El dominio que tenía Francisco de Zurbarán sobre el lienzo, especialmente en el cuadro “Cena en Emaús”, es un claro ejemplo del resplandor del arte en la Edad de Oro de España.
El pasado 30 de octubre llegó a Monterrey “Arte e Imperio. La edad de oro de España”, la cual se considera una de las mejores exhibiciones que albergará el Museo del Noreste (Mune), con motivo del 25 aniversario del Museo de Historia Mexicana, cuyas piezas proceden del Museo de Arte de San Diego, California.
“Ha sido un esfuerzo (traer la exposición), llevamos trabajando un tiempo con el Museo de San Diego que finalmente vemos culminado hoy para conmemorar los 25 años del Museo de Historia y queremos que mucha gente venga a visitarnos”, expresó Magdalena Cárdenas, directora de 3 Museos, durante el recorrido exclusivo a medios de comunicación.
Por su parte, Roxana Velázquez, directora del Museo de Arte de San Diego, destacó que esta es una oportunidad única, ya que es la primera vez que se presenta una muestra de esta categoría no sólo en Monterrey, sino en México.
“Los mejores artistas fueron educados en Italia, vamos a hablar de Velázquez, o José de Ribera ‘El Españoleto’, que nació en Játiva, Valencia, estudió con Caravaggio en Roma, pero hizo la mayoría de su vida en Nápoles; y por otro lado tenemos a Francisco de Zurbarán, el gran artista extremeño que puso su taller y de ahí enviaron constantemente pinturas de su obra hacia Perú, Bolivia, a la Catedral de México, y entonces vemos esa conversación.
“O nos vamos a Amberes, y piensen en Rubens, quién no ha oído hablar del gran maestro diplomático estrella no sólo en sus modelos, sino en la fusión de la tradición flamenca y la tradición italiana, que fundó un taller con 102 artistas que trabajaron para exportar estos modelos que llegaron a la Academia de San Carlos en México”, indicó.
Destacó que lo importante de esta exposición es que la gente pueda apreciar la maestría con la que los pintores y escultores realizaban sus creaciones.
“Esta muestra lo que nos permite es estudiar todos estos datos, pero con el goce estético, ese placer que nos causa ver la perfección en esta piezas y la utilización de materiales como la plata y el marfil”, apuntó Velázquez.
En el cuadro “Cena de Emaús” de Zurbarán, procedente del Museo Nacional de San Carlos, se observa el manejo de los claros oscuros.
“Vean la blancura del mantel. Hay pocos artistas que han manejado el color blanco con esta perfección, pero Zurbarán en el siglo 17 juega con esos blancos en pinturas completamente oscuras.
“Y otra de las características de este pintor son los bodegones, las famosas naturalezas muertas, que es otro de los géneros que ustedes conocen bien como representativos del Siglo de Oro; se trata de venerar la vida diaria a través de objetos cotidianos y Zurbarán y su hijo también se distinguen por ello”, indicó la directora del Museo de Arte de San Diego.
Sobre Peter Paul Rubens comentó que hace piezas que vibran, que están vivas, que tiemblan.
“Aquí vemos esta obra de Rubens: una madonna bellísima, una obra de gran dulzura, que es un modelo que llega a America Latina que se ve incluida por el formato y las representaciones de Rubens.
“Qué bueno que esta belleza se pudo conseguir para exhibirla aquí”, expresó la curadora.
Además de las obras de Zurbarán y Rubens, otras de las imperdibles de esa exposición son: “La Magdalena Penitente” de Bartolomé Esteban Murillo, “Adoración de los pastores” y “San Pedro penitente” de El Greco .
Pero sin duda, una obra muy importante es el retrato que hizo Miguel Cabrera a Sor Juana Inés de la Cruz, que se instaló en la última sección de la exposición para cerrar con “broche de oro”.
“Aquí estamos ante una pieza que creo que todos hemos visto publicada mil veces, que es la imagen icónica de esta gran pensadora orgullo no sólo de México, sino del mundo, pues lo que esta señora pensó trasciende los límites del Siglo de Oro”, enfatizó Roxana Velázquez.
“Arte e Imperio, La edad de oro de España” se divide en cuatro salas: La imagen cortesana, El auge del naturalismo, El arte al servicio de la fe, El esplendor de la vida cotidiana y los materiales de todo el mundo.
La muestra fue curada por Michel Brown, curador en jefe de arte europeo del Museo de Arte de San Diego, donde tuvo su origen, gestión e investigación así como también fue su primer suede, para continuar posteriormente su itineraria a Monterrey.
Sergio Rodríguez tuvo a su cargo la museografía de esta exposición montada en Mune, en donde permanecerá hasta el 23 de febrero de 2020.