Médico por vocación, docente por voluntad, esposo y padre por amor a su familia y político de herencia-convicción, es el perfil que reúne Guadalupe Rodríguez Martínez, diputado del Distrito 2 y representante del Partido del Trabajo en la Legislatura LXXIII.
Rodríguez Martínez tiene un pasado profesional y personal que le ha resultado complejo dejar atrás desde que se postuló como candidato y ocupó la curul el pasado 1 de septiembre. Sin embargo, aseguró que es un “reto” que vale la pena enfrentar con tal de lograr beneficios para quienes le dieron su voto.
“Ha sido difícil alejarme, desprenderme de las consultas y clases en la preparatoria, pero esta nueva etapa en la política no me quita la vocación, ni la voluntad de ayudar a quienes lo necesitan, porque me interesa que tengan opciones para realizarse plenamente como individuos”, expresó el diputado.
Comentó que de manera formal ya no puede prestar su servicios como médico o docente aunque conservará esa cercanía y atención directa con la comunidad que lo requiere.
“Ahora la gente me consulta donde me pesca. Soy especialista en consultas de esquina y hasta hace un tiempo estaba en el ISSSTE, luego de haber tenido una trayectoria de más de 20 años en el área de urgencias y en consulta externa”, explicó.
La práctica médica la inició desde que hizo guardias en hospitales mientras estudiaba y posterior a ello (1976), se proyectó con la realización de consultorios médicos que ofertaron servicio gratuito en el sector noreste de Monterrey como Tierra y Libertad, donde fungió como dirigente del sector y fundó el Frente Popular del mismo nombre.
El espíritu de servicio lo desarrolló como un compromiso humanitario y social, que en su momento, lo llevó a “fracasar” cuando ofreció servicio médico en consultorios particulares.
“No sabía cobrar y eso no funcionó. Había que pagar renta, electricidad y en fin, todos los servicios”, mencionó el doctor, quien ha recorrido un camino largo en el rubro de atención a la salud.
Esas altas y bajas en el quehacer de las Ciencias de la Salud y la lucha por sobresalir con la satisfacción de ayudar a los demás, son factores que facilitaron a Rodríguez Martínez explorar otras facetas.
“En primer lugar, soy médico; la política social ocupa un segundo lugar, pero la vida misma me integró en otras facetas como la docencia y mi familia. Nunca dejo de lado mi tarea en la medicina y como dirigente de la organización popular”, apuntó.
EDUCAR PARA FORMAR
A JÓVENES
Desempeñarse como docente es para Rodríguez Martínez una acción de voluntad por trabajar en favor de la juventud con el fin de formarla, ya que la educación integra diversidad de asignaturas en las que los muchachos pueden participar y forjar su futuro.
“La educación se convierte en una posibilidad de formar y no sólo de educar, por eso hay áreas humanísticas, sociales, técnicas y recreativas que les permiten alejarse de rutas paralelas inadecuadas a su adolescencia; trabajar con voluntad propia, nos llevará a esa transformación”, dijo.
Ayudar a los muchachos a transitar de la adolescencia a una madurez en medio de un ambiente creativo, así como canalizar el conocimiento a la práctica y la experiencia, hará a los alumnos tener un futuro prometedor.
“Les abre las puertas al éxito con el impulso de sus ideales pero también les abre las puertas al empleo y a la posibilidad de seguir preparándose académicamente”, comentó el ex director y maestro en el Proyecto de la Facultad de Medicina en la Universidad y Preparatoria Técnica Emiliano Zapata.
Aunque desde hace meses Rodríguez Martínez se separó de su cargo en la escuela para cumplir al margen de la norma con su papel político en el Congreso, de vez en cuando visita la institución ubicada en el Sector Heroico de la colonia Tierra y Libertad, para compartir experiencias o visiones sobre el curso académico.
“Ya no puedo estar formalmente, pero compartimos algunas cosas . Creo así seguiré mientras sea de utilidad y no fracture mi compromiso como legislador, es un compromiso”, manifestó.
Forjar a hombres de bien pese a que habitan en una zona de conflicto y el hecho de sentirse joven entre jóvenes, son las satisfacciones que la docencia le ha dejado al diputado.
El tiempo ha transcurrido y pareciera que fue ayer cuando Rodríguez Martínez se adentró a las aulas como profesor, mientras cubrió un interinato en secundaria y posteriormente se incorporó a otras escuelas.
“Llegamos a ese espacio de manera ilegal, jugábamos a la escuelita pero ya cuando nos incorporamos a la SEP, tuvimos que hacerlo de verdad. Superamos las expectativas de una escuela común y nos profesionalizamos con una maestría en educación, entre otras cosas”, recordó.
Desde el 78 y a la par de realizar sus estudios en el Instituto de Ciencias de la Salud, Rodríguez Martínez comenzó su sendero en el rubro educativo. Desde entonces, impartió materias de Historia y Biología, por mencionar algunas.
POLÍTICO POR HERENCIA
Y CONVICCIÓN
La participación en la política del apellido Rodríguez Martínez tiene historia. En 1991, Guadalupe el médico y maestro, fundó el Partido del Trabajo y de ese año a la fecha, ha sido miembro del mismo en el Estado y a nivel nacional.
Pero no es todo, el diputado reveló que tuvo un tío que fue diputado local en Coahuila (1940), un hermano suyo participó en un movimiento magisterial en los 70 y su hermana, María Guadalupe, además de haber participado en el movimiento Juventudes Comunistas, por ahí del 68, fue ex diputada local.
El actual legislador se introdujo en el tintero político-social, poco después del Movimiento del 68. Formó parte del Movimiento Estudiantil de la Universidad de Nuevo León por la Autonomía y la Ley Orgánica y creó el Frente Popular Tierra y Libertad.
“En el 88 entramos en discusión para convertirnos en partido y formamos el PT. Preferimos hacerlo por una vía que nos permitiera tener control de la hegemonía de un partido que se iba a conformar como un bloque comunitario y estamos en función desde hace 19 años”, expresó.
La filosofía de canalizar beneficios al pueblo en todos los aspectos, sigue en pie por el partido y sus integrantes aunque dependerá del enfoque que traiga en mente cada dirigente o representante en la tribuna.
“Seguiremos trabajando en la política social e impulsaremos mejores condiciones de vida para los ciudadanos desde el ámbito de la educación y la salud tanto para niños, jóvenes y adultos”, expuso.
EN PRO DE LA EDUCACIÓN
Y LA SALUD
El ámbito escolar, la prevención y atención de enfermedades nutricionales y mentales, entre otras, son parte de la agenda legislativa que el diputado trabajará en la tribuna por lograr el bienestar social de los regios.
“Nuevo León es el primer Estado que tiene completo el primer año de preparatoria. Creo que estamos en condiciones de impulsar que la obligatoriedad de la preparatoria se acelere, se invierta dinero y se haga la planificación suficiente para que la universalización de la preparatoria sea una realidad en menos de 10 años, como se había estipulado”, señaló Rodríguez Martínez.
La salud es otra de las “metas” a las que el funcionario dirigirá sus propuestas, pues ha detectado que la pobreza en Monterrey sigue siendo una enfermedad y deriva otras como infecciones respiratorias, desnutrición y genera enfermedades mentales que pueden llevar a la mortalidad si no se tratan en tiempo y forma.
“El médico del sistema de salud necesita salir a la comunidad para conocer el panorama. Como diputado es lo mismo, hay que trabajar en prevención y en educación para la salud para construir un sistema de medicina preventiva que nos permita evitar los padecimientos más comunes, desde el punto de vista infeccioso y que nos permita evitar las enfermedades crónico degenerativas”, señaló el petista.
En cuanto a los jóvenes y adultos mayores, así como la sociedad en general, el legislador manifestó que se les debe apoyar, por lo que actualizará leyes ya aprobadas para satisfacer necesidades de acuerdo a circunstancias actuales de la población que carece de recursos.
Aunque como PT podrían ser “excluidos” de la comisión de salud, dijo Rodríguez Martínez, al creer que se pretende forzar su postura hacia un lado y no ser la forma correcta para alcanzar la mayoría -PAN o PRI-, asegura participará con las iniciativas que tiene en mente.
NO ME QUEDARÉ SENTADO
“No vamos a esperar que haya una Ley de Gestora. Nosotros vamos a empezar con un trailer de dinero, otro de hospital y otro de alimentos para poder resolver los problemas de la comunidad. A ver cómo le hacemos”, declaró el diputado.
Reconoció que no cuenta con los recursos suficientes para abatir la pobreza o el rezago educativo y de salud que persiste en el Estado pero agotará acciones para lograr el progreso de los ciudadanos.
“Haremos lo que se pueda, tenemos una agenda para visitar las áreas que comprenden el Distrito, donde veremos la gente que nos apoyó para responderles como quedamos, junto con la colaboración de organizaciones sociales que nos favorecieron; queremos llegar a todos”, indicó.
Afirmó que la función no es estar en la oficina o en la curul y comentó que hay que salir a las calles para conocer y atender las necesidades de la gente. Estará en tribuna y regresará a las colonias para respaldar con hechos, las promesas de mejora a los ciudadanos mientras estuvo en campaña electoral.
Y ya cumplió lo prometido. La semana pasada, Rodríguez Martínez visitó a algunas familias del sector Heroico en Tierra y Libertad y entregó paquetes de despensas y de útiles escolares a personas de escasos recursos.
Pero ser médico, maestro y diputado no hacen que Rodríguez Martínez olvide su rol como esposo y padre. En casa lo esperan su esposa e hijos; dos pequeños y una niña. A diario se comunica con ellos, comen juntos, entre otras actividades y los fines de semana, recalcó el también hombre de familia: “me dedico de lleno a ellos”.