
La tradición popular identifica al “estado de shock” como “espanto” o “mal de ojo” para el cual tiene identificados una serie de remedios extendidos por generaciones, sin embargo conforme avanza la ciencia, se ha determinado con exactitud de qué se trata y cuáles son las mejores maneras de tratarlo.
Según la tradición popular mexicana, “el espanto” es la pérdida del alma causada por una gran impresión o por un miedo profundo.
Hoy en día existen diferentes ramos de la ciencia que han ido desplazando esa creencia; por ejemplo, la psicología lo nombra: “estado en shock”.
Los remedios caseros para “curar de espanto” se han ido heredando de generación en generación, siendo una costumbre que se tiene muy arraigada en algunas regiones del país. Incluso todavía existen personas que lo curan con las llamadas “limpias”.
Sin embargo en las grandes urbes las personas acuden a psicólogos para ser tratados del ‘estado de shock’, por medio de aromaterapia o musicoterapia.
Para conocer más sobre este tema se recurrió con dos especialistas en el tema: el astrólogo y terapeuta en reflexología, Leo López; y la psicóloga, Korina Hernández, quienes explicaron en qué consiste “el espanto” o “estado en shock” y si es posible curarlo.
¿CÓMO SURGE Y CÓMO SE CURA?
Los expertos coinciden en que el espanto/shock surge cuando una persona se enfrenta a un suceso o noticia que les haya impactado de manera directa.
La psicóloga Hernández explicó que la persona que sufre de shock puede tener sus pupilas dilatadas, la aceleración de su corazón cambia, y se presenta un cambio de coloración o pigmentación en la piel que lo hacen ver pálido.
Detalló que estas reacciones fisiologías son una forma en la que el cuerpo, a nivel psicológico, pone barreras para protegerse.
Por su parte el astrólogo dijo que los síntomas que puede tener una persona que sufre de “espanto” pueden ser falta de apetito, dormir la mayor parte del tiempo, está como ido y se alejan de la sociedad.
Aunque son dos ciencias diferentes ambas pueden tratar ‘la cura del espanto’ o el ‘estado de shock’ utilizando su propio método.
El astrólogo afirmó que por medio de una “limpia” con huevo se puede identificar si una persona tiene brujería, mal de ojo (que es más común en los niños), o espanto.
En dicha limpia se utiliza un blanquillo de preferencia de gallo-gallina, un ramo para “limpia” que incluya pirul, albahaca, perejil y manzanilla.
La “limpia” comenzará de la cabeza a los pies y mientras se realiza se reza un Credo, un Ave María o un Padre Nuestro; al terminar, quien practicó la ceremonia debe de pisar las hierbas.
Tras pasarlo por el cuerpo del afectado, el huevo se abre y se vierte en un vaso de agua transparente, se deja reposar toda la noche debajo de la cabecera de la persona y al día siguiente se tiene que tirar a mitad de la calle.
Aunque esta curación la puede realizar uno mismo o un familiar, es más recomendable que lo haga un especialista o una persona mayor de edad.
El astrólogo afirmó que la persona notara cambios inmediatamente después de que se lleve a cabo la “limpia”.
Por su parte la psicóloga Hernández, quien define espanto como entrar en un estado de shock, “como si estuvieras en un limbo”; recomienda que primero se acuda con la familia.
“Cuando una persona sufre un accidente que le impacte, primero tiene que recurrir a la familia, es bien sabido que es el núcleo y son las principales personas que te brindan seguridad, entonces siempre cuando estás en un estado de shock es importante sentirse protegido y con la familia te sientes seguro”, dijo.
Como segunda opción sugirió a recurrir a la ayuda psicológica para tratar el post trauma, porque es muy probable que el suceso traumático deje secuelas.
“El psicólogo será una persona que les dará herramientas para comenzar a salir de la situación difícil por la que paso”, agregó.
El psicólogo o psicóloga solo dará apoyo terapéutico, en caso de que la persona presente una crisis de ansiedad se tiene que acudir a un psiquiatra para que le recete un tipo de calmante.
El método que utiliza la psicología, es aromaterapia o musicoterapia con una duración de 45 minutos.
“Los psicólogos manejamos más las situaciones en cuanto a lo terapéutico”, explicó.
Musicoterapia es la utilización de la música o de sus elementos, sonido, ritmo, melodía y armonía con un paciente o grupo, en un proceso destinado a facilitar y promover comunicación, aprendizaje, movilización, expresión, organización u otros objetivos terapéuticos relevantes, a fin de asistir a las necesidades físicas, psíquicas, sociales y cognitivas.
Mientras que la aromaterapia es la utilización de aceites esenciales de las plantas; se trata de sustancias químicas presentes en las plantas hojas, flores, frutos, semillas, raíces y corteza, que son las que producen su aroma.
Debido a que cada individuo actúa y maneja su situación de forma diferente, su proceso puede tardar entre 5 y 10 sesiones.
Las consecuencias de no tratarse a tiempo del “espante” o el “estado de shock”, pueden dejar secuelas.
“Si no te limpias o curas del susto, tienes un periodo de 40 días para volver a tu vida normal, en caso de que decida acudir a curarte en cuanto te limpies estarás curado. Pero puedes volver a enfermarte en cuanto te pase otro episodio grave”, afirmó el astrólogo.
“Si están pasando o han pasado por situaciones difíciles es importante tratarse porque dejan secuelas en cualquier aspecto de sus vida, y tienes que ser tratado más adelante”, comentó la psicóloga.
Quienes sufran de este tipo de trauma seguirá teniendo episodios que lleguen a impactar su vida, sin embargo, cada quien será libre de elegir el método de cómo llevar acabo sus problemas, de acuerdo a sus creencias, su forma de vivir o pensar.