Tal y como le sucedió al ex gobernador, Natividad González Parás, el actual mandatario estatal prista, Rodrigo Medina de la Cruz, cerrará su sexenio con un Congreso del Estado formado en su mayoría por oposición, que aunque no será absoluta, sí hará un contrapeso importante en la aprobación o desecho de propuestas provenientes del Palacio de Cantera.
Tras los comicios electorales del 1 de julio, la Cámara de Diputados se teñirá nuevamente de azul, pues el PAN logró posicionarse como la primer fuerza en el Congreso, al obtener cinco curules más que sus homólogos del PRI. Los legisladores blaquiazules ocuparán 20 espacios en el Congreso, contra 15 de los tricolor, tres del Panal, dos del PT y dos del PRD.
Y aunque por segunda ocasión en la historia de Nuevo León ningún partido político tendrá la mitad de los diputados más uno, lo que se conoce como mayoría absoluta, Acción Nacional tendrá una influencia importante en la toma de decisiones que se presenten en el pleno y se convertirá en una clara oposición al gobierno de Medina de la Cruz, administración a la que catalogan de excesiva y marcada por la opacidad, tal y como indicó la dirigente estatal del albiazul, Sandra Pámanes.
“Queremos ser sí un contrapeso para frenar aquellos excesos, como el endeudamiento, creación de nuevos impuestos y corrupción que ha estado marcando este actual gobierno y poner, a través del Congreso, esos límites a todo lo que ha venido ocurriendo”, señaló.
Y es que de acuerdo a panistas como Alfredo Rodríguez Dávila, diputado local electo por el distrito ocho, la presente legislación se caracterizó por estar al servicio del gobierno del estado y por convertirse en su “tapadera”, ante la serie de irregularidades que se han cometido en la presente administración, situación que no seguirán permitiendo cuando entre en función la próxima Legilatura el 1 de septiembre.
“Hemos tenido un Congreso sumizo, hemos tenido un Congreso que es tapadera del gobierno del estado, eso se va a acabar. Necesitamos aprovechar esta mayoría como nunca la hemos aprovechado, aunque no tengamos la mayoría tenemos que construir rápidamente una mayoría”, mencionó Rodríguez Dávila.
El también ex diputado federal señaló que a diferencia de sus homólogos del tricolor, el PAN usará su condición de mayoría relativa para beneficiar los intereses de la ciudadanía y no los de un partido en específico, apoyado por las minorías.
“¿Por qué (el PRI) las pararon (las iniciativas)?, porque tenían esa mayoría absoluta, junto con la -chiquillada- yo creo que con la mayoría que tendemos nosotros, tendremos una minoría más responsable”, mencionó Alfredo Rodríguez.
En palabras del político blanquiazul, el Congreso del Estado actual, en el que el PRI tiene mayoría, ha permitido que los recursos de Nuevo León se despilfarren, sin medida ni consecuencias, en situaciones nada claras, en lugar de ser utilizados en aspectos fundamentales para la entidad como el de seguridad.
Por tal razón y ante la ventaja de poseer la mayoría relativa, el PAN buscará frenar los que ellos denominan “excesos” que se han venido presentado en la administración de Rodrigo Medina y que han sido solapados por la legislatura saliente, dominada por el tricolor.
Por su condición de mayoría y de acuerdo a la estructura administrativa del Congreso, los panistas controlarán el presupuesto de la cámara y dirigirá áreas estratégicas como las de informática, comunicación, la oficialía mayor, el área jurídica, entre otras, pero más allá de sus alcance administrativo, los legisladores albiazules saben que con el apoyo de sólo dos diputados más tendrán la facultad de sacar adelante las reformas y hacerle frente al mandatario estatal.
“Vamos a obligar a que el gobernador cumpla su compromiso de campaña de quitar la tenencia”, dijo Alfredo Rodríguez, como una de las asignaturas prioritarias por las que abogarán en el pleno.
“Necesitamos acelerar el nuevo sistema de justicia penal del estado en donde le demos más herramientas a los Ministerios Públicos, tenemos una pésima impartición de justicia, gran parte se debe a falta de recurso para ellos”, agregó el diputado local electo.
Además se buscará obligar al gobernador a que por ley tenga que reducir su gasto corriente, evitar la discrecionalidad en los subejercicios y mayor transparencia en la rendición de cuentas, todas las anteriores facultades del Congreso y que para realizarlas los legisladores panistas sólo necesitarán de dos diputados más.
NO MÁS DESPILFARROS
Recientemente, la administración de Rodrigo Medina se ha visto involucrada en escándalos de corrupción y desvío de recursos, que han acarreado como consecuencia la destitución de algunos funcionarios y la renuncia voluntaria de otras, pero sin mayor castigo, de acuerdo a Alfredo Rodríguez.
Por este motivo, los legisladores del PAN planean tener especial atención en el tema de finanzas y buscarán cambiar las reglas para regular la rendición de cuentas.
“Necesitamos amarrarle las manos al estado y a los municipios de todos lo colores, necesitamos que rindan cuentas y más claras. El presidente y el gobernador no deben tener libre albedrío de que hacer con los recursos por eso necesitamos que tengan un Congreso más fuerte, más responsable más independiente para equilibrar los poderes en el estado”, comentó el Rodríguez Dávila.
Los supuestos desvíos de recursos en el Sistema de Transporte Colectivo Metrorrey, en el Instituto de Control Vehicular (ICV), las irregularidades en el Cecyt y la controvertida Torre de Gobierno son sólo algunos ejemplos de la fuga de recursos que ha presentado la administración de Medina de la Cruz, acorde al diputado.
De igual manera, buscarán medidas para frenar la deuda del estado y los municipios para evitar que lleguen a la quiebra, como ya se perfilan algunos. Lo anterior, a través de una “Ley de deuda” que se tenía contemplada desde la actual legislación, pero que quedó truncada.
“Hoy por hoy, tenemos alcaldes y gobernadores que se gastan el dinero que no les corresponde a su administración, que terminarán pagando las demás administraciones y les están amarrando las manos. Necesitamos tener una corresponsabilidad porque los estados y muchos municipios van directo a la quiebra porque todos los años gastan más de lo que ingresa”, mencionó Alfredo Rodríguez.
Contrario a lo que ocurrió en los pasados tres años, de acuerdo al panista, la 73 Legislatura entrante no estará sometida al gobernador y le exigirá rendir cuentas claras.
“Definitivamente cuando alguien gobierna acostumbrado a que los dos poderes sean sumisos y dependientes a lo que uno diga y mande como gobernador y de repente uno de ellos ya no lo es, siempre es mucho más difícil tener que rendir cuentas que hacer lo que uno quiera. Era lo que estaba pasando en los últimos tres años, no pasaba absolutamente nada”, expresó Rodríguez Dávila.
OPOSICIÓN RESPONSABLE
Para el diputado Alfredo Rodríguez Dávila, el triunfo que los electores le dieron a Acción Nacional en las urnas, sólo puede ser respondido en el pleno del Congreso, con iniciativas responsables que beneficien a la población de manera palpable.
“Lo que sí es que tenemos que acabar con ese rezago legislativo de forma rápida, inteligente y con resultados tangibles para la ciudadanía, que en algo les mejore su calidad de vida, que esa es una función que tenemos nosotros como prioritaria en el grupo parlamentario del PAN”, pronunció.
Con la intención de rendir cuentas frente a la ciudadanía, de acuerdo al diputado local electo, la bancada albiazul buscará generar entre los diputados foros fuera de la cámara “para que defiendan en la plaza pública lo que con tanto ahínco defienden adentro del Congreso”.
Más que una ventaja para el partido, la mayoría relativa del PAN será un beneficio para la población, así lo indicó la dirigente estatal, Sandra Pámanes, quien señaló que los legisladores blanquiazules no llegarán al Congreso del estado a poner trabajas a las reformas que la entidad necesita, sino por el contrario, asumirán un postura de diálogo con el resto de las bancadas para apoyar las iniciativas que sean importantes.
“Nosotros no vamos a llegar al Congreso del estado a obstaculizar el desarrollo de Nuevo León. Nosotros queremos darle oportunidad a cada partido político, representado en el Congreso a presentar todas aquellas iniciativas que sean importantes y apoyarlas de ser necesario”, mencionó la líder estatal.
CREACIÓN DE MAYORÍAS
Para que un partido tenga la mayoría absoluta en el Congreso del estado se necesitan al menos 22 diputados, pero en el Congreso entrante ninguna bancada cuenta con tal número de legisladores, por lo que será necesaria la creación de mayorías con la ayuda de las fracciones menores. El PAN sólo necesita de dos diputados más para lograrlo, mientras que el PRI requiere de siete.
El consenso entre bancadas será fundamental para el desarrollo de las reformas.
Por su parte, los diputados del PAN asumirán una postura de diálogo con el resto de las fracciones, siempre y cuando sea con argumentos sólidos y sin obedecer intereses partidistas.
“Con cualquier persona inteligente, pensante y que tenga como finalidad el bien común estamos totalmente abiertos al diálogo. Tenemos que dialogar, tenemos que hablarlo, pero no se vale que sin dar argumentos decir que estás en contra sólo porque te lo están mandando de Palacio de Cantera”, enunció el panista Alfredo Rodríguez.
Y aunque aún se desconoce cómo se harán las alianzas con el resto de las bancadas como Panal, PRD o PT para buscar tener la mayoría, lo que los legisladores panistas aclaran es que será de manera clara y sin perjudicar a la ciudadanía.
“Nosotros a diferencia de otros partidos políticos que hacen las mayorías de formas obscuras y abstractas, nosotros haremos las mayorías de frente a la ciudadanía, que sepa como nunca antes se ha sabido que es lo que decide y hace cada uno de los grupos parlamentarios en el Congreso”, señaló el diputado local electo.
PRI NO BAJA LA GUARDIA
Y aunque el PAN arriba con ventaja a la 63 Legislatura, esa condición no le preocupa al partido tricolor, pues no se tiene una ventaja total.
Para Héctor Gutiérrez, líder de la fracción priista en el Congreso del Estado, el PAN tendrá la misma fuerza que cualquiera de los grupos legislativos, pues al no tener la mayoría absoluta se verá obligado a construirlas, algo que el PRI se caracteriza por saber hacer.
“El común denominador del PRI siempre ha sido la construcción de mayorías, como sé que en la cámara federal también va a proceder, nadie tiene más de la mitad más uno”, comentó Héctor Gutiérrez.
Por su parte, Francisco Cienfuegos, diputado local electo por el distrito 13, indicó que la situación del PAN le permite a los futuros legisladores de la Coalición PRI-PVEM ser más exigentes con ellos mismos, estar abiertos a las propuestas y buscar una pluralidad al consensar, ya que nadie tiene la mayoría asegurada.
“No existe alguien que tenga mayoría absoluta, sino que se tendrían que sumar de perdido dos partidos para poder llegar a un consenso, ya sea los que tienen minoría, los intermedios como nosotros o el PAN que tiene el mayor número de diputados, pero no por eso mayoría”, dijo Cienfuegos.
RUMBO A LA GUBERNATURA
Aunque a nivel nacional el PAN sufrió un fuerte descalabro al quedar en tercer lugar en la contienda presidencial, de la mano de Josefina Vázquez Mota y perder el control de dos estados, en Nuevo León el blanquiazul demostró estar más fuerte que nunca y para muestra un botón.
Vázquez Mota se alzó con la victoria en la entidad, superando por más de 100 mil votos a su más cercano rival Enrique Peña Nieto; los candidatos panistas a diputados obtuvieron más curules en el Congreso del Estado que sus pares priistas y de los 10 municipios que conforman el área metropolitana de Monterrey, el PAN gobernará cinco, incluyendo la capital, el PRI cuatro y el PT uno.
Tales resultados no tienen otra interpretación para el panismo más que el hartazgo de la ciudadanía del gobierno actual.
“Creo que el estado de Nuevo León demuestra el sentir de la ciudadanía, no quiere seguir siendo gobernada por el PRI”, mencionó Alfredo Rodríguez, cuya opinión es compartida por la líder estatal del PAN.
“Es una decisión que los ciudadanos dejaron de manifiesto en las urnas el pasado 1 de julio, en una intención de marcar una distancia con el PRI y con el gobierno del estado, ante los resultados tan negativos que han tenido, pero al mismo tiempo con una confianza al PAN de encontrar en él la ventana o la puerta a la esperanza”, indicó Sandra Pámanes.
Ante tales resultados, no es de sorprenderse que el PAN se sienta confiado de que en 2015 podrían recuperar la gubernatura de Nuevo León, una posibilidad cada vez más cercana.
“Yo creo que el PAN hace lo necesario, tiene la gubernatura de 2015 en la mano, si dejamos de pelearnos entre nosotros, si hacemos las cosas como las debemos de hacer debemo de tener al alcance de la mano la gubernatura de 2015 para que Nuevo León se vuelva a pintar de azul”, puntualizó Rodríguez Dávila.
Aún faltan tres años para que los neoloneses regresen a las urnas a elegir gobernador, pero nada está escrito hasta el momento. Los panistas tendrán que saber sacar ventaja de los espacios que han recuperado en la entidad, ya sea en el Congreso o alcaldías para demostrarle a la sociedad que están preparados para gobernar.