Con dos emotivas ceremonias realizadas en Reynosa, Tamaulipas y Monterrey, Nuevo, León para celebrar sus 40 años de trayectoria periodística, se reunieron amigos, familiares y compañeros de profesión del Director Editorial General de la empresa Hora Cero, Héctor Hugo Jiménez Castillo.
Entre nostalgia, emociones y la sorpresa de haber sido recibido con su familia en la puerta de la sede del periódico por el director general, Heriberto Deándar Robinson, el homenajeado en un efusivo abrazo agradeció las atenciones a él y al personal que lo esperaba.
Citados con anterioridad, los invitados en el área de prensa le dieron una cálida bienvenida entre aplausos, mientras el periodista permanecía visiblemente emocionado. Los saludos de mano, las felicitaciones y las palmadas en la espalda le demostraban el aprecio y el reconocimiento a esas cuatro décadas de incansable trabajo en el periodismo.
Entre las máquinas donde se han impreso cientos de ediciones y con el olor permanente a tinta y papel, se procedió a proyectar un video conmemorativo que resumía la carrera de Héctor Hugo Jiménez.
Al terminar, Heriberto Deándar, amigo y socio de Héctor Hugo, recordó sus inicios juntos y las dificultades que enfrentaron en la construcción de una empresa sólida y respetada.
“Este evento es para ti, Hugo, y te llevará por un cúmulo de emociones. Todo lo bueno de esta noche es obra de tus compañeros y amigos que te admiran y respetan. De tus 40 años de periodista, 26 son aquí, en Hora Cero. ¡Muchas felicidades, sabes que te aprecio mucho!”, expresó al tiempo que le
hizo entrega de un reconocimiento especial.
Paola Almaráz, su esposa, le dedicó un conmovedor mensaje en el que resaltó la pasión y el profesionalismo con el que ha desarrollado su trabajo periodístico a lo largo de los años.
“Quiero compartirles que siento una gran admiración por Hugo, no solo como esposo, sino como jefe”, reconoció.
Y con una portada especial de Hora Cero con las imágenes de los momentos más significativos de su carrera que le obsequió, concluyó ese mensaje de reflexión.
Ante estas muestras de afecto, conmovido Jiménez Castillo les expresó su gratitud extendiéndola a los presentes: “Primero, me emociona mucho esta sorpresa de Beto. Me dijo: ‘te voy a hacer una sorpresa pero dime cuándo vas a venir’, y definimos el 4 de octubre. Ver rostros que hace mucho no veía me llena de emoción. Esta es una travesía de 26 años de anécdotas, y podría escribir un libro con todo lo que hemos vivido en esta empresa que tanto quiero. Jamás pensé que aquella vez, cuando llegué ‘trajeado’ a Hora Cero, sería el inicio de una historia tan larga y significativa”.
Recordó también el consejo que dio a Heriberto: “Le dije a Beto que el periódico tenía una crisis de identidad, y juntos decidimos darle un perfil con más sustancia editorial. Eso marcó el inicio de nuestro crecimiento, con reportajes, entrevistas y una propuesta periodística más sólida. Me siento agradecido por haber sido parte de este equipo por tantos años”.
El evento continuó con la develación de una placa conmemorativa en su honor, en la que queda grabada con su nombre la Sala de Redacción; un gesto que reflejó el legado imborrable que deja en la empresa que ayudó a forjar.
La celebración culminó con una cena y brindis entre los asistentes, expresiones de felicidad, nostalgia y recuerdos.
GRAN EVENTO EN MONTERREY
Pero las celebraciones no terminaron ahí. El pasado 16 de octubre, las instalaciones del Museo de Historia Mexicana se vistieron de gala para celebrar las cuatro décadas de Jiménez Castillo en el periodismo.
Ahí, alcaldes como David de la Peña y Andrés Mijes, de Santiago y Escobedo, respectivamente, se unieron a jefes de prensa, legisladores, periodistas, amigos y familiares del homenajeado.
Al hacer uso de la palabra, Paola Almaraz, editora de Hora Cero y esposa del director editorial general, resaltó el impacto que ha tenido sobre las nuevas generaciones.
“Nos ha enseñado que no hay límites para alcanzar las metas, que ejerciendo el periodismo con profesionalismo y pasión se puede lograr que la ciudadanía sea escuchada, que una injusticia o falta de servicios sea atendida, que una buena investigación descubra desvíos de recursos y que una buena historia logre tocar el corazón del público”, señaló.
Héctor Hugo y Marco Sebastián, hijos del homenajeado, le aportaron ternura al evento al sorprender a su papá con un par de presentaciones artísticas que fueron del gozo de los presentes.
Mensaje de Paola a su esposo, y al periodista
Qué gran emoción ver aquí reunidas a tantas personas tan queridas y que siempre han demostrado un gran cariño y respeto a mi esposo, y mi jefe Héctor Hugo Jiménez Castillo.
Les quiero compartir que le tengo gran admiración a Héctor Hugo por su amplia trayectoria periodística.
“Aunque no lo crean, él sigue siendo mi jefe, con esa exigencia que lo caracteriza y que todos en esta empresa han experimentado. Desde aquella primera entrevista y examen de redacción en septiembre de 2008, él marcó mi carrera como reportera”.
Consideró que esa exigencia y dedicación de Héctor Hugo han sido un pilar en Hora Cero, no solo para ella, sino para todos los que han trabajado bajo su dirección.
“Nos ha enseñado que no hay límites para alcanzar las metas, que ejerciendo el periodismo con profesionalismo y pasión se puede lograr que la ciudadanía sea escuchada, que una injusticia o falta de servicios sea atendida, que una buena investigación descubra desvíos de recursos y que una buena historia logre tocar el corazón del público”, señaló.
Visiblemente emocionada, concluyó sus palabras con un homenaje lleno de cariño hacia su esposo: “Amor, felicidades por estos éxitos y por este amor desmedido hacia Hora Cero. Nos contagias ese amor por la camiseta, por hacer buen periodismo y por luchar siempre por la justicia. Te admiro, te adoro, y estoy segura de que tus hijos: Andrea, Héctor Hugo y Marcos Sebastián están creciendo con este gran ejemplo de responsabilidad, entrega y profesionalismo. Estoy convencida de que, aunque digas que te vas a ir, seguirás rindiendo frutos con la fórmula que nos has enseñado.
¡Muchas felicidades, te amo mucho!”.