
La interpretación que Salvador Díaz le da a la historia que se escribe diariamente a nivel mundial, al mismo tiempo que reflexiona sobre la presencia del arte en la cotidianeidad, se refleja puntualmente en sus cuadros trabajados con diferentes técnicas y acabados.
En la muestra titulada “Desplazamientos” que se inauguró el pasado martes 18 de mayo en las salas de exposiciones temporales del Centro Cultural Universitario Colegio Civil, el artista de 33 años eligió lo más representativo de su producción que ha evolucionado en más de una década, para esta exposición que forma parte de las actividades del Festival Alfonsino 2010.
“Como indica el título de la exposición `Desplazamientos´ , en lugar de haber escogido una sola temática de todo lo amplio que ha sido mi creación en estos últimos 13 años, se quiso hacer como una ventana de distintas temáticas que he desarrollado, y que estas se aboquen a otras ramificaciones de mi creación”, manifestó quien expuso el año pasado en el Museo de Bellas Artes de Santander, España.
Díaz incluyó dentro de estas temáticas varios bloques de su proceso artístico, que puede apreciarse en “Álbum de familia”, “Autorretratos”, “Historia del arte” y “Diarios de viaje”, “La Hemeroteca” , esta última destaca por una interesante propuesta de pintura sobre papel periódico.
De las que corresponden a la “Historia del arte”, Díaz admitió que se vale de los pintores consagrados para retomar algunas de las más emblematicas de sus creaciones, y más que un homenaje considera que es su visión particular sobre la historia del arte y sus protagonistas.
“Yo creo que como espectador y como artista -en el caso de la historia del arte- sí hay pintores y obras en específico que admiro, y que de alguna manera por su vigencia o por ser obras clásicas quiero reinterpretarlas y traerlas a mi realidad.
“Son experiencias que tuve al estar de visita en diferentes museos, en el extranjero. De algunos ejemplos de esas obras, elegí unas dos o tres pinturas, que a veces se conforma una sola pintura de distintas , ya que es una constante de mi obra, pues en un solo cuadro hago distintas referencias que se nutren entre sí”, argumentó Díaz.
“Uno como artista también es un espectador, y en ese sentido apreciar el arte va de la mano de la formación como pintor, y creo que eso está conformado en mi obra”, apuntó.
Un sello distintivo de la producción de Salvador Díaz es su trabajo sobre papel periódico, en el que encontró un vehículo para expresar y mostrar sus inquietudes en cuanto al entorno que nos rodea individual y colectivamente.
“Ahí se ha conformado una hemeroteca estética a través de la prensa. Es un diálogo diferente: es más social que íntimo, como es el caso de la pintura en lienzo. En cuanto a la pintura en los diarios, se abarcan todos los temas referentes a los intereses de las personas y que los mismos periódicos toman en cuenta.
“Por ejemplo: las diferentes secciones como la de noticias internacionales, entretenimiento, arte y cultura, avisos de ocasión, etcétera, que en conjunto yo percibo como la vida misma; es lo que le da ese valor, se puede traducir como una protesta, reflexión o darle un enfoque divertido, según el tema que se aborda”, indicó quien fuera miembro del Consejo para la Cultura y las Artes de Nuevo León durante 2004-2007.
“El arte te permite conocer mundos diferentes en los que estés o no de acuerdo; y también es como un filtro que te permite conocer una realidad distinta, como puede ser el tema de la violencia, que a través del arte se realice una feflexión más sana y más consciente de lo que pueda afectar la misma realiidad.
“La pintura puede ser violenta, agradable o amena y dentro de la prensa es muy notorio que se puedan dar todas esas perspectivas en mi temática o en mis intereses”, aseveró el joven originario del Distrito Federal pero que desde hace varios años radica en Monterrey .
ÉTICAS DE VIDA
Sobre los bloques dedicados al “Álbum de familia” y “Autorretratos”, el pintor dijo que es una obra más detallada, en la que se adapta más a la armonía y estética del cuadro.
“Es una pintura menos gestual o expresionista con respecto a la prensa, que se presta mucho para esa velocidad de trazos, pero aquí se trata de una pintura que se aboca como éticas de vida, que es algo en lo que creo mucho.
“También creo que el arte tiene que aportar algo, que no solamente tiene que ser un reflejo de la misma problemática en la que estás, sino que debe aportar una salida o un camino que nos permita creer en muchas cosas que a veces las damos por perdidas. El arte por sí mismo debe tener su lugar, que sí lo tiene, pero que al contemplarlo tenga una fuerza importante en las personas”, enfatizó.
Díaz también recurre a la nostalgia, ya que sus cuadros alusivos al álbum familiar refieren la emoción compartida de los espectadores que observan momentos y lugares comunes que ellos mismos han vivido, sobre todo los que pertenecen a las generaciones previas a las fotografías digitales.
“En algunos casos del álbum fotográfico se pretende recrear esa sensación de los diaros, que un segmento amplio de la población hemos archivado o atesorado en nuestras casas como la historia de nuestras vidas, y esta percepción se logra cuando la persona evoca en su memoria su propia realidad aunque no sea él o ella los que aparece en el cuadro”, puntualizó Salvador Díaz.