La creencia de que a través de un “me gusta” o un “compartir” en las redes sociales se pueden salvar vidas puede sonar ingenua, pero es gracias a estas funciones que la asociación Blooders promueve la donación altruista de sangre.
Motivados con crear una cultura de donar el tejido para salvar las vidas de hasta 12 personas y no sólo cuando un familiar lo necesita, los hermanos César y Javier Esquivel crearon Blooders.
El nombre de la organización es la fusión de los términos en inglés “blood” (sangre) y “brother” (hermano).
A través de las cuentas oficiales en Twitter y Facebook, los fundadores de la asociación ayudan de manera gratuita a encontrar donadores para quien más lo necesita.
“Mucha parte de la labor de Blooders es vía redes sociales; creemos mucho en que la tecnología nos permite llegar a muchísima gente en muy poco tiempo”, aseguró César, ingeniero biomédico y catedrático en la UDEM.
La decisión de manejarse vía Facebook y Twitter, indicó, es porque las redes sociales tienen un bajo costo y les permiten llegar directamente a su mercado meta: los jóvenes universitarios.
“No queremos tener oficina, no queremos ser una asociación de hacer sorteos o cenas de gala, no va como parte de la filosofía de Blooders. No nos van a ver boteando ni haciendo concursos”, recalcó César.
Blooders no cuenta con oficina ni con personal fijo; las reuniones se realizan en una de las salas de juntas de la universidad en ratos libres y los que integran el proyecto son voluntarios.
Actualmente el equipo de Blooders está conformado por los hermanos César y Javier Esquivel, ocho estudiantes de la UDEM y dos expertos en marketing e innovación social que fungen como mentores con los jóvenes en sus respectivas áreas.
Aunque las redes sociales son la herramienta principal en la que se apoyan, los integrantes de la organización tienen claro que no todo el trabajo lo hará la tecnología.
“Yo creo que al principio lo veíamos todo digital, que no íbamos a tener que acercarnos con personas ni con hospitales ni con médicos, sino que íbamos a lanzar la plataforma, todos se iban a registrar y todo iba a funcionar en línea; pero después nos dimos cuenta que no es así, tienes que tener la parte donde vas con hospitales, haces campañas, te acercas con personas, que es lo que estamos haciendo ahorita”, dijo Javier, estudiante de ingeniería en tecnologías computacionales en la UDEM.
BLOODERS PARA SMARTPHONES
Hasta el momento, las redes sociales son la vía por la cual los Blooders ayudan a todas las personas que necesitan del tejido hemático; pero a la par se encuentran creando una herramienta para agilizar el proceso de donación: una aplicación para smartphones, la cual lanzaran en enero para iOS y Android.
“Queremos trasladar la experiencia que hacemos en las redes sociales a la aplicación, que la gente pueda solicitar sangre a través de la aplicación y que por otra parte se haga el ‘match’ con las personas que también tienen la aplicación y sean donantes”, informó Javier, encargado del desarrollo de la aplicación.
De acuerdo a Javier, otro de los motivos por los que decidieron lanzar la app es porque “nos va a ayudar a llevar un control de cuántas personas van a donar, porque actualmente no tenemos la manera de contarlos y si no tenemos esas estadísticas, no podemos mejorar”.
Además este servicio tendrá otras funciones como poder registrar todas las donaciones que ha realizado el usuario, agendar citas con hospitales para minimizar el tiempo de espera a la hora de donar y hasta acumular puntos para obtener pines conmemorativos.
Para poder darse de alta como “blooder” en la aplicación, primero pedirá registrarse con Facebook o Twitter.
De los perfiles se tomara ciertos datos como nombre, edad y lugar de residencia y sólo se pedirá el tipo de sangre.
Después se hará una precalificación con una serie de preguntas muy específicas, como si el usuario tiene tatuajes o padeció alguna enfermedad, para poder ser dado de alta como donador potencial.
En caso de que alguien necesite el tejido hemático, serán contactados los usuarios con el mismo tipo de sangre para que acudan al hospital donde se encuentre el paciente para una prueba y donación correspondiente.
De ser aprobada la unidad, una vez hecha la donación se otorgará un código QR para detectar que la persona realizó el proceso.
La experiencia del usuario se incrementa al tener la opción de compartir en sus redes sociales la donación o realizar “check in”.
“Esta app es solamente un eslabón, porque el proyecto ocurre en la vida real, solamente toma fuerza con la plataforma y la tecnología lo ordena porque la app por sí sola no va a hacer nada”, mencionó Javier.
“DONAR SANGRE TE PERMITE SALVAR HASTA 12 VIDAS AL AÑO”
Entre los objetivos principales de la asociación es el implementar una cultura de donar por altruismo y no sólo cuando un ser querido lo necesite.
“Mucha gente dice que dona si su familia lo ocupa, pero si su familiar no necesitó sangre todo el año se privan de salvar hasta 12 vidas”, destacó César.
Uno de los principales problemas es toda la serie de mitos que hay sobre la donación de sangre.
“Es muy impresionante los paradigmas que hay, desde ‘si dono voy a engordar’ hasta ‘tengo un tatuaje, no puedo’, y no, sí pueden donar, siempre y cuando haya pasado un periodo de un año desde que se realizó el tatuaje; el mismo caso es con los piercings”.
Para promover la donación altruista del tejido, en la asociación actualmente se encuentran planeando una serie de campañas.
“Queremos lanzar una campaña para Navidad porque es una buena época para regalar y qué mejor que regalar algo de ti; para el otro año queremos promover la donación en los cumpleaños porque qué más buena vibra que empezar un nuevo año y regalar vida a tres personas”, señaló César.
LA HISTORIA
DE BLOODERS
Desde hace algún tiempo los hermanos tenían la inquietud de crear una asociación que tuviera el mayor impacto en poco tiempo y con los menores recursos posibles, pero se enfocó en la donación de sangre luego de que César conoció los problemas de uno de sus compañeros de trabajo para conseguir donadores para su esposa.
“Me decía que batallaba mucho con las donaciones porque su familia ya había donado y no encontraba quién lo pudiera ayudar. Después fuimos conociendo casos de otras personas que nos mencionaban que tenían esos mismos problemas y nos fuimos adentrando hasta ver que es un asunto muy complicado a nivel nacional”, comentó.
Tras conocer esta problemática, Javier y César decidieron participar en el “StartUp Weekend” – evento en el cual se debe formar una empresa en 54 horas-, se aliaron con un especialista en marketing y una de diseño y crearon Blooders.
El evento se realizó en abril de 2013, pero el proyecto quedó en pausa hasta diciembre, mes en el que comenzaron operaciones.
Por ser un proyecto innovador y pionero en su rubro, Blooders comenzó a llamar mucho la atención de personas de diferentes partes del mundo, e incluso les piratearon la idea.
“En India nos piratearon nuestras ideas y las implementaron” dijo César, mientras que Javier recalcó que “al piratear nos referimos a que entraron a la página e hicieron ‘copy paste’, nada más le cambiaron a su idioma”.
Aunque esto los hizo enojar, el gusto los invadió por lograr que su proyecto traspasara fronteras y prefirieron dejarlo de lado para concentrarse en su asociación.
Como aún se encuentran en etapa de desarrollo, los recursos no se han convertido en un problema para los integrantes de la asociación, pues desde que comenzaron se establecieron el objetivo de operar con una mínima inversión.
“Realmente los recursos de operación son muy bajitos, tienen que ver con un dominio de internet, hospedaje de servidores; hasta el momento no han sido un tema los costos, y no creemos que lo vayan a ser en un corto plazo.
“Todo lo que se ha logrado con Blooders ha sido con una inversión no mayor a cuatro mil pesos”, aseguró César.
Los jóvenes comentaron que hasta el momento la única inversión fuerte que han realizado fue para darse de alta como asociación civil, por lo que organizaron una tocada en un bar de San Pedro en abril para recolectar los fondos necesarios.
Blooders quedó registrado como asociación civil en mayo de 2014 y actualmente está en proceso para darse de alta como una donataria autorizada.
“Con ese evento logramos registrarnos, además recibimos un donativo de la asociación Ashoka U y con eso compramos banners y playeras, hemos vendido termos; no queremos que esto se detenga por dinero”, indicó Javier.
Todo el equipo de Blooders tiene muy en claro que entre más crezca la asociación, más recursos van a necesitar, pero más que pensar en mediano o largo plazo, prefieren aferrarse a sus principios.
“Sabemos que en un mediano plazo se puede presentar la necesidad de abrir una oficina como tal, tal vez tener ahí personal o hacer una inversión de capital considerable, pero en este momento no lo tenemos completados, estamos muy esbeltos”, señaló César.
“REBASAMOS NUESTRAS METAS”
Los “blooders” no dejan todo en manos de la tecnología, pues para ellos la aplicación y su continua actividad en redes sociales son sólo para reforzar el trabajo que realizan a diario.
“Hemos estado varias ocasiones en San Pedro de Pinta, tuvimos un evento con la comunidad de médicos de Nuevo León y quedaron muy interesados en nosotros y próximamente vamos a empezar a trabajar directo con tres hospitales en Nuevo León: Ginequito, Swiss Hospital y Hospitalia”, comentaron los miembros de la organización.
El crecimiento que ha tenido hasta el momento esta plataforma altruista ha hecho que personas de diferentes partes del país se interesen en formar parte del proyecto.
De acuerdo a César, gente de Tuxtla Gutiérrez, Monclova, Veracruz y Distrito Federal ya se han puesto en contacto para realizar una colaboración con la organización.
Los hermanos Esquivel Téllez están planeando en convertir Blooders en una plataforma abierta “para que personas de cualquier parte del país puedan implementar Blooders a través de ciertos lineamientos, sin necesariamente nosotros tener que ir a implementarlo”.
Para los integrantes de la asociación, esto demuestra que las metas establecidas para el año en curso fueron rebasadas.
“Queremos incrementar el número de hospitales donde estamos presentes de tres a 10 y echar a andar bien nuestro proyecto en el DF y Monterrey. Creo que si nos posicionamos bien va a ser muy importante para un crecimiento”.
¿Cómo ser
un blooder?
:: Vía web:
A través de la página www.blooders.org se puede registrar vía Facebook o Twitter.
De los perfiles se tomarán el nombre, ubicación y edad del usuario y sólo pedirá ingresar su tipo de sangre.
:: Vía app para Smartphone (disponible en enero para iOS y Android):
-Descargar la aplicación
-Registrarse con Facebook o Twitter.
-Automáticamente se registrará nombre, edad y lugar de residencia y el usuario sólo tendrá que ingresar su tipo de sangre.
-Contestar una serie de preguntas de precalificación para poder ser dado de alta como donador potencial.
-En caso de que alguien necesite el tejido hemático, serán contactados los usuarios con el mismo tipo de sangre para que acudan al hospital donde se encuentre el paciente para una prueba y donación correspondiente.
-De ser aprobada la unidad y una vez hecha la donación, se otorgará un código QR para detectar que la persona realizó el proceso.
:: Redes Sociales:
Facebook: /somosblooders
Twitter: @somosblooders