El regiomontano Juan Fernando saldó una deuda que tenía pendiente con su afición, al triunfar en una tarde de mucho compromiso y convencer de que en él todavía hay un torero que puede llevar en alto la bandera de Monterrey.
Y es que tras la maciza faena que cuajó ayer a su primer toro en la Plaza “Santiago Medina – Los Jacales”, el regio elevó sus bonos y en sí mismo la confianza.
Joselito Adame, quien también se presentó en este coso, cumplió con creces su actuación al superar la poca colaboración de su primer enemigo, mientras que el primer espada, Antonio Ferrera, ocasionó la gran entrada que se registró en el coso a las faldas del Cerro de la Silla y con dos faenas macizas se ganó el aplauso del público.
Tras el paseíllo se guardó un minuto de silencio en memoria de los recién fallecidos, el apoderado Rafael Báez, el matador de toros regiomontano Raúl García y el novillero en retiro Ricardo Sepúlveda.