Tenía 55 años cuando recibió la noticia; Dolores García Villarreal desarrollaba en su tejido mamario células malignas. Aunque de manera cotidiana se hacía los ejercicios de autoexploración y anualmente una mamografía, fue después de dos años que sin acudir a revisión sintió una protuberancia en su seno izquierdo.
“Yo me sentía una bolita y cuando fui al chequeo resultó que esa bolita no era el tumor, pero sí había cáncer, estaba más hacia adentro, casi pegado a las costillas, era casi imposible que yo lo pudiera sentir”, recordó.
Pero Dolores García desconocía la complejidad de la situación, la cual llegó después de recibir el tratamiento al que fue sometida, que además de doloroso le dejó secuelas con las que deberá lidiar el resto de su vida.
Se realizó una cuadrantectomía (extirpación de un cuarto de la mama), fue sometida a radiaciones, pero los efectos secundarios aparecieron, los principales eran la falta de apetito, garganta reseca y fatiga.
Además durante cinco años tomó en pastillas la quimioterapia, con la que se le cayó el cabello y las uñas se le hicieron quebradizas.
“El linfedema se presentó casi de inmediato al iniciar con las radiaciones y el dolor era insoportable, donde te radian o donde te quitan los ganglios, es donde te hacen ese estudio y dañan la circulación de la linfa del brazo”, explicó.
El padecimiento con el que las extremidades aumentan de volumen, de forma completa o parcial, se debe de cuidar del calor y de las picaduras de insectos, porque esto podría traer complicaciones.
La extremidad afectada tiene mucho peso, por que el líquido no drena y se tienen que hacer ejercicios especiales para que circule.
“El brazo se me seguía hinchando, ya casi no tenia movimiento y mi seno también se me empezó a inflamar muchísimo, fue por eso que tomé la decisión de hacerme una mastectomía radical, a pesar de que mi otro seno estaba sano.
Actualmente, a sus 70 años de edad, cuenta con prótesis externas, aunque existió la insistencia por parte de un cirujano que le aconsejaba utilizar las prótesis internas. “Yo le decía con qué objeto si yo estoy muy bien así, vivo muy bien así, ¿y qué tal que me las pongo y vuelvo otra vez con el linfedema?, a ese sí le tengo respeto”, mencionó. Y aunque sabe que será una enfermedad que tendrá de por vida, menciona: “tú puedes pasarla bien, nada más cuidando tu brazo, no cargar cosas pesadas, no asolearte porque puede venir una infección que puede generar algo más peligroso.
“En aquel entonces no había esta información y por eso el cáncer lo veías igual a muerte y no es así, pues si eres detectada a tiempo, te puedes salvar”, puntualizó.
Pero no todo finalizó en ese momento, pues debía tomar medidas precautorias hacia las mujeres de su familia, en especial con su hija, que cada semestre acudía a realizarse una mamografía.
En cada cita se evidenciaba que sus mamas eran muy densas, riesgosas, muy difícil de detectarles el cáncer y con el peligro de un antecedente.
“Cuando la doctora le dijo aquí hay algo que no me gusta, algo que no estaba hace seis meses, mi hija consultó con el doctor y decidió hacerse una mastectomía radical… Le pusieron prótesis interna, mi hija no tuvo otra opción”, dijo.
Con un total de 25 radiaciones, quemaduras de primer y segundo grado y una búsqueda de cinco años, Dolores García logró vencer al cáncer, viviendo una odisea para conseguirlo.
Ahora, en compañía de otras mujeres, encontraron la manera de brindar ayuda, principalmente informativa, para que las que resulten con el diagnóstico de cáncer de mama, conozcan una manera eficaz de vencer el padecimiento y cómo afrontarlo.
Madre e hija se realizan mastectomía
Florentina Sánchez García fue diagnosticada en dos ocasiones con cáncer de mama, una a los 65 años de edad y la otra a los 77, por lo que se sometió a una mastectomía radical.
Además de que su hija Isabel María Flores Centeno recibió el mismo diagnóstico, perdiendo, de igual manera, ambos senos.
“A los 65 años me encontré una bolita en el borde de la mama, pero mi ginecólogo me dijo que no era de la mama y en los chequeos no se veía hasta ahí”, explicó Florentina Sánchez.
Dejó pasar un par de años y el tamaño del tumor acrecentaba, cuando se decidió a recibir otra opinión, de inmediato le informaron que debían extirparla.
“Y bueno sí era cáncer de mama, me operaron en marzo y para abril conozco a las fundadoras de Unidas y empecé a acudir a las juntas”, relató.
Recibió quimioterapias y radiaciones sin que le quedara la secuela del linfedema.
“Para mí fue muy importante, ver cuántas mujeres habían y estaban pasando por este problema y por eso me quedé en la asociación con ganas de ayudar”, reiteró.
La manera en la que Florentina logró detectarse por segunda ocasión un tumor, fue gracias a un guante especial que compró por curiosidad.
En ese tiempo, cuando acudía cada 6 meses a realizarse la mamografía, decidió probar el funcionamiento del guante, lo que para ella representó una herramienta más para la detección temprana.
“No era un cáncer como el otro que ya tenía años, no tuve necesidad de quimioterapias ni de radiación.
“Como dato importante quiero comentar que aquellas madres que han tenido cáncer, estén atentas con sus hijas, con sus nietas, con las mujeres de su familia”, mencionó.
Debido a que su hija Isabel María Centeno Sánchez de 50 años también se le detectó el cáncer.
“Como mi mamá ya había pasado por la enfermedad yo acudía a revisión cada seis meses y en uno de esos chequeos me fue detectado”, comentó.
A Isabel el cáncer en el seno le fue detectado en la etapa cero, por lo que no necesito de un tratamiento, pero se realizó una mastectomía radical, para evitar complicaciones futuras.
“Fue un proceso corto y para mí, mi historia es de esas donde la enfermedad es detectada a tiempo”, dijo.
Aseguró que aunque el hecho de perder parte de su cuerpo nunca fue un paso sencillo y representó un proceso difícil, tuvo que afrontarlo, por medio de apoyo emocional.
Isabel se reconstruyó los senos con su propio cuerpo, mientras que su madre (Dolores) cuenta con prótesis externas.
“Tú quisieras nunca pasar por eso, sería lo ideal que nadie pasara por esta complicación. Queremos puras historias cortas, donde todo se arregla con menor tratamiento, con menor agresión al cuerpo”, aseguró la sobreviviente.
Nace Unidas
Contigo AC
Durante cinco años buscó ayuda para su padecimiento, Dolores García se unió con otras seis mujeres con problemas similares y comenzaron a compartir información y experiencias a manera de grupo de autoayuda.
Reuniéndose en casas y recopilando información por medio de distintos especialistas, Unidas Contigo AC comenzó a crecer, pues cada vez eran más las mujeres que acudían en busca de información.
La asociación Unidas Contigo brinda atención a mujeres con diagnóstico de cáncer de mama y en ocasiones también se han presentado hombres que buscan información y apoyo.
“Así nace la asociación, juntándonos en nuestras casas con las personas que en ese momento estuvimos en contacto con los tratamientos o con el linfedema.
“Empezamos a organizarnos y a pedir información en todas partes donde cada quien era tratada de manera distinta y con médicos diferentes”, mencionó.
Para abril de 2003 decidieron hacerlo asociación civil; con ayuda de médicos especialistas, María Silueta (otra de las fundadoras) colaboró en la realización de un libro especial llamado “El lazo rosa”, el cual está en proceso de mejora a causa de los nuevos avances tecnológicos en materia oncológica.
“La meta principal del grupo es informar, por lo que se comenzó con los seminarios anuales”, dijo.
Los seminarios como el que se suscitó el 5 de octubre, fueron creados con el propósito de dar a conocer acerca lo que se debe hacer, a dónde deben acudir, cómo se tienen que autoexplorar y exponer los nuevos avances tecnológicos.
“No todos los cáncer son iguales, no todos los médicos te van a dar la misma receta, se trata de buscar y si tú no estás satisfecha con un diagnóstico o el medicamento no te está cayendo, se debe busca otra opinión”, explicó Dolores García.
Así mismo la asociación civil cuenta con una campaña enfocada en reconstruir su apariencia, las que quieren y no están reconstruidas, les donan prótesis y brasieres especiales.
Además tienen un convenio con la escuela de cirujanos plásticos, donando su trabajo y las mujeres pueden acudir a reconstruirse con ellos.
“Esto es abierto, es un motivo de orgullo, estamos celebrando que no tenemos mamas, pero nos las reconstruimos”, dijo Isabel María Centeno Sánchez (sobreviviente).
Seminarios anuales
“Mi vida frente al cáncer: Mujeres de 10”, fue el nombre del seminario llevado a cabo el pasado 5 de octubre, con el cual festejan 10 años de brindar apoyo en este ámbito.
Como cada año los seminarios de Unidas Contigo AC, dan un panorama de lo que ha sido el avance en la detección del cáncer de mama y en esta ocasión se avocaron a la evolución médica y tratamiento de la enfermedad.
“Consideramos que las mujeres que pasamos por esto, resurgimos fortalecidas, con muchas ganas de ayudar a esas mujeres que apenas están empezando con este proceso”, mencionó Isabel María Centeno Sánchez.
Además destacan la importancia del apoyo familiar al igual que de otros grupos como el de las amigas y principalmente un grupo especial en el que otras mujeres pasaron por el mismo proceso.
“La experiencia que tú pasaste la puedes compartir y les sirve a otras personas, y lo mismo de ellas te sirve a ti, el que ya hayas pasado por eso, porque siempre te está llegando”, comentó Dolores García.
Otra recomendación es que los hombres acudan a revisiones, pues el uno por ciento obtiene este diagnóstico.
“Estamos también apoyando a hombres y para ellos es mucho más agresivo por el tipo de hormona que tienen, requiere mayor atención.
“A un hombre nunca se le ocurre que si se siente algo, pueda ser cáncer y luego cuando acuden es muy tarde, ya es mucho más difícil que sobreviva el hombre a comparación de la mujer”, aseguró.
Los temas que se abordaron fue: el entonces y el ahora en el diagnóstico y radiología; en cirugía; en quimioterapia y radioterapia; risoterapia; ejercicios del linfedema; apoyo integral; cirugía plástica estética y reconstructiva; seguro popular; psicooncología; grupos de autoayuda y asociaciones y testimonios médicos.
En el evento celebrado en Teatro Nova ubicado en el municipio de San Nicolás, se donaron mil mamografías entre las asistentes, celebrando el mes Internacional del Cáncer de Mama.
Cifras
:: Por medio de la asociación, de 2004 a la fecha han sido apoyadas 32 mil 534 mujeres.
:: Apoyos con descuentos en mamografías, tratamiento y pelucas oncológicas.
:: Mil 885 de los cuales mil 859 han sido casos de éxito. Además han entregado 36 pases para reconstrucción mamaria con el Colegio de Cirujanos Plásticos Estéticos y Reconstructivos de Nuevo León AC.
:: Se han realizado 10 seminarios anuales gratuitos y se ha contado con la asistencia de 8 mil 905 mujeres.
:: También se han entregado un total de 8 mil 693 mamografías gratuitas.
:: Así mismo conferencias de autoexploración, las cuales han sido vistas y escuchadas por 12 mil 911 personas que han recibido cuadripticos que se realizan gracias a donativos recibidos por parte de benefactores.
:: Por medio de la campaña “Reconstruyendo mi imagen” se han apoyado durante este año a más de 104 mujeres.
:: A través de youtube han mostrado videos los cuales han sido reproducidos 38 mil 620 veces y en facebook cuentan con 2 mil 300 seguidores.