
Por Erick Melchor y Emilio Ibarra
Los 52 mil 810 asistentes (un récord para la Liga MX) que asistieron a la edición 128 del Clásico Regiomontano, tuvieron que regresar a sus casas con el sabor agridulce de haber presenciado un juego intenso, pero sin goles.
Llegó el silbatazo del árbitro y la edición 128 del clásico regio terminó con un empate sin goles que mantiene a los dos equipos de la ciudad en lo más alto de la tabla junto a Toluca.
Aún así la afición de Monterrey, como se ha vuelto costumbre, cumplieron con su parte al llenar las gradas del BBVA y convertir este partido, en la fiesta futbolera que siempre ha sido.