POR IRMA IDALIA CERDA
El consumidor promedio adquiere variedad de productos gracias al encanto de mujeres seductoras que aparecen en anuncios publicitarios; existe gran demanda en cirugías para el aumento de senos y de glúteos; más gente visita las sex shop; las jovencitas acceden a tomarse fotos desnudas para sus novios y otros ejemplos que forman parte de una avalancha de índole sexual que se dispersa diariamente a través de la televisión, cine, revistas y redes sociales.
Lourdes Mantecón Garza presentó el jueves 25 de abril su segundo libro titulado “Sexualidad Sana. Información Médica para Adultos” en la Casa Universitaria del Libro, ante un grupo integrado en su mayoría por mujeres, en donde abordó la importancia de la educación para ejercer una vida sexual sana.
“Lo primero que yo quiero transmitir es educación sobre la sexualidad real; la verdadera, la sana; no la que nos ponen en las películas pornográficas ni en el internet, ni en los videos, ni en las canciones. Mi intención es que la gente se atreva a descubrir su propia sexualidad”, manifestó.
Mantecón Garza es egresada de la Facultad de Medicina de la UANL y actualmente reside en Estados Unidos, en donde ofrece asesorías tanto a jóvenes y como adultos sobre sexualidad.
“He decidido escribir sobre las emociones y mentalidades ligadas a la práctica del sexo; incluye un poco de información de cómo hacer el sexo, porque como médico me he dado cuenta de la falta de información de la población en general para practicar esta actividad”, afirmó.
Dijo que el libro puede usar como referencia para educar a niños y adolescentes.
“Si el tema a tratar es el sexo la comunicación simplemente no existe entre padres e hijos. La ignorancia con respecto a la actividad sexual es rampante, aún entre la comunidad científica”.
Consideró que es algo preocupante, ya que actualmente no se instruye debidamente a los médicos sobre sexualidad, pues este tema tan complejo se estudia conforme se realiza la práctica profesional.
“No encuentro una facultad de Medicina en donde se nos instruya a los médicos sobre sexualidad. Los psicólogos y los psiquiatras terminan aprendiendo sobre sexualidad muy tardíamente al estar cursando la carrera”, apuntó.
Sostuvo que todavía en esta época prevalece la ignorancia y la falta de información sobre muchos aspectos básicos de la sexualidad debido a la mala educación, la influencia de la religión, el contexto cultural en que se encuentra cada persona, por mencionar algunas causas.
“Es muy difícil definir qué es lo normal en el sexo, porque para empezar los humanos somos muy complejos, somos muy variados; lo que a mí no me gusta a lo mejor a ti sí o viceversa, y eso tiene mucho que ver.
“Es algo que nos tiene que quedar bien claro: en esto hay una variedad impresionante. La información cambia si viene de un grupo de religiosos, si viene de una compañía farmacéutica que les interesa vender un producto, si es una cultura de Occidente.
“O si vives en un país donde a las mujeres se les corta el clítoris por cuestiones religiosas, o si tienes un harem. Hay todo tipo de posibilidades de cómo se manifiesta la sexualidad social y culturalmente “, subrayó.
MITOS SEXUALES
Entre los mitos que aún se mantienen vigentes, se encuentra la constante preocupación de los hombres y jovencitos sobre el tamaño de su pene, así como el desconocimiento que tienen las mujeres sobre el orgasmo y la ubicación del clítoris.
“En mis consultas veo cómo frecuentemente los jóvenes se preguntan acerca del tamaño de su pene. La respuesta de los médicos es: necesitamos medirlo, necesitamos ver la función, necesitamos saber más sobre el particular y me encantaría poder tener esas respuestas.
“Imagínense el caso de la mujer. Muchas ni siquiera han descubierto el clítoris, en dónde está o de qué tamaño es, etcétera. La primera información sobre el clítoris en una resonancia magnética aparece en el 2003 y todavía ahora en el 2013 no estamos seguros de las imágenes y los doctores operan el área genital y no saben si se están llevando una parte del clítoris”, destacó Mantecón Garza.
Reiteró que la mayoría de la gente no sabe cómo ejercer una sexualidad plena y feliz, ya que no tienen el pleno conocimiento de su cuerpo, de sus deseos, así como de las necesidades de su pareja.
“Una sexualidad sana permite una vida con menos problemas y más feliz. Los frustrados sexuales están enojados todo el día y son agresivos”, dijo.
LA LIBIDO
Por otro lado, la pedagoga sexual hizo referencia a la libido, otro punto importante en materia de sexualidad, pues es la energía que posee el ser humano para reproducir su especie, pero si se canaliza en forma diferente puede servir para lograr grandes ideales u objetivos en forma individual y colectiva.
“El sexo tiene su origen psicológico en el impulso, en el instinto de la reproducción. Hay mucho que discutir, porque seguramente van a encontrar libros que van hablar de manera diferente, pero en general es lo que ahí más se acepta en un momento dado.
“A veces no se logra reproduciéndonos, a veces se logra invitando a que todo el mundo comparta una idea o un movimiento político y se dirige todo ese instinto y todo ese impuso hacia un objetivo”, explicó.
La también autora del libro “La Dieta y el Diabético”, mencionó que Mahatma Gandhi canalizó esa energía psíquica y mental en algo positivo.
Añadió que la libido dirige el comportamiento del ser humano hacia la victoria, hacia la divinidad, hacia el poder, hacia la gloria.
“Nos empuja a dominar, a sobresalir, a tomar algo sin permiso, a aventurarnos, es un motor. El mejor afrodisiaco es el poder, alguien que tiene el poder quiere dejar su huella genética por todos lados”, expresó.
Además de la reproducción, agregó, el sexo se practica por las siguientes razones: por dominio, por curiosidad, por obligación, por placer, por poder y por dinero.
EDUCACIÓN SEXUAL
PARA JÓVENES
Lourdes Mantecón Garza enfatizó que para poder transmitir a los hijos una buena educación sexual, los padres deben tener una posición muy definida al respecto.
“Los adultos primero tenemos que aclarar el pensamiento propio, tenemos que decirlo y mantenerlo, de esa forma podemos transmitir una educación. Cuando me preguntan cómo le hacen para hablar con sus hijos sobre sexo, les digo: imagínate que estás hablando de tabaquismo y dices: no quiero que fumes y mantente en esa posición.
“Ahora bien, dices: yo le doy dinero a mi hijo para que se compre sus cigarros, bueno, entonces se va a comprar sus condones o sus anticonceptivos. Lo importante es transmitir una educación con la que yo estoy de acuerdo, pues la moral se inicia en la casa”, aclaró.
Destacó que la generación actual que corresponde a personas menores de 30 años, ha sido bombardeada con una información ambivalente: la música, los programas de televisión, las películas, los juegos electrónicos, apoyan un comportamiento sexual agresivo y violento.
Y por otro lado, también reciben información por parte de grupos religiosos, o incluso campañas médicas publicitarias donde se promueve la abstinencia sexual.
“Esta generación ha recibido una información contradictoria y ambivalente muy confusa. Muchos jóvenes se acercan a mí confesando que tienen miedo de tener sexo”, compartió.
Sin embargo aseguró que se han realizado estudios que comprueban que los hijos sí escuchan a sus padres, por lo que exhortó a leer el libro “Sexualidad Sana. Información Médica para Adultos”.