
El 5 de junio de 2009, 49 niños perdieron la vida durante un incendio en la guardería ABC, de Hermosillo. Es una fecha trágica en la historia moderna de México. Nadie esperaba que un dolor tan grande llenara de luto a todo el país, muchos prefieren no recordarlo porque es como abrir una herida que aún está fresca; otros siguen buscando justicia.
Pero ¿quién devolverá a los padres que perdieron a sus hijos en la tragedia la risa, la esperanza y la ilusión?, ¿quién se hará responsable de llevar sobre sus espaldas el dolor de ver partir a un niño que ni siquiera había empezado a vivir?
Otros vivirán el resto de sus días con las marcas que esa fecha dejó sobre sus cuerpos.
Al cumplirse seis años de ese acontecimiento, el grupo teatral La Casa Azul llevó a escena una estremecedora lectura dramatizada. El escenario fue Bistro Galería Cocina Arte, en el Barrio Antiguo.
Gracias al trabajo de los actores Nena Pineda, Luis de la Cruz, Linda Salgado, Víctor Núñez, Joaquina de la Cruz, Fernando Gaona, Anahí Alonso y José Julio Llanas, unos 50 espectadores, algunos entre el horror y la indignación, al grado de que tuvieron que abandonar el local al no poder contener el llanto, revivieron una fecha triste.
La pieza original de Humberto Robles se desarrolla en un acto y no pretende buscar respuestas, tampoco ofrece encontrar culpables, simplemente muestra a través de un texto realista, tanto que en ocasiones es crudo, un hecho que entristeció e indignó a la sociedad mexicana.
A través de los actores, Robles da voz a personajes de la política mexicana de la época y funcionarios, pero especialmente a los papás de los niños que no terminan por entender qué fue lo que realmente sucedió, a pesar de las explicaciones del gobierno.
No hubo necesidad de mayor escenografía que ocho sillas colocadas de forma semicircular, imágenes de los pequeños en las paredes del local y un pequeño altar con 49 velas, además de juguetes como muñecos de peluche.
El elenco, vestido de blanco, contagiado por la tristeza colectiva que inundó el lugar, por momentos trastabillaba en su lectura, sin embargo, al final logró su cometido.
Víctor Vázquez, quien además dirigió el montaje, se dirigió a la audiencia agradeciendo su presencia, pero también envió un mensaje.
“Fue hace seis años cuando México vivió una de sus más grandes tragedias modernas. Hace seis años 49 familias fueron enlutadas y sus voces todavía piden justicia, ¿vamos a quedarnos callados? Gracias por sus asistencia”, expresó.