Fue uno de los artistas más famosos durante la primera guerra mundial y de los pocos que experimentaron la guerra todo el tiempo que duró.
El pintor Otto Dix participó en las dos guerras. Su arte narra lo vivido en el campo de batalla y también en la urbe. Su mirada aguda es reflejada en su obra que ha sido calificada como realista, expresionista, dadaísta y hasta fue señalado como “degenerado” por la dictadura nazi.
“Dix era uno de los artistas más famosos durante la primera guerra mundial, y fue uno de los pocos que experimentaron la guerra todo el tiempo que duró y lo hizo dibujando y bocetando desde su trinchera” , afirmó Ulrike Lorenz , la curadora de “Otto Dix. Violencia y Pasión”, con la que el Museo de Arte Contemporáneo Marco, celebra su 25 aniversario.
Organizada por Marco Munal y el Goethe–Instiut Mexiko como parte de las celebraciones del Año Dual México-Alemania 2016-2017, esta primera exposición individual del artista alemán en México que abrió sus puertas al público el pasado 17 de junio.
La obra seleccionada reúne 150 trabajos procedentes de museos y colecciones de Europa y Estados Unidos que fueron instalados en la planta baja del recinto a lo largo de cuatro salas y divididos en siete secciones.
En el módulo “El fin del mundo. El trauma de la Guerra Mundial” , la curadora destaca la forma en que la guerra marcó al joven Otto, que buscó en el arte una forma de asimilar las atrocidades que presenció.
“La guerra tiene un efecto muy traumático para Dix y él está intentando de sobrellevar esto a través del arte”, señaló Lorenz.
Indicó que bajo estas circunstancias, Dix se convierte en uno de los principales pintores realistas que está presentando la crueldad de la guerra.
“Los lisiados de la guerra (1920)”, uno de los cuadros más conocidos de Dix, en el que aparecen veteranos de guerra inválidos, personajes que son trascendentales en su obra.
“Aquí estamos viendo una reproducción de uno de sus cuadros más famosos, ya que este cuadro fue destruido por los nazis en la segunda guerra mundial.
“Con este cuadro, Dix entra a una de las primeras exposiciones mundiales del dadaísmo, lo cual le da notoriedad”, añadió la curadora.
Durante el recorrido, el espectador recibe las imágenes crudas , a veces irónicas, pero muy realistas, cuyos escenarios son las calles de la ciudad, prostíbulos, el circo; algunos personajes un tanto grotescos y otros simpáticos y hasta tiernos.
Otto Dix fue considerado gran retratista y en el gran apartado “El rostro del tiempo. En el espejo de la época”, el visitante es “observado” por la mirada aguda del artista en un autorretrato que destaca entre el resto que lo rodea.
De entre los cuadros seleccionados se encuentra uno que Dix le hizo a su esposa Martha y a sus hijos Nelly y Ursus.
“Hizo retratos a personas famosas y a los que no lo eran; aquí vemos un autorretrato que es una de las piezas principales de la exposición, estamos viendo a Dix con su famosa mirada afilada hacia el presente”, indicó Lorenz .
Al detenerse en el cuadro donde aparece el propio Dix sosteniendo a su hijo Jan, la curadora celebró la presencia del nieto de Otto, quien es hijo de ese pequeño niño que en la pintura esta sentado en el hombro de su progenitor.
Ulrike aprovechó para agradecer a la familia del pintor, por haber prestado este cuadro para esta exposición.
Cabe mencionar que a mediados de los años 30 Dix fue destituido como profesor de la academia de Dresde y señalado como un artista “degenerado”.
“La dictadura nazi empezó a cambiar la forma de vivir y el trabajo de Dix en forma radical; lo despidieron de la academia de artes en Dresde y lo acusaron de ser un artista degenerado y le prohibieron exhibir sus obras”, refirió .
La muestra cierra con el segmento “La guerra y la paz. En la Europa dividida. Después de haber participado en la Segunda Guerra Mundial, el artista experimentó con otra técnicas, pero no logró adaptarse a las corrientes Realismo Socialista de la República Democrática Alemana , ni con el Arte Abstracto de posguerra de la República Federal Alemana, sin embargo en ambas Alemanias, sus obras gozaron de gran reconocimiento.
“Otto Dix. Violencia y pasión”, permanecerá abierta al público hasta el domingo 18 de septiembre y luego será trasladada al Museo Nacional de Arte (Munal). El catálogo editado por el Goethe-Institut Mexiki se encuentra disponible en la Tienda MARCO.