
En los últimos meses el término “no binario” se ha vuelto frecuente en nuestro vocabulario, ya que algunas celebridades, como cantantes, actores e influencers, se han declarado como personas no binarias.
Tanto las redes sociales como los medios de comunicación han incluido esta expresión que entra en la categoría de la diversidad sexual.
Recientemente, el pasado 17 de mayo, en el marco del Día Internacional contra la Homofobia, Bifobia y Transfobia, el canciller Marcelo Ebrard entregó el pasaporte no binario al “magistrade” Ociel Baena y anunció que ya es posible que las personas solicitantes puedan elegir el marcador “X” para la casilla de sexo de su pasaporte, sin necesidad de especificar su género.
Esta acción representa un logro para la comunidad LGBTQ+, pero el resto de la población tiene muchas dudas y confusión con toda la nueva información que se está manejando al respecto.
Sobre este tema, la doctora Lourdes Mantecón-Garza, médico internista certificada como terapeuta en sexualidad (por el AASECT) y sexóloga clínica, señaló que es muy importante entender la diferencia entre género y orientación sexual, así como el sexo anatómico y la identidad sexual.
“El principal problema que tenemos nosotros, es que utilizamos palabras que significan diferentes cosas y nos referimos a eso como si fueran lo mismo, por ejemplo, la palabra género. El género, estrictamente hablando desde el punto de vista de la ciencia, se refiere a cosas, animales, plantas, humanos, etcétera, del mismo tipo.
“También tiene relación a cómo me presento en sociedad, para decir si soy hombre o mujer, y de igual manera se utiliza como identidad. Es decir, tenemos una mezcolanza y la palabra género se utiliza indistintamente y muchas veces las personas no tienen muy claro sobre lo que están hablando”, afirmó.
SEXO ANATÓMICO
La especialista explicó que la sexualidad humana está integrada por cuatro factores básicos: El Sexo Anatómico, la Identidad Sexual, el Género y la Orientación Sexual.
“El sexo anatómico está definido por lo que llamamos el fenotipo, el fenotipo es la expresión física de los genes: tu naces xx o naces xy y todos los que nacemos sanos tenemos definido nuestro fenotipo-genotipo como macho o hembra de la especie. Y en ese sentido corresponde a género cosas del mismo tipo: los machos de nuestra especie tienen pene y testículos, mientras que las hembras tienen vulva, vagina y útero.
“Entonces hay dos tipos de géneros para los humanos: los machos y las hembras. Todas aquellas personas que tienen anomalías genéticas que afectan sus genitales nacen con lo que se conoce como genitales ambiguos. Hay otros que las anomalías genéticas afectan los caracteres sexuales secundarios y se observa tardíamente hasta la adolescencia, afectando menstruación o salida de la barba, cambio de la voz, etcétera”.
Añadió que cuando se detectan los genitales ambiguos a un bebé, se procede una serie de trabajo multidisciplinario que involucra a pediatras, psicólogos, genetistas, para hablar con los padres.
Destacó que actualmente hay medios para poder hacer un diagnóstico correcto, lo que no sucedía en el pasado.
“Y lo importante que hay que entender es que hay algún tipo de anomalías genéticas que se expresan hasta la adolescencia, pero eso no quiere decir que no tengan disfunciones y ya no nacieron sanos, pero para todos aquellos que nacen sanos, hay dos tipos de género humano: el macho o la hembra”, indicó.
IDENTIDAD SEXUAL
Lourdes Mantecón-Garza, autora de “Sexualidad Sana. Información Médica para Adultos”, dijo que el otro factor que se debe entender muy bien es el de la Identidad Sexual.
“La identidad sexual viene de la mente, y la mente viene del cerebro, y ¿cómo se crea la identidad sexual?, no sabemos, pero la mente reconoce nuestro cuerpo, y entonces dice: soy macho o soy hembra de la especie.
“Por ejemplo, una mujer nace con vulva y su mente dice: soy hembra de la especie, y entonces en este caso la definición sería que es ‘cisgénero’, y las personas que son transgénero tienen un problema porque su mente no reconoce que es macho o hembra (hombre o mujer) al voltear a ver sus genitales o sus características sexuales secundarios (como las mamas desarrolladas).
“Entonces, una mujer trans, ¿qué genitales tiene?, si es trans ¿significa que su mente no identificó a su cuerpo?, y por lo tanto tiene genitales de macho de la especie, pero su identidad es de mujer”, enfatizó.
GÉNERO
Apuntó que el otro factor que se integra a la sexualidad es el género, ya que a través del género nos presentamos ante la sociedad y este tiene que ver con el entorno en el que cada individuo se desarrolló.
“Este significado de la palabra género es totalmente adquirido, pues implica el que es ser hombre y el que es ser mujer, porque no es lo mismo ser un hombre de Inglaterra, un hombre del Amazonas, o de cualquier otra parte del mundo. Te vistes diferente, te conduces diferente. Si por ejemplo tú hubieras nacido en Arabia Saudita, no te pondrías la ropa que generalmente usas.
“El concepto familiar, religioso, educativo, tu personalidad, todo lo adquirido en cómo me presento en sociedad, y bajo este concepto de género adquirido, es cuando empezamos a utilizar las palabras ‘hombre’ o ‘mujer’, y como son dos opciones, por eso es binario. Pero hay personas que dicen: ‘yo no soy ni hombre ni mujer, yo soy no binario’, y a partir de ahí es válido pedirles que nos indiquen la forma en que quieren que nos refiramos a su persona”, expresó.
ORIENTACIÓN SEXUAL
Una vez que están claros todos los puntos anteriores, se tiene que pasar al siguiente que no es menos importante: la Orientación Sexual.
“La orientación sexual es para saber qué me atrae sexualmente y no tiene nada que ver con el género, no tiene que ver con la anatomía, ni con la identidad sexual, son factores básicos primarios independientes, pero que, al integrarse, hace que tengamos un perfil sexual.
Añadió que estos cuatro factores se integran durante nuestro desarrollo, y que la identidad de género y la orientación sexual se descubren al compararnos e identificarnos con otros y al sentirnos atraídos hacia otros; generalmente sucede en la etapa de la adolescencia, pero en muchas ocasiones sucede ya cuando se llega a la edad adulta.
“Es que depende en donde te tocó nacer, depende de tu familia, religión y de tu personalidad, pues hay quienes son más reservados y empiezan a notar el conflicto de no sentirse bien con su cuerpo, o de hacia quien se sienten atraídos sexualmente, pero al mismo tiempo quieren cumplir con la sociedad.
“Hay controversia en el sentido de que no se asigne una identidad de género a recién nacidos (como mujer u hombre) y dar la opción a los padres o tutores de que se opte por dejarlos sin designar y no estoy de acuerdo.
“Creo que se debe continuar con el sistema binario de acuerdo al fenotipo-sexo anatómico y permitir el proceso de aprender y absorber para identificarse y poder decir primero soy un ser humano y me reconozco como hombre, mujer, no binario u otro, y cómo tal también se descubrirá la orientación sexual”, aseveró.
Sobre las diferentes definiciones de orientación sexual mencionó Plolysexual: sexualmente o románticamente atraído hacia más de un género; Pansexual: sexualmente o románticamente atraído a personas independientemente de su sexo o identidad de género; Bisexual: sexualmente atraído por hombres y por mujeres; Pomosexual: quien no elige una orientación sexual como homosexual, bisexual o heterosexual.
