Un reportero que cubre la nota roja, el crimen organizado, y la corrupción, se arriesga a recibir represalias. Un Fixer, quien es un guía que ayuda a periodistas y a documentalistas extranjeros a realizar entrevistas con personajes como jefes de cárteles, sicarios, agentes federales, miembros del ejército, entre otros, sabe que su vida siempre está en peligro.
“En aquel tiempo no me identifiqué como Fixer ni como productor local, y cuando llamaba a mis antiguos compañeros de nota roja les decía que estaba apoyando a unos periodistas estadounidenses y como colega les estaba brindando el apoyo.
“En el fondo, me sentía avergonzado de ser guía de reporteros luego de darme a conocer como director de cine”, se lee en un párrafo de “El Fixer”, la novela autobiográfica del multifacético sinaloense, Miguel Ángel Vega.
En las primeras páginas de “El Fixer”, el lector va ubicándose en la escena, descrita de una manera cinematográfica, ya que el autor ha incursionado en el séptimo arte con películas como “El robo”, “Cáliz”, y recientemente “Antes de que amanezca”.
“Siento que la forma en que está narrado el libro es como si estuvieras viendo una película, porque el personaje de El Fixer es un ser humano ante todo y vive fracasos, decepciones, tiene sueños y parte del libro tiene mucho que ver con eso.
“Su gran sueño es dirigir cine, pero las situaciones no han estado a su favor, pues uno de sus proyectos que fue la película de “Cáliz”, fue un fracaso rotundo en taquilla, y después de haberlo apostado todo, lo pierde, y se encuentra con las manos vacías; pero de pronto un día recibe una llamada en la que le ofrecen un trabajo como guía, porque ni siquiera le dijeron que era fixer, porque yo en ese momento desconocía que había una figura como tal”, recordó Vega.
Reveló que su primera reacción ante esa propuesta no fue positiva, ya que consideró que después de haber estrenado dos filmes, ser guía de periodistas no era el trabajo soñado, pero lo aceptó porque necesitaba obtener ingresos.
“Cuando terminé de realizar el proyecto me pagaron. La corresponsal de Current TV, Laura Ling -miembro del equipo que solicitó sus servicios como fixer- me recomendó con otros periodistas que también van a Culiacán a grabar temas relacionados con tráfico de drogas y yo estaba disponible; entonces me di cuenta que podía ganar lo suficiente para continuar con mi carrera como director de cine.
“Y en este afán, en este sueño, en esta obsesión, en esta mezcla de todos estos elementos, yo decidí convertirme en el mejor fixer de México y generar los ingresos suficientes para poder hacer mi próxima película, que de hecho la hice, se llama ‘Antes de que amanezca’, en la que retomo el tema del mundo de los vampiros”, señaló.
En el momento en que se propuso ser el mejor fixer de México, puso todo su esfuerzo en ello siempre motivado en que a la postre, su más grande sueño iba a ser realidad.
“Me dije: si realmente quiero hacer esta película, debo llevar mi compromiso a otro nivel; tengo todos los contactos en Culiacán, ahora voy a tener contactos en todo el país, así que empecé a armar contactos en Juárez, en Nogales, Mexicali, Tijuana, en Guadalajara, Michoacán, Chiapas, en Ciudad de México, en fin, abarqué todo el país.
“Y una vez que cubrí todo el país, pensé que también podía tenerlos en Estados Unidos, y empecé también a armar contactos en New York, en Miami, en Phoenix, en Los Ángeles, en San Francisco; y el siguiente paso era Centroamérica, y así fue como cree una red de contactos desde Centroamérica hasta Estados Unidos, de tal manera yo fuera el mejor fixer del país “, expresó.
GAJES DEL OFICIO
“Lo primero que programamos fue una entrevista con el profesor Guillermo Ibarra. Laura quería saber sobre la economía flotante de Sinaloa y también entender sobre la narcocultura que se respira en la ciudad. Yo, mientras tanto, seguiría pendiente de algún hecho violento que ocurriera para, en el momento de recibir el aviso, dirigirnos a la escena del crimen. También monitorearía la entrevista con el policía corrupto, pero ésta empezó a complicarse.
“Aparentemente nadie quería hablar con nosotros porque, para los agentes, era imposible que un ex-reportero de nota roja que se había convertido en director de cine de pronto anduviera haciendo entrevistas para periodistas gringos”, se narra en el libro.
Miguel Ángel Vega empezó a adaptarse a su nueva profesión en la que además de la buena paga, también tenía demasiados riesgos.
“En este lapso le van a ir ocurriendo miles de cosas al fixer, desde decepciones, fracasos, pérdidas humanas, fallas, etcétera.
“Y si a todo esto le agregas todos los peligros que va enfrentando en esta labor, que van desde amenazas, desde ataques armados, de que te encañonen con pistolas, que te confundan con agente de la DEA, hasta que inclusive que te contacten criminales de Estados Unidos para que yo a su vez los contacte con líderes criminales del Cártel de Sinaloa; es decir, un millón de cosas te ocurren como fixer”, compartió.
MUY EMOCIONANTE Y HONESTO
El periodista y cineasta comentó que si pudiera describir su libro diría que es “muy emocionante y honesto”, porque además de plasmar todas las experiencias como fixer, también comparte los deseos por alcanzar sus sueños.
“El Fixer es un libro muy emocionante, pero también es muy honesto y muy íntimo, porque estoy narrando una parte de mí, una parte de mis sueños, y de mis metas, lo difícil que es aterrizar un proyecto, y en este caso los sueños de dirigir cine, pase lo que pase, y a costa de lo que sea.
“Y considerando el compromiso que yo tenía conmigo mismo y con la gente que había confiado en mí, yo estaba dispuesto a correr ese riesgo con tal de sacar adelante mi super objetivo que es: ser director de cine”, afirmó Vega.
Pero para canalizar todos los miedos, traumas y adrenalina que generaba ser fixer, Vega quiso escribir este libro en vez de ir con un terapeuta y así, poder lidiar con todo este particular estilo de vida.
Obviamente que tengo miedo, trato de mantener la calma y el autocontrol, pero yo estoy consciente que en cualquier momento puede ocurrir algo; el problema es cuando termina todo esto. Y ¿cómo le he hecho (para sobrellevar esto)?, pues escribí este libro.
“Fue una forma de catarsis para mí, porque en una ocasión estábamos entrevistando a un grupo criminal en Juárez, cuando de pronto llegó un grupo de 12 pistoleros, y empezaron a rafagearnos, nosotros adentro, fue una situación espantosa y dramática, nunca había visto la muerte tan de cerca, regresé a mi casa y seguí viviendo con ese trauma.
“Y lo único que yo podía hacer para poder salvarme, más allá de ir con un terapeuta, yo decidí como una forma de catarsis escribir un libro y el resultado está ahí. Y el mantener de pie todos y cada uno de mis sueños es lo que yo siento que me ha salvado de toda situación postraumática que haya vivido en su momento”, enfatizó Miguel Ángel Vega.