En medio de los escándalos que envuelven a Promotora Ambiental S.A.B. de C.V. (PASA) en otras ciudades de la región por amenazas, sobre costos e incluso falsificación de firmas, la compañía recolectora busca ganar nuevamente la concesión del servicio en Monterrey.
Y es que la compañía, que desde 2002 y hasta enero de 2014 tiene la concesión en la capital regiomontana por ese servicio, no ha cumplido con las expectativas de los ciudadanos, quienes constantemente se quejan del funcionamiento de la empresa.
Cuando el Cabildo de Monterrey está en duda si le renueva o no la concesión a esta empresa, precedido por una denuncia de PASA con el Ayuntamiento de Apodaca -que finalmente perdió la primera-, basta recordar dos casos sucedidos en entidades vecinas.
Sólo por mencionar dos ejemplos: Reynosa, Tamaulipas y Acuña, Coahuila, vivieron conflictos con Promotora Ambiental por costos impagables del pésimo servicio de recolección y la dudosa extensión de contratos.
PASA actualmente tiene presencia en 48 ciudades del país ofreciendo servicio de Recolección Privada, Recolección Doméstica, Rellenos Sanitarios, Estación de Transformación de Residuos, Centro de Reciclaje PET y Tratamiento de Agua.
En Nuevo León la compañía tiene concesionada la recolección de basura en Monterrey, San Pedro y García, mientras que en Cadereyta ofrece el servicio de rellenos sanitarios.
Y aunque en los tres primeros municipios PASA se ha visto envuelta en escándalos legales y de posible suspensión de servicio por falta de pago, la mayor problemática se dio en otra jurisdicción del área metropolitana: Apodaca, en donde la compañía recolectora perdió el concurso de licitación ante Red Recolector y bajo amenazas y tribunales ha intentado anularlo.
“Los señores (de PASA) actúan con doble moral porque no son nuevos en esto. Han sido sujetos de muchísimos procesos en donde se les ha rescindido el contrato y por falsear documentos, lo cual -creo yo- no debe de ser y menos de una empresa de esta magnitud que incluso cotiza en Bolsa. Se deben de acabar esas prácticas (de amenaza)”, mencionó Raúl Ramírez, asesor jurídico de Apodaca.
Y es que tras la pérdida de la concesión por 20 años, la empresa recolectora presentó un recurso de inconformidad ante el Tribunal Superior de Justicia y solicitó al municipio una indemnización por 147 millones de pesos, argumentando que se asignó de manera directa la concesión del servicio.
Ante las acusaciones, el alcalde apodaquense, Raymundo Flores Elizondo, mencionó que el concurso de licitación para concesionar el servicio en el municipio se realizó conforme a la Ley, incluyendo el darlo a conocer a los empresarios a través de la prensa.
“Estoy convencido de que hemos cumplido con lo que marca la Ley. No ha habido ninguna queja hacia ninguna autoridad y no hemos infringido nada; las reglas son claras y nosotros hemos cumplido con cada una de ellas”, comentó Flores Elizondo
“Yo invito a la persona que puso el desplegado o los desplegados, porque son en varios medios de comunicación, pues que revisen en qué parte de la Ley estamos fallando, porque hasta ahorita nosotros estamos convencidos de ir puntualmente con transparencia, con apego a derecho a hacer lo que estamos haciendo”, agregó el edil.
Y es que aunque PASA alegó que cotizó un precio menor al de Red Recolector por tonelada de basura (297 pesos contra 399), el municipio optó por la segunda opción basado en un análisis de cuatro ejes: financiero, legal, técnico y administrativo, acorde a Raúl Ramírez.
“Nosotros al analizar toda la documentación, desde el punto de vista que nos obliga la Ley en cuatro rubros que es un dictamen técnico, legal, administrativo y financiero, nos dimos cuenta de que había una actitud tendenciosa a desestabilizar el proceso de licitación vía precio porque en otros municipios en donde prestan el servicio el precio por tonelada es superior”, señaló el asesor jurídico.
“La idea de ellos era desestabilizar la licitación con un precio que sabíamos no iban a poder cumplir, y esto tiene que ver sustento en un aspecto de orden que los economistas llaman economía de escala”, agregó.
Un ejemplo claro de dicha situación es el municipio de Monterrey, en donde actualmente PASA cotiza la tonelada de basura a 414 pesos, aun cuando la lógica de la economía de escala indica que debería de ser menor al precio que le ofreció a Apodaca por tratarse de un municipio con más habitantes, y que por ende produce más toneladas de basura, acorde a Ramírez.
“A nosotros nos presentan un precio de 297 pesos, sin embargo, actualmente a Monterrey se lo cobran a más de 400 pesos, pero Apodaca tiene la mitad de habitantes que Monterrey. Entonces, en una economía de escala Monterrey tiene más habitantes, son más del doble de toneladas (de basura) el precio debería de ser menor”, argumentó el funcionario.
El asesor jurídico indicó que el precio concursado por PASA en la licitación fue tendencioso a efecto de “reventar” el proceso, una táctica nada nueva para la compañía.
“En una reunión con uno de los directivos, en la cual estuve presente, nos advirtieron esa situación. El mensaje fue así: ‘Dile al alcalde que le dé para atrás a toda esta licitación si no quieren tener problemas con nosotros’. Fue una amenaza disfrazada, a la cual nosotros respondimos que el proceso lo hicimos conforme a derecho y conforme a derecho íbamos a actuar”, señaló Ramírez.
“Ahora las licitaciones que no se hacen a capricho de PASA, van a empezar a tomar acciones como la que nos están haciendo ahorita: iniciando un juicio político contra los regidores de los municipios”, añadió.
Y es que recientemente Promotora Ambiental buscó ante el Congreso del Estado promover un juicio político contra los regidores de Apodaca, por considerar que la licitación se desarrolló de forma irregular.
Además intentó a través de los tribunales anular la selección de Red Recolector como la empresa recolectora de basura concesionada en el municipio más industrial de Nuevo León, que al año produce 121 mil toneladas al año.
Tras días de alegatos, el 9 de agosto el Tribunal Superior de Justicia del Estado emitió el fallo a favor del municipio, al no detectar ninguna irregularidad en la licitación, por lo que se le permitió seleccionar a la empresa que más le convenga para la recolección de basura. El fallo también inhabilitó a PASA a participar en cualquier licitación que concurse Apodaca.
Pero Promotora Ambiental volvió a apelar y actualmente el municipio está a la espera de que la Sala Superior del Tribunal Administrativo resuelva si la suspensión continúa o se revoca para efectos de que Red Recolector entre en operaciones.
“Confiamos en los representantes que tienen a su cargo el juzgar, el verificar que los actos de autoridad se hagan conforme a derecho. Vivimos en un estado de derecho y sobre ese actuaremos y sobre ese lo tutelaremos y respetaremos ante todo, sea favorable o adverso”, puntualizó Ramírez.
CONTROVERSIA
EN OTRAS CIUDADES
A inicios de año, el ayuntamiento de Acuña, Coahuila, acusó a Promotora Ambiental S.A.B de C.V. de ofrecer un servicio de recolección y tratamiento final de la basura lleno de irregularidades e incumplimientos, al grado de exigir la cancelación del contrato, tal como lo señaló, de acuerdo a medios locales, el director del Sistema Municipal de Agua y Saneamiento (SIMAS), Luis Manuel Navarro Galindo.
Y es que en palabras del funcionario, PASA amenazó con suspender el servicio de recolección de basura por la falta de pagos, mismos que aseguró se habían cumplido, a pesar de que la concesión de la compañía había vencido meses atrás.
En su momento, Navarro Galindo señaló que la empresa recolectora argumentó que la administración anterior había aprobado una extensión del contrato por 10 años más con Promotora Ambiental, pero que no había claridad en el acta de Cabildo.
“Cíclicamente, PASA adopta esta actitud amenazan en el último año de los gobiernos municipales, pretendiendo presionar para obtener beneficios y seguir alargando la concesión de un servicio caro y que deja mucho que desear, y puede ser brindado por el propio municipio”, reportó el diario Zócalo de Acuña en enero de 2013.
“El reclamo de la Administración es que en el contrató que venció en agosto del 2012, todo el equipamiento de PASA debería de pasar al municipio, mismo que tiene un costo superior a los 12 millones de pesos y el cual hasta estos momentos está usufructuando la empresa cuando debería ya ser propiedad del municipio”, agregó.
La turbia historia de PASA por Reynosa
En Reynosa, considerado el municipio más industrializado del norte de Tamaulipas y el principal eje troncal con las ciudades del Valle de Texas, existe un viejo problema con el tema del manejo de la basura.
En la pasada administración municipal uno de los casos más polémicos fue con la empresa Promotora Ambiental S.A.B. de C.V., cuando se suscribió un contrato muy costoso para la ciudadanía.
La tonelada recogida estaba tasada en 503 pesos para cada unidad con capacidad de siete toneladas y al menos dos viajes diarios. Se calcula que 35 camiones eran los que efectuaban esa labor, dimensionando así una cifra que va de los 400 a 600 mil kilogramos transportados por día para una población calculada entre los 600 mil y 700 mil habitantes.
El escándalo detonó cuando PASA suspendió la colecta a mediados de 2010, alegando un adeudo de 40 millones de pesos por parte del ayuntamiento.
Irónicamente el paro se suscitó poco después de que Promotora Ambiental había logrado renovar el contrato para operar por un plazo de 15 años con fecha de caducidad en abril de 2025, incluyendo la recolección doméstica y la operación del relleno sanitario.
SENTENCIA A PASA
No obstante, entrado en funciones el periodo de Everardo Villarreal Salinas (el actual edil), se tomó la determinación de empezarlo con una política de austeridad, debido al elevado nivel de endeudamiento en el que se le entregó la ciudad, que ascendía a los 250 millones de pesos.
El dinero que Promotora Ambiental reclamó no fue liquidado y, en respuesta, comenzó entonces una serie de jaloneos con el nuevo gobierno, lo cual agravó la situación, acabando con la invalidación del convenio, conforme lo establece el Código Municipal en sus artículos 175 y 47, que mencionan la posibilidad de rescindir un servicio privado por incumplimiento y por ser contrario a los intereses económicos de la población.
De hecho, diversos sectores de la sociedad pidieron que el Congreso del Estado y la Contraloría local llamaran a comparecer a los responsables, mientras la basura tenía meses acumulándose en las colonias y diversos comercios, siendo los carretoneros los únicos en hacer limpieza en las zonas habitacionales.
El colmo fue que en la administración anterior la dirección de Ecología, mediante la fuerza pública, le bloqueó el acceso a los remolques tirados de cuadrúpedos a la zona centro de la localidad, pero durante la crisis posterior éstos resultaron ser de gran alivio.
Fue entonces que el presente ayuntamiento solicitó apoyo al gobierno de Tamaulipas para la adquisición de camiones propios, iniciando la ciudad por su cuenta el trabajo de recolección.
De acuerdo con la dirección de Servicios Primarios este trabajo se mejoró gradualmente y en la actualidad se recogen unas 700 toneladas de basura cada día, aunque existen otros rubros que se descobijaron, ya que muchas colonias se quedaron sin cobertura.
A principios de 2013 Reynosa contaba con 32 vehículos recolectores en circulación y, en ese sentido, el presidente municipal señalaba que se estaba recogiendo más basura y gastando menos recursos, con un ahorro de 2 millones de pesos en relación al pasado periodo gubernamental, según declaró. A tres años de distancia las huellas que dejó PASA por Reynosa resaltan más por su gris historial, que por el trabajo realizado.
Las instalaciones -situadas sobre la carretera que conduce a Nuevo Laredo- que alguna vez lucieron repletas de camiones, hoy se observan casi abandonadas; ahora esta compañía sólo le brinda servicio a algunas maquiladoras y empresas privadas.