Con los avances tecnológicos han surgido aplicaciones como Tinder, Happn o Match.com que facilitan el poder encontrar desde citas, encuentros “de una sola noche” e inclusive noviazgos y matrimonios.
El Internet ha cambiado la forma en que las personas se relacionan. Hoy en día encontrar pareja en la web no es algo extraordinario, las redes sociales día con día confirman la facilidad de conocer a ese alguien especial.
Facebook, Twitter e Instagram no son los únicos medios por los que los internautas pueden enamorarse de manera digital.
Estos son tres casos de parejas que sin importarles los prejuicios sobre esta peculiar forma de conocer personas lograron más que verse una vez.
JHOSET Y AILED
Jhoset Barbosa y Ailed Baena son dos jóvenes de 23 años que se conocieron por medio de Facebook. Gracias a un evento de interés mutuo se mandaron solicitud de amistad, lo que derivó en buenas conversaciones entre sí, así como asistir al mismo encuentro.
El joven relató que a partir de ese momento ambos sintieron química entre sí, por lo que decidieron volver a verse y tuvieron su primera cita oficial.
“Ella es de Guerrero y yo del Estado de México; y como punto intermedio teníamos la Ciudad de México, así que tomamos la decisión de vernos en la capital.
“Nuestra primer cita fue en un café de la Alameda Central y tuvimos una plática súper extensa de más de tres horas, conversando de temas como la universidad, pasatiempos, gustos musicales, entre otras cosas más”, recordó.
Posteriormente fue Ailed quien tomó la iniciativa de seguir saliendo. Además de sorprenderle agregó que algo en él sintió que todo se estaba dando. A pesar de la distancia y después de dos meses de salir Jhoset se arriesgó y dio el siguiente paso.
“Hice un video un poco cursi con una canción de Maroon 5 en el que al final decía que si quería ser mi novia. Aceptó y no pude ocultar mi felicidad ese día.
“El tema de la distancia lo supimos sobrellevar y logramos vernos lo más posible entre semana. Con el paso del tiempo nuestros amigos y familiares entendieron que nuestro amor iba a superar cualquier adversidad”, detalló.
Jhoset compartió su pensar respecto a aquellos que encuentran el amor por redes sociales y en base a su éxito expresó lo que para él es la clave para consolidar una relación así.
“En mi opinión las relaciones a distancia te ayudan a valorar más a las personas porque al no verlas tan seguido aprendes a que esos pequeños momentos y salidas son realmente únicas. Esa emoción de ver a tu persona especial es indescriptible y las pláticas se vuelven más interesantes.
“Considero que los principales factores para mantenerla son la comunicación y sobre todo la confianza. Es complicado aprender a confiar plenamente en alguien, más que nada por todos esos casos donde por redes son una persona y en vida real una totalmente opuesta, además nunca falta quien carece de compromiso”, finalizó.
DANIELA Y ALI
Daniela Bermúdez y Ali Alwajh son un matrimonio que se conoció por medio de la aplicación Tinder. Su relación es especial ya que es un “amor internacional”, ella mexicana y él libanés.
Mientras navegaban por la App al ver sus perfiles decidieron darse “like”, por lo que acordaron verse, sin saber que les esperaba “más que un simple encuentro”.
“Como a muchos les ha de suceder nuestra primer cita fue incomoda, la verdad es que no sabes si la persona es lo que tu esperas y viceversa, uno genera una expectativa la cual puede causar o que te impresiones o desilusiones.
“Conforme seguimos saliendo la convivencia fue muy amena, me hizo sentir muy cómoda y lo mejor es que fue recíproco”, relató.
Destacó que fue él quien optó por darle continuidad a las salidas, hecho que la dejó atónita y sorprendida.
“No pensé que iba a existir tal seguimiento por su parte, con eso que en pleno siglo XXI tanto hombres como mujeres no son muy fanáticos al compromiso.
“Formalizamos en el momento que supimos que queríamos estar juntos. Afortunadamente contamos con la suficiente madurez para saber lo que queríamos y una cosa llevó a otra, pasamos del noviazgo al matrimonio”, reafirmó.
Daniela mencionó que la comunicación ha sido clave para que su relación funcionaria, a pesar que cuando comenzaron a salir el idioma era la traba más grande.
“Él ya sabía hablar inglés pero a la hora de conversar era tan rápido que era muy difícil seguirle el paso. Conforme fue conviviendo conmigo tuvo que aprender español y debo de reconocer que a la hora de conversar es muy fluido.
“Era muy frecuente que cuando salíamos a algún bar o restaurante era un batallar para que lo entendieran. Hubo ocasiones que pedía una cosa y le venían trayendo otra por la falta de entendimiento, sus reacciones eran un poco explosivas debido a su carácter pero una vez que yo intervenía todo se calmaba”, recordó entre risas.
Después de lo logrado compartió su postura respecto a estas aplicaciones y destacó que está en la madurez de las personas el poder determinar hasta dónde quieren llegar.
“Pienso que la gente que se conoce por medio de Tinder puede ser tan formal como informal como ellos deseen. Si bien esta aplicación está hecha para encuentros casuales, cosa que no está para nada mal, también puede generar historias de amor como la nuestra”, finalizó con un tono alegre.
JOSE LUIS Y SOFÍA
José Luis Cruz y Sofía Larios son un matrimonio que se conoció por medio de Instagram. Apasionados al ejercicio intensivo y una vida sana, un “juego de likes” los llevó a conocerse y a la postre enamorarse.
Recordó que venía saliendo de una relación y mientras estaba en un viaje en Sayulita hablaba con un amigo a quien le comentó que se había propuesto no tener novia en todo un año.
“De pronto recibí un like en Instagram por parte de Sofía, cabe aclarar que es una influencer fitness con más de 120 mil seguidores. Me sorprendió y a la vez me tomó desprevenido, supuse que había sido un error que llegara a mi perfil.
“Ya la seguía en redes sociales, la vi y dije que estaba muy guapa. Me siguió dando likes y se me empezó a hacer raro, me fije en cuales lo hacía y noté que eran fotos viejas. Vaya, ella estaba viendo mi contenido y para disimular le regresé unos likes, pero en fotos más recientes”, comentó.
Al día siguiente notó que las reacciones habían cesado y pensó: “que sea lo que tenga que ser”. Ese día se había organizado con sus amigos para ir al cine, cuando de pronto el “juego de likes” siguió por parte de ella. Fue ahí cuando tuvo una idea brillante.
“Decidí dar el siguiente paso y me propuse invitarla a salir si después de darle un like reaccionaba en menos de cinco segundos; dicho y hecho sucedió. Fiel a mi palabra y con toda la intención de no darle opción a que dijera que no le propuse ir al cine. Aceptó pero dijo que la acompañarían una pareja de amigos, deshice mis otros planes y nos vimos.
“No hubo mucha química al principio. Lo que me llamó la atención después de conseguir su número fue que conversábamos sin parar. Nos desvelábamos hasta las dos o tres de la mañana a pesar que al día siguiente teníamos que ir a trabajar”, al principio nuestra interacción se limitó a puras redes sociales, cuando teníamos oportunidad platicábamos de mil y un temas”, agregó.
Destacó la vez que se tuvo que ir a un viaje de trabajo a Miami, antes de volar le entregó una flor, a lo cual Sofía reaccionó con una “sonrisa indescriptible”. Recordó que mientras se encontraba en suelo americano la actualizaba con fotos y audios de su día a día.
“Tras mi regreso comenzamos a vernos con mayor frecuencia. Al mes de estar saliendo le pedí que fuera mi novia y ya con ocho meses de noviazgo le propuse matrimonio y nos casamos el 27 de julio del 2019.
“Si en un momento me llegarán a decir que conocería al amor de mi vida por unos likes en Instagram no me la creería”, finalizó.