El amorío entre los gobiernos municipales y los organismos civiles parece haber terminado.
Atrás quedaron casi cinco años de encuentros ininterrumpidos entre la plataforma ciudadana “Alcalde, Cómo Vamos” y las administraciones metropolitanas que daban el mensaje de una convivencia fructífera en beneficio de la sociedad.
De las “citas” mensuales pasaron a las trimestrales y ahora a la “relación a distancia”.
El 28 de junio de 2012 nació “Alcalde, Cómo Vamos”, una plataforma ciudadana que busca incorporar una agenda ciudadana a la gestión pública por medio de diálogos, compromisos, colaboración y rendición de cuentas.
Meses después de su creación, los entonces ediles de Monterrey, Guadalupe, San Nicolás, Apodaca, San Pedro, Escobedo, Santa Catarina, Juárez y García aceptaron incorporarse al proyecto como parte de la exigencia ciudadana que clamaba por mayor transparencia y compromiso.
Con la firma del acuerdo, parecía que iniciaba una nueva era en la gestión pública de Nuevo León, en la que los munícipes regirían mucho de su trabajo en base a los objetivos planteados en la plataforma, pero poco duró el encanto.
Con el cambio de administraciones en 2015 y la formación de la Asociación Metropolitana de Alcaldes (AMA), las discrepancias entre gestiones municipales y la plataforma comenzaron a surgir.
Por un lado, la AMA calificaba de injustos los estándares de evaluación, mientras que “Alcalde, Cómo Vamos” respondía que la rendición de cuentas no se negociaba.
Si bien en el pasado los exmunícipes Margarita Arellanes de Monterrey, César Garza de Guadalupe, Pedro Salgado de San Nicolás, Raymundo Flores de Apodaca, Ugo Ruiz de San Pedro, César Cavazos de Escobedo, Rodolfo Ambriz de Juárez y Jesús Hernández de García ya habían exhibido algunos desacuerdos con la manera de evaluar de la plataforma, el punto de quiebre se generó en las actuales administraciones.
El primero en astillar la relación fue el edil de San Pedro, Mauricio Fernández Garza.
Luego de desacreditar las evaluaciones de “Alcalde, Cómo Vamos”, el 2 de junio el panista envió una carta de renuncia al presidente del Consejo Cívico y la plataforma, Jesús Herrera Casso, a pesar de que durante su campaña a la alcaldía se comprometió juntos a sus homólogos metropolitanos a seguir siendo evaluado.
Fernández Garza acusó al organismo de culpar a los presidentes municipales de los problemas de la comunidad.
“He tomado la decisión de abandonar la plataforma ‘Alcalde, Cómo Vamos’. No puedo aceptar que, tanto sociedad, instituciones y la academia estén sólo cuestionado y en nada participando ni proponiendo para mejorar el entorno de gobierno que tenemos”, escribió en su renuncia el edil sampetrino.
Por su parte, en un comunicado, la plataforma señaló que “aunque lamentamos enormemente su decisión, nos obliga a fortalecer el trabajo”.
Tras “agitar el avispero”, el resto de los ediles metropolitanos amagaron con emular al sampetrino y abandonar la plataforma si el formato de evaluación no se modificaba.
La presidente en turno de la AMA, Clara Luz Flores Carrales, exhortó a los integrantes de “Alcalde, Cómo Vamos” a cambiar el parámetro de las evaluaciones, al tener cada municipio necesidades distintas.
La tricolor afirmó que cuando se firmó el compromiso no se especificó la manera en la que se calificarían a las gestiones municipales.
“No sé en qué parámetro se basan para decir que una cosa es más importante que la otra. Simplemente no se dijo qué estudiar para el examen para saber qué me van a evaluar”, sentenció la priista.
La tensión llegó a tal grado, que los integrantes del organismo decidieron cambiar el formato de las evaluaciones.
En una primera instancia, las reuniones entre ediles y la plataforma se eliminaron. Ahora, los encuentros serían individuales y públicos, en donde se le daría la oportunidad al munícipe de dialogar directamente con sus gobernados.
Sin embargo, con la excepción de Apodaca y Santa Catarina, la propuesta no logró hacer eco entre los mandatarios municipales, quienes han optado por mantenerse al margen de la plataforma.
“Me gustaría preguntarle a la ciudadanía cómo interpretan que los alcaldes no quieran entregar información y si votarán en un futuro por personas que no cumplen lo que prometen”, cuestionó en agosto el director de la plataforma.
El presidente de “Alcalde, Cómo Vamos”, Jesús Herrera, enfatizó en que no se estaba cediendo a las peticiones de los ediles, pero que se estaban escuchando sus inquietudes.
“Lo que hacemos es escuchar y en base a eso describir una mejor forma de hacer las cosas, es una plataforma que tiene cinco años y todavía está en etapa inmadura y siempre va a estar mejorando”, comentó.
Como parte de su diversificación, el organismo celebró el pasado 11 de noviembre en las instalaciones de la Universidad de Monterrey (UDEM) el “Evaluatón”, un ejercicio más de transparencia de las alcaldías, al que sólo asistieron representantes de Apodaca y Santa Catarina.
El ejercicio, que formó parte de la evaluación trimestral de la plataforma, arrojó resultados importantes sobre la opacidad de las administraciones, pero más trascendente aún fue que evidenció la ruptura entre ediles y organismos civiles.
El 15 del presente mes, sin la presencia de autoridades municipales se presentaron las evaluaciones más actuales de los munícipes metropolitanos.
Los rubros calificados fueron fortalecimiento de la policía municipal, disminución en muertes por colisiones viales, respuesta de municipios a demanda ciudadana de tapar baches, incremento de metros cuadrados de áreas verdes por habitante y transparencia en permiso de casinos.
Y aunque la mayoría de los municipios reprobaron su evaluación, ninguno tuvo un acercamiento con la plataforma para defender su labor.
“Ni siquiera fuimos invitados”, sentenciaron los alcaldes metropolitanos en un evento previo al que asistieron en el centro de Monterrey y que se desarrolló minutos antes de que las calificaciones se presentaran a la opinión pública.
Y es que, en el nuevo formato, los ediles reciben las calificaciones por medio de sus enlaces, antes de que sean públicos y ya depende de ellos si solicitan una audiencia con “Alcalde, Cómo Vamos” para refutar el resultado, de acuerdo con Luis Ávila.
“Se les mantiene a sus equipos al tanto de toda la información. Los equipos siempre tendrán toda la información actualizada por parte de la plataforma, pero si un alcalde quiere profundizar en algún punto de la evaluación o dar alguna explicación, esperamos que sean los alcaldes los que busquen a la plataforma, no al revés.
“Nosotros ya no estamos convocando a ningún evento a los alcaldes. Esperamos que, si ellos quieren hablar de un tema, sean ellos los que convoquen a la plataforma y creo que esa es una demanda ciudadana que cada vez tenemos que esperar que las autoridades rindan cuentas, no ir a pedírselas como si fuera un favor, porque no lo es”, aseveró Luis Ávila.
En vísperas de los comicios de 2018, el director de la plataforma pide hacer una reflexión sobre el distanciamiento de los mandatarios municipales, los cuales, en su mayoría buscarán estar en la boleta para reelegirse o buscar un nuevo puesto de elección popular.
“Es responsabilidad de los alcaldes responder o no a la demanda ciudadana. Yo creo que el mejor juicio viene de los propios ciudadanos, sobre todo en el concepto que viene. La exigencia ciudadana aquí seguirá siempre.
“E incluso si hacemos una interpretación de la Ley de Transparencia, de la nueva Ley, incluso están obligados a generar indicadores cuando hay una demanda social atrás. La responsabilidad es de ellos.
“Muchas veces intentaron manejar que todos estaban en un mismo nivel de compromiso o no compromiso y la realidad es que no. La realidad es que unos son más abiertos que otros y eso se evidencia el día de hoy”, expresó Luis Ávila.
Y fue así como en apenas cinco años la utopía del estado ideal, en el que los gobiernos municipales trabajaban de la mano de las organizaciones civiles se desvaneció, por lo que el “romance” entre ambos entes podría declararse terminado.