Cuando el cineasta Juan Manuel Cotelo conoció al padre Pablo Domínguez, le pareció un tipo simpático pero hasta ahí. Dos años después se encuentra realizando una gira por varios países para presentar un documental que hizo sobre la vida de este sacerdote.
“La Última Cima” ha rebasado las expectativas del mismo realizador, pues la cinta se estrenó en España en junio del año pasado y estuvo seis meses en cartelera y ha vendido cerca de 30 mil DVD´s.
Juan Manuel Cotelo estuvo el pasado sábado 14 de mayo en las dos únicas funciones que se realizaron a beneficio de Kairós, un movimiento que fomenta en los jóvenes la vocación de servicio.
La exhibición de la película fue en Cinema Río 70 y fue organizado por la Comunidad Jésed en coordinación con Cine con Causa, con el objetivo de mostrar a través del filme que aún existen religiosos comprometidos.
Al inicio del largometraje, Cotelo hace una introducción en donde expone los motivos por los que decidió narrar la vida de Pablo Domínguez, un cura madrileño muy querido en su comunidad.
“Los expertos me lo han dicho claramente: Si hoy crucifico a un sacerdote en público, voy a tener éxito y me van a dar importantes premios. Si por el contrario, hablo bien de un cura me van a crucificar a mí; pues tengo un problema porque he conocido a un sacerdote buenísimo y me encantaría contarlo”, explica.
Posteriormente continúa con su presentación al reconocer que a primera vista la vida de Pablo no da para una película porque “no es pederasta, no es mujeriego, no es ladrón, tampoco es exorcista , no es misionero de la selva, no es el fundador de una nueva institución de la Iglesia, no es ni siquiera párroco.
“Y sin embargo, estoy convencido de que la vida de Pablo merece la pena ser conocida porque Pablo es nada más y nada menos que un buen cura”, subrayó el director y productor de “La Última Cima”.
En conferencia de prensa días previos a la proyección, comentó que un amigo cercano le sugería hacer un documental sobre la vida este popular personaje, idea que en principio rechazó, pero ante la insistencia, accedió a grabar una conferencia impartida por Domínguez quien era decano de la Facultad de Teología San Dámaso de Madrid.
“El proceso en resumen es que durante tres meses hice lo posible por no conocer a ese cura, pero un amigo se había empeñado que todo el mundo tenía que conocerlo incluido yo, por lo que finalmente fui a grabar una conferencia de este señor”, explicó el también guionista de programas para televisión.
Al poco tiempo se enteró que el padre Pablo había muerto en el Moncayo (el monte más alto de la provincia de Zaragoza) y que a su funeral asistieron alrededor de 3 mil personas, lo que despertó su curiosidad, pues Cotelo es periodista de profesión.
“El error de un periodista es investigar. Yo cometí ese error que fue empezar a investigar quién era este señor, por qué hubo 3 mil personas en el funeral, por qué había estado con el Papa una semana antes y qué hacía en el monte, y quién era la chica con la que estaba, y quién era él, etcétera”, destacó.
Agregó que luego realizó entrevistas a familiares, amigos, alumnos, amigos y otros sacerdotes, y pudo constatar que era un hombre auténtico y fiel a sus principios y valores.
FENóMENO EN TAQUILLA
Con “La Última Cima”, la casa productora Infinito más Uno, fundada por el propio Cotelo y dos socios en 2009, se proyecta internacionalmente, a pesar de que en un principio no se tenía contemplado realizar documentales.
“Todo este fenómeno nos ha superado, porque es el primer producto de una empresa chiquita, con un nombre pretencioso : Infinito más Uno, suena a empresa grande, pero es falso.
“Surge sin querer, porque no estaba en la lista de proyectos ni siquiera hacer documentales. Nosotros queríamos hacer cine, ficción, programas de televisión, programas para niños, dibujos animados, musicales y podíamos también hacer documentales , pero lo cierto es que no había ninguno en la lista”, aclaró el guionista y director también de “El Sudor de los Ruiseñores”.
Dijo que a partir de que “La Última Cima” se estrenó en junio del año pasado, ha superado las expectativas que él y sus socios tenían, pues aunque estaban orgullosos del producto, nunca pensaron que llegaría tan lejos, pues luego de los seis meses en España, se ha proyectado en Costa Rica, Ecuador, Guatemala, El Salvador, Argentina y Chile, por mencionar algunos.
“Hoy me veo, y no sólo yo, sino los cuatro que estamos detrás, nos vemos como espectadores de una película, en la que estamos de protagonistas de ese fenómeno que es maravilloso, impredecible, sorprendente, en donde cada día es un regalo nuevo.
“Para mí el fenómeno más llamativo de la película no es el número de espectadores, no es el número de semanas en cartelera, por ejemplo en España hemos vendido 30 mil DVDs, la película más vendida en la historia del cine español son 10 mil copias. Nosotros ya llevamos 30 mil.
“Realmente lo extraordinario no es eso, esta película nos ha puesto en un escenario distinto y es que las personas después de verla realizan cambios favorables en su vida”, destacó Juan Manuel Cotelo.
TESTIMONIOS
El director de “La Última Cima” subraya que él fue el primer sorprendido de lo que ha provocado la historia del padre Pablo en los espectadores, pues la prensa especializada la ha elogiado extraordinariamente, incluso aquellos medios impresos que son declarados anticlericales como El País que le dedicó dos páginas para hablar bien de esta película.
“La gran sorpresa es que decenas de personas que no tienen ninguna relación con la Iglesia, que nos escriben y de antemano te aclaran: `soy ateo, soy agnóstico ´ y en la siguiente frase te dicen: ` Gracias por que he visto la película y me ha devuelto la fe, me ha cambiado la perspectiva de las cosas .
“Y entonces ¿qué hacemos nosotros? pues aplaudir, porque es difícil creer en la casualidad, es difícil pensar que el resultado que sucede en el corazón de las personas lo hayamos provocado nosotros o lo haya provocado la película, creo que es muy fácil ver a Dios detrás”, enfatizó.
Como dato curioso mencionó que México ha sido el país donde reciben más correos, pero hasta ahora se exhibirá aquí, pues ya la han visto en otros países de América Latina.
“Ahora estrenamos en Monterrey, en Mérida, en Campeche, dentro de poco en Vallarta, sé que están llamando de otras ciudades, entonces con México tenemos mucha ilusión y confiamos que se repitan esos fenómenos de transformación personal de los espectadores”, auguró el realizador de este fenómeno en taquilla.