Que el perro es el mejor amigo del hombre ha quedado demostrado en innumerables ocasiones, pero… ¿es el hombre el mejor amigo del perro?
A juzgar por los 400 mil canes que deambulan libremente en las calles de la zona metropolitana de Monterrey, estas mascotas no reciben un trato similar de los humanos pues no sólo los abandonan sino además los maltratan, en algunos casos hasta causarles la muerte.
Los perros callejeros ya se han convertido en una plaga, por ello los centros antirrábicos de los municipios urbanos sacrifican en conjunto hasta mil 200 animales cada mes.
Pero autoridades y organizaciones que defienden a los canes coinciden en que la culpa no es del perro, sino de quien lo hace mascota.
PROBLEMA SANITARIO
El paisaje citadino no se dibuja sin la silueta de un perro solitario y en las noches nostálgicas no existe un cuadro con un tejado sin un gato maullando a la luna. Pero estos personajes no llegaron solos, son animales abandonados por sus dueños.
Se estima que existen 400 millones de perros callejeros en el mundo.
En México, las cifras alcanzan los 18 millones de perros y 12 millones de gatos que deambulan por las calles buscando la escasa comida en basureros y, si tienen suerte, un trozo de vianda ofrecido por algún compasivo transeúnte.
En los centros antirrábicos, sus ojos cristalinos y puros se mueven detrás de la rejilla de un lado a otro, buscando una explicación. Esos dulces ojos son ojos de perro extraviado. La inyección de anestesia pronto provocará que se cierren en un descanso eterno.
“No hay mucha conciencia aquí en la ciudad acerca de que los perros deben estar dentro de sus casas. Aún la gente cree que los perros deben estar en la vía pública”, comenta Luis Gerardo González, veterinario del Centro antirrábico del municipio de Guadalupe.
El problema de estos animales es que representan un alto riesgo sanitario. Simplemente, al buscar su comida riegan basura, lo que puede generar la aparición de infecciones y el aumento de plagas como lombrices, pulgas y garrapatas.
La contaminación por las heces fecales es otro de los problemas de salud que se generan día con día pues van ensuciando no sólo el suelo, sino también el mismo aire que todos respiramos.
¿Quién no ha caminado por la calles con la mirada al frente y de repente siente en la suela del zapato el recuerdo de estos animalitos sin dueño?
“En promedio, un perro produce 200 gramos de heces fecales al día, ¿cuánto no hay en las calles?”, ilustra Miguel Benítez, coordinador de Prodefensa Animal (Prodan), y agrega que al secarse, esas partículas vuelan con el aire y se depositan en todas partes, hasta en los alimentos que se consumen en la vía pública.
SIGNOS DE VIOLENCIA
Cada año, unas 4 mil 500 personas son mordidas por perros en Monterrey y su zona conurbada. Solamente en el municipio de Guadalupe son hasta 3 los casos que se reportan diariamente por ataque de un animal y hasta 20 quejas por diferentes pro-blemas causados por los mismos.
Afortunadamente, desde 1992 en Nuevo León no se ha presentado un caso de rabia, y los pocos animales que han sido sacrificados por padecer este mal en los últimos años provenían de entidades vecinas.
Fundación Luca trabaja desde 2004 para buscar una mejor relación entre los hombres y los animales domésticos. Los voluntarios de esta organización civil han albergado perros víctimas de tiroteos y hasta un gato que fue atravesado por una flecha.
“Como siempre, se desborda la violencia que tenemos como sociedad contra los más débiles, ya sean niños, ancianos o animales”, reprocha Angélica Elizondo, representante de Luca, y agrega que los ataques que ejercen los animales en contra del hombre, ya sea por instinto o por una actitud adquirida (como el perro que aprende a morder por órdenes de su amo), no justifican el hecho de responder de la misma manera.
Elizondo, entrevistada en la sede de Luca, en el municipio de San Pedro, explicó que la explotación y la venta no controlada de las mascotas es otra forma de violentar su integridad.
Al respecto, Miguel Benítez, de Prodan, sostiene que “al comprar una mascota fomentas la explotación de la misma. Provocas que mucha gente se dedique a explotar a los animales, teniéndolos para cría”.
Si tomamos en cuenta que una perra puede dar a luz a 60 mil cachorros en 7 años, y una gata más de 400 mil en el mismo periodo ¿cuántos de ellos serán abandonados a su suerte en la calles de la ciudad?
“Violencia es violencia. En humanos, en animales. ¿Cuál es la diferencia?”, sentencia Elizondo.
RESPONSABILIDAD SOCIAL
El mes pasado, un perro callejero llamado Rosco salvó a un niño de 4 años que se encontraba durmiendo mientras se incendiaba su casa. El héroe canino sufrió quemaduras en el 30 por ciento de su cuerpo pero salvó a su amo.
Este acto de valentía le brindó a la mascota aprecio y reconocimiento entre la comunidad regiomontana. En la vida cotidiana no es extraño que los animales domésticos lleguen a realizar tareas sumamente complejas.
La fidelidad de las mascotas es una cualidad comprobada y el rol que pueden llegar a representar en las instituciones de una sociedad son fundamentales, tal es el caso de los perros bomberos y policías.
“Son una parte integral de nuestra sociedad y al domesticarlos nosotros tenemos una responsabilidad con ellos”, afirma Angélica Elizondo, de Fundación Luca, que está ayudando en la recuperación de Rosco.
Para las asociaciones que trabajan por el bienestar de los animales, la ética juega un papel sumamente importante y no sólo debe darse en las relaciones humanas, sino con todos los seres vivos.
“Los animales tienen su propio valor, no son un juguete. Darles techo y cuidados para luego arrancárselos lo vemos igual de poco ético como hacérselo a un niño”, comenta Elizondo.
Los defensores de los animales explican que adquirir una mascota no es cuestión de moda. No es como en las películas de Disney donde tener 101 Dálmatas resulta toda una divertida aventura. Al comprar ya sea un perro o un gato se adquieren grandes responsabilidades que sólo pueden ser cubiertas por gente que tenga el tiempo, la disposición y el espacio necesario para dejar entrar a su vida a un nuevo miembro de la familia.
Fundación Luca, en coordinación con los gobiernos municipales del área metropolitana, realiza conferencias, concursos, proyecciones de video y teatro guiñol en las escuelas de la ciudad para crear conciencia del problema.
“Es un trabajo que debemos hacer tanto las asociaciones, los gobiernos así como la sociedad en su conjunto. Cada uno de nosotros tenemos un rol que cumplir”, dice Angélica Elizondo.
Por su parte, el equipo de voluntarios en Prodan lleva a cabo conferencias que explican el problema de la sobrepoblación y el maltrato que sufren los animales.
“Tratamos de disminuir la población (de animales callejeros). Apoyamos a las organizaciones en la esterilización y con las pláticas en las escuelas para crear conciencia entre los niños”, comenta el veterinario Luis González.
ESTERILIZACIÓN Y ADOPCIÓN
La esterilización a temprana edad es un procedimiento que ayuda a disminuir el pro-blema de la sobrepoblación de los animales domésticos.
El proceso de esterilización no es doloroso y es de provecho tanto para el animal como para los dueños. Consiste en la castración en machos y el retiro del útero y los ovarios en hembras.
Existe el mito de que la esterilización vuelve agresivos a las mascotas, pero la realidad es todo lo contrario. El animal, al no estar excitado por las hormonas, enfoca su atención en la fidelidad y el cariño hacia su amo.
La Sociedad Americana para la Prevención de la Crueldad en Animales (ASPCA) recomienda esterilizar a las mascotas tan temprano como sea posible. Además de evitar crías no deseadas, previene cáncer en los testículos, enfermedades de próstata y hernias en los machos, así como infecciones del útero y cáncer de mama en hembras.
Una de las grandes ventajas de este procedimiento es que mejora la calidad y prolonga los años de vida de las mascotas.
Organizaciones como Prodan y Fundación Luca tiene un programa intensivo que invita a la comunidad regiomontana a adquirir sus mascotas por medio de la adopción. Alrededor de 60 perros y 20 gatos mensualmente son recibidos en un nuevo hogar.
“Hay que ser responsables del costo de mantener a un animal. Cuál es el costo de las vacunas, su comida especializada. Incluir un animal en nuestras vidas es una decisión muy importante”, comenta Angélica Elizondo.
Los animales que ofrecen estas organizaciones son recogidos por voluntarios o rescatados de los diferentes antirrábicos del área metropolitana y el tratamiento que les proporcionan son vacunación, desparasitación y esterilización.
Los requisitos para adquirir un perro o un gato a través de la adopción son mínimos y esenciales: evaluar si realmente se quiere hacer cargo de una mascota, contestar un cuestionario o una entrevista y pagar un donativo mínimo para solventar los gastos del veterinario.
“Que no compren. Ya tenemos un exceso de población y abandono de perros y gatos en la calle. Mejor adopten”, propone finalmente el coordinador de Prodan, Miguel Benítez.
Ivett Muñiz es una mujer que visitó la fundación Luca, donde conoció a Mía y se enamoró de ella. La perrita Cocker Spaniel sufrió severos traumatismos a manos de un grupo de jóvenes que no solamente la golpearon sino que la quemaron e hicieron que perdiera un ojo.
La recuperación de Mía fue lenta y dolorosa, le ha costado mucho tiempo y esfuerzo a su nueva dueña lograr que pierda el miedo y la desconfianza hacia cualquier ser vivo, en especial personas, pero ha tenido notables avances gracias a su cariño.
“Yo decidí adoptarla porque la vi muy desvalida, que había sufrido mucho y me dio mucho coraje y sentimiento pensar que un ser humano le hubiera hecho eso a un animalito inocente.
“Ya tengo un perrito, Leo, y sabía que no iba a ser fácil lograr que Mía recuperara la confianza pero con esfuerzo, paciencia y mucho cariño lo hemos ido logrando. Ahora ya la saco a pasear y no se espanta de la gente ni de otros perros, ya es más tranquila pero a veces se pone nerviosa y tengo que calmarla”, cuenta la joven ama de casa.
Así como Ivett, hay cientos de personas en Nuevo León que acuden a Luca o Prodan y adoptan animalitos necesitados de un hogar donde se les cuide y proteja, pero lamentablemente no son suficientes amos para tantos perros y gatos.
Son ocho las asociaciones regiomontanas que buscan proteger los derechos de los animales pero a pesar de la coordinación entre ellos en sus campañas y voluntariados, la problemática de perros y gatos en la calle rebasa su trabajo y las buenas intenciones por ayudarlos.
La lucha no es fácil, aún así han alcanzado grandes logros como cambiar, para nuestra ciudad, la norma oficial que consiste en matar a los perros callejeros con descargas eléctricas. En Monterrey los animales encerrados en las perreras son sacrificados con una sobredosis de anestesia. Una muerte menos dolorosa.
Se le pregunta a Angélica Elizondo cuál es la parte más difícil de su tarea como voluntaria de Luca:
“La impotencia de ver un animal a los ojos, ver la esperanza que tiene en sus ojos y, a veces, no poder ayudarlos. Sufrir junto a ellos”.