Como un hombre de trabajo, retos y oportunidades, así se define Héctor García García, quien a lo largo de 18 años ha luchado para darle a la gente de Guadalupe mejores oportunidades.
El hijo de Heriberto García Gómez y María de los Ángeles García Tamez, vivió sus primeras primaveras en la casa marcada con el número 225 de la calle Zaragoza en la zona centro. Con el paso del tiempo se fue forjando como microempresario al instalar su primer negocio Mi Frutería.
A la par de ser comerciante, cursó sus estudios de preparatoria y concluyó la carrera profesional de licenciado en Ciencias Jurídicas; al lograr la combinación, García García se dio cuenta que con esfuerzo se puede lograr una verdadera transformación.
Y gracias a su espíritu servicial, ha tenido la oportunidad de ser secretario General del Sindicato Único de Trabajadores de Guadalupe -con licencia-; secretario General de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP) en la entidad; y actualmente diputado local del PRI por el distrito 13.
El legislador está convencido de que el próximo gobernante del municipio de Guadalupe tiene varios retos por enfrentar, entre ellos el de apostarle al deporte, crear vialidades e incluir la participación ciudadana en el gobierno.
RAÍCES ARRAIGADAS
Héctor García García es un amante de su municipio, el cual lo ha visto crecer y por el cual día a día lucha para que siga dando mejor calidad de vida a los guadalupenses.
Con alegría recuerda cómo fueron sus estudios de nivel básico y profesional, donde debido a la falta de recursos económicos tuvo que trabajar desde chico instalando su primer negocio, una frutería a la edad de 16 años, algo por lo cual sigue siendo recordado entre los vecinos del sector.
“Yo era un niño muy inquieto, mucho muy travieso, quedé con algunas secuelas físicas por lo travieso, la casi pérdida de un ojo, pero siempre fui muy amiguero. Mi educación preescolar la cursé en el jardín de niños Francis -que aún existe-, posteriormente ingresé a la primaria Eleuterio González y después en el Colegio América, pero ya desapareció, ese lo mantenía la iglesia católica; y luego estudié en la secundaria en Capitán Alonso de León, en una escuela contigua a la presidencia municipal y que aún existe.
“Cuando cursaba los estudios de nivel superior, trabajaba en el día y estudiaba en la noche. En Guadalupe me desarrollé como pequeño comerciante con una frutería que se llamaba Mi Frutería, que fue muy famosa; luego tuve un negocio que también fue muy popular que acabo de cerrar hace poco, duré alrededor de 23 años y era de tacos y hamburguesas El Toro, por eso me dicen ´El Toro`”, contó.
Durante los años de estudio, su padre -quien era agricultor y emigró a la ciudad para buscar mejores oportunidades-, tuvo que pedirle a él y uno de sus hermanos que abandonaran los estudios, porque no alcanzaba a pagar la escuela.
“Éramos cinco hermanos, no nos podía seguir pagando la escuela, por lo que de la preparatoria a profesional quedé dos años fuera y estuve con el negocio de frutería durante dos años y luego la taquería.
“Nosotros estamos formados en el esfuerzo, nunca he dejado de tener una profesión y otra, no tengo un sólo trabajo, soy comerciante y estudiante, o tengo dos negocios, o soy diputado, líder de la CNOP y dirigente de un sindicato, siempre nos hemos formado en el trabajo, no sabemos hacer otra cosa más que eso”, expresó García García.
“La única oportunidad para estudiar era en el Centro de Estudios Universitarios, una vez terminando puse otro negocio en el centro de Guadalupe que se llamó Sanitarios y Azulejos García; una vez que terminé mis estudios traspasé mi taquería y acudí a varios cursos sobre derecho penal y diplomado en recursos laborales”, explicó.
Agregó que sus calificaciones no eran muy buenas, pero cuando tenía que aplicarse y querer un día hacía su máximo esfuerzo para lograrlo, tal y como debe de trabajar el próximo alcalde del municipio de Guadalupe.
El vecino del fraccionamiento Martí vive feliz con sus cuatro hijos y esposa, luchando fuerte y enfrentando los retos que día a día se presentan.
SU INGRESO A LA POLITÍCA
Su amor por la función publica nació por casualidad, dijo García García, y es que recuerda una mañana de 1993 cuando un grupo de trabajadores del municipio de Guadalupe habían sido despedidos de manera injusta y recurrieron al despacho jurídico, donde él laboraba.
“Fue por mera casualidad, yo con mi despacho jurídico -que fue el último negocio que tuve y se llamaba García, García y Asociados-, llegaron a visitarnos un grupo de trabajadores que habían despedido de manera injusta del municipio de Guadalupe en los tiempos que gobernaba Ramiro Guerra, y en esos tiempos, esos 44 trabajadores me pidieron la ayuda legal, la asesoría laboral, de ahí ganamos el pleito, me gané el afecto de los trabajadores y me eligieron al año su dirigente.
“Empecé a pelear con el entonces líder para que les hiciera justicia a los trabajadores, en el mes de abril del 1993 y en el 1994 me eligieron como su dirigente del Sindicato de Burócratas, entonces ya siendo servidor público empezó mi carrera en el servicio público siendo auxiliar administrativo -en la dirección de recursos humanos-, y de ahí me pasé al sindicato como dirigente, he entrado y salido como dirigente, luego fui secretario de organización, asesor y entre todo esto ya tengo 17 años de trabajar en el servicio público en Guadalupe”, recordó.
Meses después, el licenciado Juan Francisco Rivera Bedoya lo invitó a unirse a su campaña para elegir al próximo alcalde, en una elección que prácticamente era imposible que el Partido Revolucionario Institucional obtuviera la victoria.
En la segunda etapa empieza como primer regidor, y de ahí los éxitos comenzaron a llegar a su vida.
SU TRABAJO EN LA CNOP
El trabajo que ha desarrollado en la Confederación Nacional de Organizaciones Populares, ha sido muy apasionante debido a que ha tenido la fortuna de realizar trabajo social.
“Todos los días sirves a alguien, de hecho los trabajos que he tenido han sido muy similares, es muy raro que pase un día y no haya una gestoría. Es un excelente lugar para dormir tranquilo, sabiendo que hay algo que queda de buena obra, de buena acción y tienes la oportunidad de crecer políticamente
“Yo no soy de los que creen que crecer políticamente es sin antes ayudar a la gente, hay políticos que aparecen sólo en los tiempos electorales, nosotros hemos trabajado en los 18, 19 años todos los días y hemos servido a alguien, por eso en Guadalupe que es donde me desarrollo, la gente me conoce mucho.
“Ahora estamos en la búsqueda de posesionar a muchas personas de la entidad, proponiéndolos a nuestro partido como regidores, síndicos, diputados, como candidatos a alcaldes y será una magnifica oportunidad para consolidar mi profesión que es el concluir un trabajo bien hecho en ese sector, el dejar buenos políticos haciendo obras sociales”, dijo García García.
“Mi lema con todos los dirigentes siempre ha sido: primero es la gente, después es la gente y después primero sigue siendo la gente”, expresó.
EL TRABAJO LEGISLATIVO
A lo largo de estos dos años ha trabajado todos los días para sacar adelante reformas, pero por otro lado le ha tocado ver cómo la imagen del diputado se encuentra deteriorada debido a los malos elementos que se encuentran en el recinto legislativo.
“He tenido la oportunidad de aprender de las debilidades que tienes como legislador, porque la imagen del diputado está muy deteriorada, te decepciona saber que por más esfuerzo que haces, por unos cuantos la llevamos todos y dejan en muy bajo nivel la labor elemental en una sociedad como la legislativa.
“En lo personal con la gran oportunidad que se me dio, de ser el presidente de la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales, que es la que tiene mayor trabajo, el 80 por ciento del trabajo del Congreso me da la oportunidad de dejar huella, por ejemplo hemos realizado reformas constitucionales que nunca habíamos hecho en el Estado, que garantizan el derecho a la vida, a la salud.El derecho al deporte, hoy es obligación que los gobiernos inviertan en deporte”.
Durante su estancia en el Congreso local, ha tenido la oportunidad de procesar más de 198 expedientes, con los cuales pretende dejar huella en su faceta como legislador.
Ni de niño ni de adulto se imaginó llegar a ser diputado u ocupar algún otro cargo de elección popular, pero su esfuerzo lo ha llevado a colocarse en el gusto de la gente, especialmente la de Guadalupe.
“Nunca me imaginé llegar a una legislatura, soy un hombre que viene de muy abajo, mi padre nos sacó adelante, nos educó bien, trabajó muy duro por nosotros, y mi padre de agricultor a gran empleado de una gran empresa mueblería, lo más que pensábamos llegar era ser abogado, tener un pequeño despacho jurídico, la vida me ha dado muy buenas oportunidades y creo que con constancia, buenos amigos y con mucha ayuda de Dios, las cosas se han dado y esperemos que no lleguemos hasta aquí; ahora ya agarramos vuelo”, expresó alegre.
“Quien me impulsó para ser diputado, no sé quién fue, pero quiero creer que fue la licenciada Cristina Díaz, porque yo nunca he tenido padrino político, hasta ahora que me empiezan a adoptar algunos”, dijo sonriendo, “ahora ya empezamos como hijos adoptivos de alguno”, agregó.
APUESTA AL DEPORTE
EN GUADALUPE
Héctor García García aseguró que el próximo alcalde o alcaldesa de Guadalupe tiene un gran trabajo en el municipio, pues considera que falta invertir en el deporte, ya que es la principal área que se tiene atender para combatir la inseguridad.
“A quien le corresponda gobernar a la próxima tendrá que reedefinir el presupuesto y en lugar de hacer grandes obras -que deberán de hacerse con recursos federales y estatales-, habrá que tener habilidad de conseguir recursos e invertir mucho en deportes, sobre todo de niños de la niñez a secundaria, ¿cómo? Habilitando mayores espacios para el deporte que creo que es la mayor inversión.
“Yo creo y apuesto, que un peso hoy invertido en el deporte, será mañana un peso menos invertido en seguridad, quizá no a corto plazo, pero sí a largo plazo, todo lo que se invierta hoy en deportes, seguramente no lo haremos en seguridad”, destacó.
Consideró que otra aspecto que se tiene que atender es la construcción del estadio de Los Rayados de Monterrey.
“Yo sigo soñando con un proyecto ambicioso que sea un detonador de un nuevo Guadalupe, que vaya rumbo a la modernidad, donde por esa instalación del estadio se habiliten buenas avenidas que nos faltan.
“Sueño con que en Guadalupe, en el que hemos crecido y vivido toda la vida, haya una especie de periférico en lo que es la avenida Benito Juárez, que sea algo muy similar a lo que está en Garza Sada, que pueda salir desde Juárez y conectarte a la Y Griega, que sirva de avenida central para descargar todo el tráfico vehicular y que eso le permita instalarse a comercios, empresas, negocios, que le den empleo y mejor imagen al municipio, que siempre nos han considerado una ciudad a la que le falta mucho”, señaló.
Asimismo comentó que algo importante es la inclusión de la ciudadanía en el gobierno, por lo que se deberían de crear Consejos Consultivos en todas las secretarías municipales.
“Que los ciudadanos decidan qué hacer con Guadalupe, que no sea ocurrencia de los próximos gobernantes, porque no hay gobernantes que sepan todo, la gente es la que sabe qué les falta, qué les sobra, en qué quieren que inviertas “, comentó el legislador.
“Entonces la propuesta nuestra como sector y como diputado, para quien le corresponda el privilegio de ser el próximo candidato y luego alcalde, será: no puedes llevar un gobierno si no es muy cercano a la gente, y para acercarte a la gente no puede ser sólo el slogan, hay que trabajar”, concluyó. v