
Nathalie Vilchis, joven regiomontana quien cursa el quinto semestre de Ingeniería en Mecatrónica en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, tiene un sueño: representar a México trabajando en un proyecto de la agencia espacial de los Estados Unidos (NASA, por sus siglas en inglés).
Su perseverancia la llevó a aprovechar todas las oportunidades que se le pusieron enfrente y logró convertirse en una de los tres estudiantes mexicanos (la única mujer, por cierto), seleccionados realizar una estancia de investigación en el Laboratorio de Propulsión de Jet de la NASA, con sede en California, Estados Unidos.
“Hace unos años, creía que la industria aeroespacial era un área de estudio reservada solo para ciudadanos de países altamente desarrollados y mentes brillantes con las que no podía compararme.
“Sin embargo, nunca perdí interés y curiosidad por la ciencia y la tecnología aeroespacial. Fue hasta que tuve la oportunidad de participar en el International Air and Space Program en la NASA, obteniendo el primer lugar 2 años seguidos, cuando me di cuenta que para abrirme camino en el sector aeroespacial no necesitaba ser un genio, pero una ingeniera altamente motivada, comprometida y muy perseverante”, expresó.
Su deseo por alcanzar las estrellas es tanto, que desde hace años se ha involucrado en todos los proyectos aeroespaciales que puede, obteniendo grandes resultados.
“Desde el inicio de la carrera traté de involucrarme en todo lo relacionado a temas aeroespaciales, como siendo parte de la Sociedad Astronómica del Tecnológico de Monterrey, donde divulgamos la ciencia del espacio haciéndola accesible para público de todas las edades.
“Por otro lado, he estado trabajando en la investigación y desarrollo de tecnología aeroespacial junto con mis profesores y en conjunto con la Universidad Metropolitana de Tokio. Trabajamos con proyectos como el desarrollo de un brazo robótico espacial, giroscopios y sistemas autónomos de aterrizaje. Al mismo tiempo formo parte del grupo SPACE MAKERS de la universidad, donde hacemos posible todos estos proyectos”, dijo.
De hecho, el proyecto en el que ha sido seleccionada, contempla trabajar en la construcción de un taladro capaz de perforar a muy bajas temperaturas, mismo que sería utilizado en un futuro en misiones de exploración de las superficies de Marte y Júpiter.
Sin embargo, para poder acudir a esta estancia, Nathalie requiere de 240 mil pesos, con los que pagaría los gastos de manutención en California.
“Para que pueda continuar con el proceso, al ser ganadora de esta convocatoria y conforme a las reglas de la NASA, el financiamiento para este viaje no puede provenir de los fondos personales del seleccionado o familiares. Forzosamente tiene que venir de compañías, universidades, fundaciones o terceros.
“Se me pide presentar un comprobante de fondos de al menos 2 mil 400 dólares por mes para cubrir alojamiento, transporte, comida, entre otros gastos. Siendo una estancia de 5 meses se necesita un total de 12 mil dólares”, explicó.
Ante ello, desde hace un par de meses ha mantenido una campaña en la que está solicitando el apoyo para reunir los recursos necesario para poder asistir a esta estancia y no perder la oportunidad de representar a México en la NASA.
“Puse mucho esfuerzo en crear una buena aplicación, ordenar mi currículum y resaltar sobre todo mi pasión por el espacio. Este es un logro que va más allá de una aplicación, pues es el trabajo de años de perseverancia donde constantemente le apuntaba a una sola meta… el espacio”, dijo.
En esta campaña ya ha recibido el apoyo de varias instituciones y personas, como el senador de la República Samuel García, además de que ya fue contactada por el gobernador, Jaime Rodríguez Calderón.
Nathalie informó que las contribuciones pueden hacerse en línea por medio del portal de Internet https://www.inixar.com/proyectos/chica-nasa, además de que pueden seguir todos los avances de este proyecto en el perfil de Facebook https://www.facebook.com/Chica-NASA-110737117094070/?modal=admin_todo_tour.
La joven dijo que cualquier donación es bien recibida, además de que tiene el firme propósito de retribuir el apoyo que le han proporcionado hasta ahora.
“Quiero retribuirlo todo en algún futuro que me sea posible. De tener éxito en esta campaña quedaré inmensamente agradecida con la sociedad y también con una gran deuda hacia ella.
“En cuanto mis posibilidades me lo permitan y a lo largo de mi vida quiero regresar todo este apoyo financiero a jóvenes mexicanos que, como yo, tengan sueños de ciencia y por supuesto que a ellos también les pediré que lo retribuyan a la siguiente generación. No solo les pido que me apoyen a mí, sino que lo inviertan en México”, finalizó v