Que el título no lo engañe, no se trata de la historia lacrimógena de una familia que busca en la basura comida para alimentarse, se trata del valor real de los desechos y que en Monterrey ya son una moneda de cambio en las tiendas “Trash for Food“.
Y es que, por increíble que parezca, desde mediados de septiembre de 2019 se abrió al sur de la capital regiomontana el primer local de este proyecto sustentable en la que no se requiere dinero para comprar los productos de primera necesidad sino papel, cartón, fierro, plástico, aluminio, vidrio y otros materiales reciclables.
El mecanismo de compra y venta es sencillo: el ciudadano acude con los desechos a la tienda, en donde se clasificará y pesará. Dependiendo del peso se entregarán puntos en vales que podrán ser canjeados por productos de la canasta básica, a precios más accesibles que en una tienda convencional.
El costo de la mayoría de los productos ronda los 20 pesos y se puede conseguir arroz, frijol, aceite, productos enlatados, papel de baño, jabón, shampoo, toallas sanitarias, entre muchos otros.
La idea nació hace cinco años cuando el presidente de la ahora asociación civil Trash For Food, Jesús Cavazos de la Garza, se percató de la gran problemática de la basura en la vía pública de la zona metropolitana y las consecuentes enfermedades que generan en las áreas más vulnerables.
Desde 1970, su familia ha promovido los comedores comunitarios en zonas de escasos recursos de Monterrey, especialmente enfocado a personas de la tercera edad, los cuales presentaban con frecuencia padecimientos por contacto con desechos en la calle.
Y es que, de acuerdo al también director de las plantas ecológicas generadoras de energía Rex Monte, actualmente en la mancha urbana de Monterrey se recolectan ocho mil toneladas de basura por día y cuatro mil toneladas más se quedan en las vialidades y baldíos de la urbe.
Es por eso, que con una intención meramente ecológica se diseñó un proyecto autosuficiente para disminuir los niveles de contaminación en la vía pública, pero que a su vez, apoyara con alimento y productos básicos a la población de bajos recursos sin caer en asistencialismo.
Fue así que nació el concepto Trash For Food, un proyecto único en el país que busca cambiar el entorno de los 23 polígonos de pobreza más acentuados de la zona conurbada de Monterrey, que son también los que registran las mayores problemáticas basura en las calles.
“Empezamos a apoyar a las personas mayores y nos percatamos que las enfermedades que presentaban estaban directamente relacionadas con la basura. Entonces decidimos trabajar en el tema de la ecología y fue donde creamos Trash For Food con la intención de crear consciencia ecológica entre los vecinos.
“Los grupos donde hay más basura es en los polígonos de mayor pobreza. Lo que hicimos fue comprometer a la ciudadania a que nos apoyen a limpiar y nosotros les damos despensas, les damos apoyo para que empiecen a cambiar su entorno.
“Normalmente las asociaciones depende de apoyo, pero cuando alguien falla con la ayuda empiezan a desaparecer las asociaciones. Cuando la diseñamos, decidimos que el diseño tenía que ser de autosuficiencia, que lo mismo que recolectáramos pudiéramos hacer un producto. Ya llevamos cinco años y se ha sostenido“, expresó Cavazos de la Garza.
Con ahorros de hasta 20 por ciento en la economía familiar, el concepto de tienditas Trash for Food garantiza su propio funcionamiento, pues el material reciclable que se recibe se vende a empresas especializadas en el rubro y se paga con productos para su comercialización.
“Nosotros se lo llevamos a una empresa recicladora y nos dan productos o despensas porque no recibimos dinero. Se recibe cartón, aluminio, plástico, fierro y demás“, dijo el entrevistado.
La intención es recolectar la basura a la que municipios, gobierno estatal y privados no tienen acceso y que esos desechos se conviertan en alimento y productos para familias vulnerables.
De acuerdo a Cavazos de la Garza, anteriormente la gente que se dedicaba a recoger basura en las calles podía recibir dinero o droga como recompensa, lo que también fue un motivante para iniciar el proyecto.
“Mucho de lo que hicimos fue porque muchos de los lugares en donde los pepenados iban a vender la basura nos les daban dinero, les daban droga. El tema era romper esas costumbres por decirlo de alguna forma. Teníamos que romper ese círculo y eso es parte de lo que hemos escuchado aquí“, expresó el regiomontano.
La sinergia que se ha creado con la ciudadanía ha sido tal que incluso grandes empresas neolonesas como Cemex, Rex Monte y una embotelladora de Coca Cola se han integrado al proyecto comunitario, garantizando su vialidad futura.
“Nuestro proyecto es autosuficiente y además se nos han sumado empresas que nos donan alimentos y hacen que se vaya pagando solo, significa que esto no va a parar“, aseguró Cavazos de la Garza.
A menos de un mes de haber iniciado el resultado de la tiendita que cambia basura por comida ha sido mejor de lo esperado.
Ubicada en el perímetro conocido como Cima de la Loma, una zona de difícil acceso y marcada por bajos niveles de desarrollo, la tiendita Trash For Food recibe por semana cerca de 350 kilogramos de desechos reciclables que se intercambian por comida y productos básicos.
TRANSFORMACIÓN
DE LA CIMA
La Cima es uno de los 23 polígonos de pobreza reconocidos por la Subsecretaría de Prevención y Participación Ciudadana de la Secretaría de Seguridad Pública de Nuevo León.
El área es habitada por cerca de 500 familias y la presencia de desechos en la vía pública es apenas uno de las múltiples problemáticas que enfrentan los vecinos de la zona.
De acuerdo a Cavazos de la Garza en el polígono existen niños criando niños, es decir, adolescentes de apenas 14 ó 15 años de edad que ya son padres y madres y que no cuentan con una fuente estable de ingresos.
“En esos lugares, detectamos niños criando niños, es decir, niños de 15 años con dos hijos y te preguntas ¿cómo pueden vivir ellos? si tienen tan corta edad y no tienen una actividad productiva que les permita mantener a sus familias.
“Entonces, esas familias están hacinados con los tíos, con los amigos, con los suegros y se genera una serie de violencia familiar porque tampoco tienen para alimentarse ni capacidad para educarse“, aseveró el presidente de la AC.
Para ellos, Trash for Food representa una posibilidad de llevar alimento a casa, para la zona mejorar el entorno social y para el planeta una bocanada de vida.
“La parte de decirle: tú no tienes dinero, pero si vas y juntas plástico y fierro lo puedes cambiar por comida. Una vez que la necesidad básica de cualquier organismo es su alimento entonces ya puede estar preocupado por el siguiente paso que es educarse, prepararse o conocer una técnica para ser autosuficiente y la responsabilidad de tener los hijos los tiene que motivar, pero se les tiene que dar las herramientas.
En la Cima todo inició con la limpieza de un lote baldío que por años fue usado como tiradero público. Con el liderazgo de la asociación civil, los vecinos comenzaron a organizarse para limpiarlo y lo que un día fue un espacio lleno de basura, hoy es una cancha polivalente en la que también se ubica la primera tiendita del colectivo.
“Cada mes llegamos y sacamos toda la basura y volvemos a limpiar porque esos polígonos son históricamente en donde todo mundo se acostumbró a tirar la basura ahí. Entonces, estamos buscando la coordinación con Seguridad Publica como Salubridad Pública para poner unos contenedores más adecuados y comprometernos a seguir limpiando esa zona“, mencionó
Aunado a la plaza de usos múltiples y la tienda, el espacio ya es una área de esparcimiento y de capacitación en oficios para los habitantes de la zona.
El Gobierno de Nuevo León se unió recientemente al proyecto, por medio de la Subsecretaría que encabeza Ervey Cuéllar e intentará replicar junto a la asociación el mismo modelo en más polígonos de pobreza de la entidad.
“Entonces, ahí la Secretaría de Prevención Pública tiene mucha intención de trabajar eso, el doctor Ervey Cuéllar está muy consciente de esto y decidió apoyar con todo.
“Creo que estas iniciativas van a cambiar mucho la visión que tenemos actualmente de los tiraremos de basura, los focos de infección y de violencia“, acentuó el entrevistado.
En 2016, de acuerdo al INEGI, en el país apenas se reciclaba el 11 por ciento de las 86 mil toneladas de basura que se generan al día, desaprovechando un negocio que tiene un potencial de 3 mil millones de dólares y un crecimiento anual de 10 por ciento.
Se espera que en las próximas semanas se abra la segunda tienda de Trash For Food en la calle Nuevo León 715 de la colonia Independencia. v