De pronto el salón Magno de Cintermex parecía un set de la película Star Wars: decenas de stands exponiendo productos de última generación en cuanto a tecnología y movilidad, desde simuladores para capacitación, hasta enormes drones que funcionarían como taxis aéreos y perros robots para vigilar.
Y es que en Nuevo León se realizó la Primera Feria dedicada a la Movilidad del Futuro, donde hubo decenas de exponentes que a más de uno le robaron la atención.
Ya no se trataba de películas de ciencia ficción, sino de la realidad que alcanzó a Nuevo León en el mundo de la electromovilidad.
No tardará mucho para desde una aplicación rentar un vuelo exprés dentro de la ciudad, o para tomar mini vehículos autónomos que nos lleven de un punto a otro en escuelas o trabajos.
Ahora todo es posible con el desarrollo de la tecnología y con la apuesta de las empresas cada vez más a una vida sustentable y de cuidado para el medio ambiente.
El desarrollo de vehículos o aparatos eléctricos que no dañen tanto nuestro entorno es cada vez más visible en las prácticas empresariales y de gobiernos en nuestro país, aunque un gran sector sigue enfocado en la energía derivar de la quema de combustibles fósiles.
LOS TAXIS AEREOS
Alguna vez de pequeños vimos la innovación tecnológica en los juguetes, primero los carros de control que iban unidos con un cable, luego llegaron los de manejo remoto para andar por la casa, el patio, el parque o la calle jugando.
En ese tiempo sólo era posible ver una aeronave utilizada como taxi o vehículo convencional en caricaturas o películas, los supersónicos son un ejemplo de ello.
Incluso los robots vigilantes o que realizan alguna actividad específica, también, únicamente se veían en la pantalla.
Pues ahora no se trata de ficción ni mucho menos de un sueño, es la realidad que alcanzó a Nuevo León en el tema e la electro movilidad.
La aeronave no tripulada EHang 216 es un ejemplo de la vanguardia futurista que se avecina, pues podría ser un utilizada de diversas formas, desde el traslado de paquetes hasta su uso como taxi aéreo.
El dron gigante, cómo alguno lo llaman, es una aeronave totalmente eléctrica tripulada desde tierra por un piloto experto, cuenta con 16 motores y 16 hélices en ocho brazos.
Puede volar hasta los cuatro mil metros sobre el nivel del mar, pero debido a la norma que regirá su vuelo en territorio mexicano, lo deberá hacer en los 100 metros sobre el nivel del mar en una especie de piso o carril exclusivo para su tipo.
La batería tiene una duración de media hora o hasta 35 kilómetros, pues fue diseñado para viajes cortos dentro de una urbe ya sea como taxi aéreo, entrega de paquetes o atractivo turístico.
Y es de hecho en esta última modalidad, como recorrido aéreo en zonas turísticas, como primero se implementaría su uso en México.
El costo del viaje puede costar alrededor de unos 150 dólares, lo que lo convierte en un atractivo para los usuarios de helicópteros, pues ellos pagan al rededor de dos mil 500 dólares por persona en promedio.
“Los que van a bordo sólo disfrutan del vuelo, las pantallas que hay dentro del equipo son informativas, pueden estar en comunicación constante con el piloto, pero un cambio de ruta o una toma de acción la hace el piloto en tierra.
“El piloto de la aeronave debe cumplir con las hora de capacitación que la Agencia Federal de Aviación Civil pide para los equipos de esta categoría, con capacitación directa del fabricante y una licencia que lo acredita para poder volar”, explicó Cristina Lara, CEO de AirMobility.
Cristina Lara explicó que en el mundo llevan alrededor de 38 mil vuelos, la gran mayoría de demostración, en 13 países. En México están en la fase de regulación con las autoridades y se espera que para aproximadamente el mes de agosto de este 2023 se realice el primer vuelo experimental en la Explanada de los Héroes en Monterrey Nuevo León.
VIGILANTE CANINO
Ally Dog o lo que es lo mismo el Perro Aliado, es un sistema integrado que forma parte de Sky Protector, una programa de vigilancia a través de un dron que sirve para hacer reconocimientos de área teniendo la capacidad de detectar diversas situaciones de riesgo.
Héctor Cepeda Renovato, integrante del equipo SpaceLab, desarrolladores de Sky Protector, contó que Ally Dog es la mano derecha, o mejor dicho las cuatro patas, de Sky Protector.
Ally Dog puede hacer recorridos de vigilancia tanto de forma interior como exterior, apoyando al protector aéreo, pueden hacer un recorrido que un vigilante hace en una hora, en tan sólo 15 minutos, dicho en otras palabras, Ally Dog puede reemplazar la labor de más de 4 guardias de seguridad.
“Primero se hace la inspección para conocer los punto clave que se requiere en cierta área después se hace un software para hacer el recorrido específico, programado en rutinas o rutas aleatorias, dependiendo de los requerimientos del cliente”, explicó Héctor Cepeda.
Aunque Ally Dog no está diseñado para auxiliar personas directamente, en determinado caso se podría utilizar para ayudar a quienes tienen discapacidad visual.
“No es lo más recomendable pero en dado caso se diseñaría un software especializado para las personas con discapacidad visual”,indicó Héctor.
El costo del Perro Aliado puede ser desde los 600 mil hasta un millón 800 mil pesos, dependiendo del sistema y el equipamiento con el que sea diseñado.
“Nosotros nos adecuamos a las especificaciones de nuestros clientes, si alguien lo quiere utilizar para mover cosas de un lado a otro o para traer refrescos, lo podemos programar”, puntualizó.
Ally Dog puede contar con cámaras de profundidad, motores de uso rudo, bocina parlante, resistente a cinco kilos de carga útil, 100 metros de control, visión nocturna, transmisión de video, inteligencia artificial y GPS, por mencionar algunos detalles.
Puede hacer reconocimiento facial, reconocimiento de figura armada, personas tiradas, reconocimiento de humo o llamas, conteo de personas, reconocimiento de placas, alertas, detección de autos por colores y cantidad de tránsito de una persona.
TRANSPORTE AUTONOMO
Aunque aún faltan algunos años para verlos en las calles, los alumnos del Instituto Tecnológico de Monterrey, Luis Emiliano Rodríguez y Jesús Arturo Mandujano Granillo, de la Maestría en Temas de Manufactura, diseñaron un prototipo de transporte escolar autónomo.
Se trata de un carrito de golf que adaptaron para funcionar de manera totalmente eléctrica y los planes es que en un futuro no muy lejano, se pueda desplazar de manera autónoma el menos en el Distrito TEC.
Actualmente los estudiantes desarrollaron un sistema para que a través del control de una consola de video juegos puedan enviar señales y dar vuelta al volante o hacer funcionar el freno, o acelerador, por ejemplo.
“Todavía no tiene un sistema completamente autónomo, ahorita lo que hacemos es diseñar una ruta y la puede seguir, pero no tiene la capacidad de cambiar de ruta o tomar otras decisiones.
“Lo que estamos haciendo es especializarnos en un software para mejorar el control de la aceleración, de las vueltas que da y el sistema de navegación que tiene, combinar los sensores para darle mayor robustés al momento de mapear su entorno”, indicó el maestro en Manufactura.
Luis Emiliano Rodríguez señaló que el auto entra en la clasificación de un vehículo eléctrico de vecindario, por lo que no puede pasar de una velocidad de 40 kilómetros por hora.
“Este vehículo se compró y se está modificando con la idea que después en Zona TEC se puedan tener rutas autónomas de un punto A a punto B.
“Este vehículo está instrumentado con las capacidades del Drive by Wire, esto es que se puede manejar por medio de señales eléctricas, nosotros tenemos un demo con un control para demostrar como con señales pueden actuar los sensores”, precisó Rodríguez.
SIMULADOR INTELIGENTE
Si de aprender a manejar y recabar datos en el proceso se trata, el docente de la Licenciatura de Multimedia en Imagen Digital en la Facultad de Físico Matemáticas de la Universidad Autónoma de Nuevo León, Gerson Aldaír Gámez Castro, diseñó un simulador que ahorra costos y previene accidentes.
Es común que las empresas capaciten a su personal en algunas áreas para manejo de máquinas o vehículos, por lo que Gerson se dio a la tarea de diseñar un programa que además de poder ser utilizado para la enseñanza, puede recabar información.
Se trata de un simulador de manejo que en la exposición estaba adaptado para un automóvil estándar, que permite simular la física y lo que está detrás de la dinámica.
“Esto puede servir para ahorrar costos, en caso de alguna colisión, disminuir los riesgos de un accidente y repetir la simulación tantas veces queramos hasta lograr el resultado que deseamos.
“Se puede automatizar completamente el proceso para que obtenga datos como los hábitos de manejo, tiempo en completar la simulación, cuántos rojos se pasó, a cuántos atropelló, entre otras cosas”, explicó el docente.
Lo interesante del sistema es que se puede adaptar a cualquier tipo de maquinaria como un montacargas, un trailer, una grúa, entre otras cosas.
“Se puede adaptar con palancas para simular la parte de un montacargas, o como un trailer para las dimensiones, el peso o saber si ocupamos poco o mucho del acelerador para mover una carga”, apuntó.
Incluso una vez adaptado a un entorno, se pueden recabar datos viales o incluso podría ser utilizado en el área medica para recabar información, por ejemplo, sobre los avances o mejorías de una persona que está recobrando su movimiento en las manos.
FALTA MUCHO POR HACER
Si bien estamos entrando a un mundo inteligente donde la movilidad esta a la vuelta de la esquina, para los científicos aún falta mucho por hacer, desde mejorar la cultura hasta la infraestructura de la ciudad.
Para Héctor Cepeda Renovato, de SpaceLab, es importante que las personas se vayan acostumbrando a ver la tecnología en la calle y no pretendan apoderarse de ella.
Pues como ejemplo están los dones que quiere algunas personas y a veces un un vuelo de rutina, hay quienes hackean los sistemas y se apoderan de ellos.
“La capacidad de manufactura para mejorar la infraestructura la tenemos, pero falta cambiar la cultura de no ser maldosos, no molestar al perro, no robártelo, tenemos una falta de cultura para ver tecnología y no querer dañarla”, indicó Renovato.
Pero lo cierto es que también habría que renovar los sistemas tecnológicos en las avenidas, como lo menciona Mandujano Granillo, estudiante del Tec de Monterrey.
“Para que (un sistema autónomo de autos) se pueda implementar en ciudades tiene que haber un cambio en la infraestructura, se tendría que instalar un sistema de comunicaciones como radios, sensores en semáforos, banquetas, delimitar muy bien los carriles, entre otras cosas.
“Que el vehículo se pueda comunicar para que tenga una mayor conciencia de su entorno y permitirle tomar decisiones de una manera más adecuada”, explicó Madujano Granillo.
Mejorar la calidad de la infraestructura es otro reto para los gobiernos, pues aunque Monterrey está dentro del Top Ten de Movilidad y Sotenibilidad, aún falta mucho por hacer, aseguró el alcalde Luis Donaldo Colosio.
“El Instituto Mexicano de la Movilidad dice que Monterrey es el primer lugar en competitividad a nivel nacional y estamos dentro de los primeros diez lugares en movilidad urbana y sostenibilidad.
“Sin embargo estos números no pueden ser una excusa para echarnos a la maca, porque somos una de las ciudades más relevantes en el rubro económico, pero también hay que reconocer que nos encontramos saturados por una gran cantidad de gente desembocando en un problema de movilidad”, apuntó Colosio.
Dijo que de acuerdo también con datos del Instituto Mexicano de Movilidad, es visible que un buen sistema de transporte eficiente es clave para un desarrollo y una integración económica tangible.
Agregó que un buen diseño en los sistemas de comunicación se traduciría en una reducción del impacto ambiental que el transporte genera, por eso se debe de optimizar el uso de los combustibles y los tiempos de traslado.
“También debemos desarrollar nuevas tecnologías para lograr buenos nichos de electromovilidad para toda nuestra región; esta ciudad tiene tantas áreas de oportunidad para tener una movilidad eficiente acorde a las necesidades económicas y laborales de todas las familias de Monterrey”, enfatizó.
Así es que el camino está marcado, porque mientras los científicos y genios presentan la movilidad del futuro, los Gobiernos tendrían que adecuar la infraestructura y las normas o leyes, además de que la sociedad tendría que aprender a vivir entre robots.