Desde hace año y medio Hora Cero reveló que los dirigentes del Partido del Trabajo desviaron a sus cuentas bancarias personales -al menos- 190 millones de pesos procedentes del gobierno de Nuevo León destinados, presuntamente, a instituciones educativas. Hoy, a un año y medio de la investigación periodística, la PGR ha ejecutado órdenes de aprehensión y calcula las malversaciones en 100 millones de pesos.
En marzo de 2016 Hora Cero fue el primer medio que denunció el negocio de la familia Anaya Rodríguez en Nuevo León: el desvío de recursos públicos para intereses personales.
Hoy, a casi un año y medio de la investigación periodística, la PGR confirmó las acusaciones hechas por esta editorial al inculpar de lavado de dinero al líder del PT, Alberto Anaya y su esposa Guadalupe Rodríguez Martínez.
De acuerdo a la PGR, Rodríguez Martínez y el líder estatal del partido en Aguascalientes, Héctor Quiroz García, aparentemente lavaron 100 millones de pesos del gobierno de Nuevo León que debieron ser destinados a la operación de los Centros de Desarrollo Infantil (Cendis), pero que pararon en cuentas personales de los implicados.
Según las indagatorias, la esposa de Anaya usó 62 millones de pesos para una cuenta de inversión por lo que es considerada por la PGR como la “autora intelectual” de los desvíos y hoy cuenta con orden de aprehensión.
De igual manera, la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) le congeló sus cuentas desde agosto pasado.
Por su parte Quiroz García fue detenido el 23 de octubre, pero llevará el proceso en su contra en libertad. En su expediente judicial se exhiben 153 operaciones financieras, echas de 2010 a 2017, en las que se retiraron más de 67 millones 883 mil 961 pesos, de los cuales 40 millones fueron sacados de un módulo del Senado de la República.
Y aunque la Procuraduría denuncia desvíos por 100 millones de pesos, la investigación de Hora Cero documentó que son 190 millones de pesos que fueron entregados de forma sospechosa al partido y cuyo fin no fue para el que estaban etiquetados.
HISTORIAL DE DESVÍOS
En la primera quincena de marzo de 2016 (Edición 265) este quincenal evidenció que dos días antes de dejar el cargo, el ex gobernador priísta de Nuevo León, Rodrigo Medina de la Cruz, “regaló” 60 millones de pesos al PT a través de la Universidad de Nuevo León “Emiliano Zapata A.C”, ubicada al poniente de la capital regiomontana.
De acuerdo a la consulta en el apartado de transparencia de la anterior administración estatal, el 2 de octubre de 2015 la Secretaría de Finanzas y Tesorería General del Estado emitió dicha orden de pago bajo el concepto de “otros convenios” para beneficiar a la institución privada del partido conocida como UNEZ, con lo que se violentó la Ley Estatal.
Y es que el Estado no está facultado para entregar apoyo públicos a instituciones particulares como la “Emiliano Zapata” al no ser una Asociación de Beneficencia Pública (A.B.P.)
“Para que una institución educativa reciba apoyos estatales tiene que ser forzosamente una A.B.P, la cual no debe de tener fines de lucro y no cobrar cuota de ninguna índole a los alumnos, por lo cual, su existencia es únicamente a través de Gobierno o terceros”, declaró en aquel entonces el director de Acreditación, Certificación y Control Escolar de la Secretaría de Educación de Nuevo León, Ricardo García Villarreal.
Y agregó: “Por ministerio de Ley, las Asociaciones Civiles (A.C.) de Capital Variable (C.V.) no pueden recibir fondos estarles porque su fin es generar un negocio. Son instituciones educativas privadas que dentro de su objeto social, aparte de la educación es generar ganancia, por lo cual los fondos estatales no puede ser destinados a estas instituciones aunque sean universidad porque no son públicas, son privadas”,
No sorprendió el saber que, acorde al acta constitutiva de la Universidad, algunos de los dueños del centro educativo son nada más y nada menos que el líder vitalicio del PT, Alberto Anaya, su esposa e hijos.
Y si el regalo del ex mandatario Rodrigo Medina no fue suficiente, desde un año atrás, Hora Cero exhibió que los Cendis se convirtieron en la mina de oro del PT y sus dirigentes.
Las averiguaciones derivaron que el partido fundando durante la era de Carlos Salinas de Gortari recibió otros 130 millones de pesos por parte de la ex administración tricolor.
Los recursos fueron desviados del Instituto de Constructor de Infraestructura Física y Deportiva (ICIFED), organismo descentralizado del pasado gobierno de Nuevo León, según el documento denominado Informes sobre la Situación Económica, las Finanzas Públicas y la Deuda Pública de Nuevo León relacionado al segundo trimestre de 2014.
En él se exhibían dos partidas -una por 50 y otra por 80 millones de pesos- para la preparatoria y universidad “Emiliano Zapata”, pero que curiosamente no fueron reportadas en el área de transparencia del sexenio anterior.
Los Cendis siempre han sido el “comodín” del partido de Alberto Anaya y en aquel entonces, fungieron para recibir la partida de 80 millones de pesos y después transferirlas a la UNEZ.
Hoy, a más de un año de la investigación de Hora Cero, las autoridades federales ponen la lupa en la labor de la familia Anaya Rodríguez y las averiguaciones podría finalizar en la prisión para sus implicados.
Y aunque los líderes del PT han usado su capital político y humano para intentar frenar las averiguaciones, lo cierto es que éstas continúan.
El 24 de octubre, el líder nacional del partido ofreció una rueda de prensa en la que acusó persecución política en su contra por parte del gobierno federal por haberse aliado a Andrés Manuel López Obrador de Morena en sus aspiraciones presidenciales.
El regiomontano acusó al INE de intentar imponerle a sus dirigentes para frenar los acuerdos que hizo con el tabasqueño.
“Esto es una primera avanzada del acoso de que va a ser objeto nuestro partido. Reiteramos que el PT ha resuelto participar en 2018 en alianza con Morena. Sabemos las consecuencias, pero estamos dispuestos a afrontarlas”, sentenció en la Ciudad de México.