
De nueva cuenta miles de mujeres regiomontanas tomaron las calles del Centro de la Ciudad para exigir respeto a sus vidas y dignidad en el marco de la conmemoración del 8M o Día Internacional de la Mujer.
Tal y como se ha vuelto una costumbre, integrantes de distintos colectivos pero, especialmente, mujeres en general, salieron a las calles acompañadas de sus hijas para protestar por los feminicidios, la cultura del machismo y la desigualdad en comparación con los hombres.
Como sucede cada 8M, las integrantes de la llamada “Brigada Negra” realizaron pintas y destrozos en monumentos y edificios ubicados en las calles por donde pasó el contingente.
Al igual que cada año, estos grupos intentaron dañar el Palacio de Gobierno que fue protegido con vallas metálicas que fueron atacadas con fogatas y algunos petardos.
Al final, se reportó saldo blanco.