un reto, pero finalmente quedó muy satisfecha con el resultado.
“Estas piezas las trabajé en el estudio de Gerardo Azcúnaga, mi maestro. Yo utilizo una técnica que se llama mayólica y se traduce en cerámica cocida con esmaltes, el esmalte blanco con color, entonces esa técnica se le llama así porque es un término español que se utilizó hace muchísimos años porque ellos querían hacer algo muy parecido a la porcelana china.
“Tengo de muchos tamaños, pero esa en particular que pesa más de 40 kilos se titula La Deidad de la Evolución Consciente “.
Nancy Guzmán trata temas universales en su obra, como en este caso los signos zodiacales, pero su inspiración puede surgir de cualquier objeto animado o inanimado que se encuentre en el día a día.
“Acostumbro a tomar fotos de lo que me gusta y hay días por los que me obsesiono por un color y tengo mis colecciones de esas series de esos colores; y además hay una inteligencia detrás de eso porque te pones a analizar ¿qué es lo que quiero plasmar? Y luego ya me pongo a trabajar en el proyecto”, afirmó.
Al regresar de su estancia en China, Nancy retomó su quehacer artístico. Anteriormente había participado en exposiciones colectivas aquí en Monterrey en el Museo Metropolitano, en el Centenario y en el Museo del Obispado.
“Retomé lo que viene siendo la producción hace casi tres años, porque cuando regresé de China, empecé otra vez con Gerardo Azcúnaga donde hice esta piezas”.
DEL HORNO A LA GALERÍA
Nancy Guzmán estuvo hace algunos meses conviviendo y aprendiendo con artesanos que trabajan con el barro verde empleando la misma técnica de sus ancestros.
“Yo estuve trabajando con unos artesanos en Oaxaca, hice un proyecto con los de Atzompa, que son los del barro verde y fue una experiencia muy enriquecedora porque son personas que traen de generación en generación el proceso y aprendí mucho de ellos.
“En México producimos artistas, la verdad es que tenemos una bandera muy grande hacia el mundo en eso y me atrevo a decir que como ningún otro país; en todos los géneros y en todos los años. México tiene una magia y una esencia permanece y aunque tenemos cosas que nos afectan, creo que eso nos hace ser más creativos”, consideró.
Por otro lado, la artista reveló que la cerámica con la que elabora sus piezas es del estado de Zacatecas, cuya tierra se caracteriza por el color rojo.
“Esta tierra tiene unos minerales especiales, es con los que me he acomodado para trabajar. Y allá en Zacatecas hay varios artistas que trabajan la cerámica y tienen proyectos muy interesantes”.
En cuanto a su personal forma de trabajar, Nancy reconoció que no es tan fácil hacer esculturas de gran formato, pues se requiere de tiempo y paciencia ya que la pieza tiene que pasar por el horno a muy altas temperaturas.
“Esa escultura que hice fue un gran reto. Yo le dije a Gerardo, mi maestro, que con esa me había graduado de ingeniera, porque se tuvo que hacer en varias partes para quemarla, pues la cerámica se tiene que quemar y esas quemas se hacen a mil 140 grados.
“Son de 26 a 28 horas cada vez que se queman y luego tienen que dejar que enfríe. Entonces, algunas de mis piezas han llevado cinco veces ese proceso, es decir: hay veces que les hago alguna modificación, entonces entra nuevamente al horno”, explicó.
Dijo que se utiliza un horno especial para cerámica y en algunos casos las quemas se hacen con leña en hornos más primitivos.
Nancy Guzmán concluyó que en cualquiera de sus formas, ya sea pintura, escultura, literatura, danza y música, el arte es indispensable en nuestra vida.
“Creo que el arte es para todos y es importante que de alguna u otra forma lo tengamos siempre en nuestra vida”, concluyó la artista regiomontana.