
Recientemente abrió sus puertas al público “Our Body. El universo dentro”, en el sótano de la Nave Lewis dentro del Parque Fundidora, con el propósito de mostrar los “secretos” del interior del cuerpo humano, lo cual habitualmente sólo está permitido para los estudiantes de medicina.
Como piezas de museo, el corazón, pulmones, intestino y otras partes de la maquinaria perfecta que está compuesta por músculos, huesos, vísceras y piel, son expuestos ante los ojos de todos aquellos que si bien habían visto la estructura del cuerpo en la clase de biología, no habrían podido imaginar cómo es cada parte en su dimensión real.
La exhibición está integrada por 13 cuerpos, dos torsos, 150 órganos entre muestras individuales de los huesos, venas y arterias. Los cuerpos y demás piezas fueron sometidos a un proceso de deshidratación y un tratamiento a base de polímeros para su conservación.
Klaus Porias, coordinador de la muestra “Our Body. El universo adentro”, comentó que es una exposición apta para todo público, ya que pueden asistir en familia o en grupos escolares, la idea es que conozcan un poco más acerca de nuestra fisionomía.
“Todos estos cuerpos son reales, pasan por un proceso donde se plastifican, es decir, se les vacían los líquidos y después se les ponen polímeros y silicones para conservar las piezas.
“De ahí se les va moldeando de acuerdo a la postura que se quiere o el órgano que se va a recuperar. Las piezas están coloreadas a propósito para marcar las venas y arterias, pero todas son reales”, apunto Porias.
Destacó que todos los cuerpos proceden de la Universidad de Hong Kong y que actualmente hay una lista de 40 mil voluntarios que ofrecen su cuerpo físico a posteriori para este propósito.
“Todos son donados en vida o por sus familiares. No sabemos su edad y otros pormenores, pero en algunos casos sí se sabe de qué murieron, porque esa es la pieza que se quiere conservar, siempre se va a tratar de poner lo sano con lo enfermo, para tener esas dos opciones y que vean los estragos que produce el tabaco en los pulmones, o la grasa en las arterias”, señaló.
Agregó que los visitantes podrán entender el funcionamiento de los diferentes sistemas, pues el recorrido está dividido en seis módulos: sistema músculo esquelético, sistema nervioso, sistema respiratorio, sistema digestivo, sistema urinario y reproductor y sistema cardiovascular.
En cada una de estas áreas se muestra un cuerpo en el que se destacan los órganos que corresponden, es decir, en el sistema músculo esquelético, el cuerpo fue seccionado de tal forma que se pueda ver la estructura ósea.
En lo que se refiere al sistema respiratorio, destaca un aparador en el que se exhiben los pulmones sanos y los enfermos, que pertenecieron a un fumador, o en el sistema cardiovascular se muestra una arteria dañada y otra en perfectas condiciones.
Además de la información detallada sobre el miembro en cuestión, aparecen también algunos datos sobre las primeras exploraciones de las que se tiene registro en la historia e incluye algunas citas sobre reconocidos científicos y filósofos haciendo alusión al cuerpo humano.
Porias indicó que paralelamente hay una especie de viaje en el tiempo, para que la gente tenga una idea de que desde hace siglos existía la obsesión por preservar el cuerpo: desde el proceso que seguían los egipcios para la momificación hasta cuando fueron permitidas las primeras disecciones, lo que les permitió a los pioneros en la cirugía conocer más a fondo el funcionamiento de nuestro sistema interno.
Comentó que además de ilustrativa y didáctica, la instalación que estará en el sótano de la Nave Lewis hasta el próximo 8 de diciembre, pretende crear conciencia sobre el cuidado que le damos a nuestro cuerpo.
“Our Body. El universo dentro”, se exhibe de las 10:00 hasta las 21:00 horas todos los días y el costo para adultos es 100 pesos y 60 para los menores.