
No es un secreto que con el paso del tiempo la fiesta brava en Monterrey se ha apagado.
Ya no son aquellos años en los que la Plaza de Toros Monumental Monterrey lucía abarrotada por miles de personas que buscaban ver la acción taurina a manos de grandes exponentes como Manolo Martínez y Eloy Cavazos.
Actualmente, la plaza luce desolada en comparación con años anteriores, mientras que la afición parece estar al borde de la extinción.
Es por eso que la Asociación de Periodistas Taurinos de Nuevo León busca darle un segundo aire a la fiesta taurina en la entidad con la creación de la Escuela Libre de Tauromaquia.
“Esta escuela fue una idea a raíz de que no existe actualmente una escuela taurina que ayude a todas aquellas personas que tienen la inquietud de aprender el arte del toreo”, comentó Héctor Cuéllar, presidente de la asociación y director de la academia taurina.
Desde que comenzaron actividades el 24 de julio, cada jueves de 18:30 a 20:30 horas, Cuéllar, acompañado de Florencio Pruneda, miembro de la asociación y periodista taurino, y Juan Salazar, ex torero y maestro de la escuela, se dan cita en la Plaza Dulces Nombres, en el área de la Macroplaza, para reclutar a más gente que quiera aprender del oficio.
“Hemos estado jueves tras jueves haciendo prácticas con los que se han arrimado con la inquietud de aprender y personas que simplemente han venido a convivir. Hay jueves que se han convertido en una convivencia taurina y agrada porque es estar en contacto con gente afín al tema y aquí estamos”, mencionó el director.
De acuerdo con Cuéllar, la escuela cuenta con el apoyo del Instituto Estatal de Cultura Física y Deporte, quienes les facilitaron el lugar para realizar las prácticas y además se encuentran en negociaciones para mejorar el apoyo que les brinda dicha institución y así poder practicar próximamente tres días a la semana.
Como plantilla de maestros, hay matadores y novilleros en retiro, quienes pasan sus conocimientos a todo aquel dispuesto a aprender el llamado “arte del toreo”.
“Lo más importante es que todos ellos traen mucho corazón y ganas de animar y enseñar para apoyar a todos aquellos que tengan la inquietud del ambiente del toro”, mencionó Cuéllar.
Aquí se les enseña todo lo relacionado con la fiesta brava, desde teoría hasta movimientos. Gracias a la amplitud del espacio donde se reúnen, lo primordial para la Escuela Libre de Tauromaquia es la práctica.
“Nuestro eslogan dice ‘Itinerante y Práctica’: es itinerante porque hay veces que nos ponemos de acuerdo para ir a una ganadería donde haya oportunidad de ir a torear vaquillas y en lugar de venir aquí nos vamos a una ganadería que esté cerca; y práctica porque siempre practicamos aquí”, comentó el director.
Este conocimiento no sólo se pasa de maestros a alumnos, ya que entre los mismos maestros se pasan información, tips y noticias del mundo taurino para aprender algo más teórico.
Los fundadores de la escuela comentaron que la bautizaron como “libre” porque no hay presiones de ni un tipo.
Un ejemplo es que al inicio había inscripciones, pero prefirieron darles la bienvenida a todas las personas interesadas sin pedirles algún requisito, así vayan sólo a convivir.
“Todos son bienvenidos: niños, niñas, jóvenes y adultos que quieran aprender o simplemente apoyar el arte del toreo teniendo el conocimiento al respecto.
“Vienen muchos niños y jóvenes, pero no vienen solos, vienen acompañados de sus papás que son aficionados prácticos, que siempre les ha gustado la fiesta brava y que son los que regularmente abarrotan las gradas de las plazas de toros”.
El estar en un lugar al aire libre y público como lo es la Macroplaza, ha ayudado a que la escuela se dé a notar entre la gente que recorre el lugar, pero tanto Héctor Cuéllar, como Florencio Pruneda y Juan Salazar esperan que la Escuela Libre de Tauromaquia crezca lo suficiente para impartir clases en la Plaza Monumental Monterrey.
“Lo más lógico es que sea ahí porque hay que estar en contacto con el ambiente, además hay espacios cerrados que nos pueden servir como aulas, así como ya sucedió en el pasado. Ya tenemos un programa por módulos para la teoría, donde explicaríamos la historia del toro de lidia, la proveniencia de la fiesta brava, historia antigua y contemporánea, etcétera”, dijo Cuéllar.
Por su parte, Florencio Pruneda expresó que esperan que esto dé un resultado positivo y que “cuaje” bien para “poder tener proyección hacia el futuro y poder hacer ambiente en beneficio de la afición taurina en Monterrey”.
EL RESCATE DE LA FIESTA BRAVA
Uno de los factores principales que llevó a estas tres personas a inaugurar la escuela, además del amor que le tienen a la tauromaquia, es el rescatar el espectáculo de toreo.
“Una de las principales intenciones de esta escuelita es precisamente levantar ese decaimiento que ha sucedido en la fiesta brava durante los últimos años. Ha habido otros intentos en el pasado pero no ha prosperado. Nosotros tenemos fe en que esto salga adelante y tenemos fe en que la fiesta brava va a resurgir en Monterrey como en otras partes que está sucediendo en la República”, dijo Cuéllar.
Para Juan Salazar, el poco ambiente de la fiesta taurina se debe a que faltan más eventos de este tipo dentro del área metropolitana.
“Hay muchos factores que han afectado, pero el ánimo y la afición no se acaban”, aseguró.
Es por eso que como Asociación de Periodistas Taurinos y dirigentes de la Escuela Libre de Tauromaquia quieren promover la fiesta brava para ser como Aguascalientes y Tlaxcala, estados donde la gente es muy entregada a este tipo de espectáculos.
“Hay que promover nuestra fiesta, lo importante es eso. Es por eso que como asociación estamos dando todo el apoyo moral y sólido a la empresa que maneja la Monumental Monterrey”, dijo Florencio Pruneda.
Don Florencio espera que un día la Plaza de Toros Monumental Monterrey vuelva a ser la misma que en sus años de máxima gloria.
“Queremos que tal vez un día de estos, volvamos a ver esas plazas que vimos en aquellos años que llegaba hasta las banderas, esas plazas de que hubo grandes empresarios.
“Ojalá y resurja, en especial porque no queremos ver el año que viene la tristeza de que no hay, por lo menos, novilladas. Esperemos que haya festejos taurinos, porque es lo que nos interesa”, aseveró.
“LOS PROTESTANTES NO CONOCEN LA TAUROMAQUIA”
Se podría considerar que uno de los factores que influyeron en el decaimiento de los espectáculos taurinos en la entidad es por las protestas que diferentes asociaciones han realizado en contra de esta práctica.
Aunque en el resto del país las protestas en contra de la tauromaquia han causado revuelo, en la entidad, aseguró Héctor Cuéllar, éstas no figuran porque son muy limitadas, ya que sólo son alrededor de 30 personas las que se instalan fuera de la Plaza de Toros para expresar su descontento con la fiesta brava.
Para Cuéllar, este tipo de manifestaciones surgen porque la juventud tiene otro estilo de vida y no está acostumbrada a ver sangre de animales en comparación a otros tiempos.
“Esto ha sucedido contemporáneamente porque las personas de hoy en día, los jóvenes principalmente, no conocen lo que es un rastro o ven poco la sangre.
“De los años 90 para atrás, era muy común que personas en colonias mataran a un marrano o un chivo y cerca de los pueblos estaban los rastros; ahora las personas ven esto en televisión o ven en el noticiero los espectáculos con toros y no les agrada, los pone nerviosos porque no tuvieron esa oportunidad”, aseguró.
Además, defendió esta práctica porque “es una actividad que a través de siglos se ha considerado como un arte, no principalmente por lo que se haga ahí con el toro, porque en el toreo se han inspirado escultores, pintores, poetas, escritores, etcétera”.
Pese a todo esto, los miembros de la asociación son respetuosos con la opinión y los ideales de los protestantes, por lo que están abiertos a entablar un diálogo respetuoso con todo aquel que lo desee para promover lo que es realmente la tauromaquia y darles a conocer un poco más de la historia y los antecedentes del mismo.
“Estamos aquí para hablar con ellos sobre qué les falta saber, conocer y que sepan sobre qué es la fiesta brava. Estamos en la mayor disponibilidad en orientarlos en santa paz y expresarles por qué queremos nuestra fiesta brava”, expresó Florencio Pruneda.
Por su parte, Juan Salazar recalcó que los toros “son animales que fueron hechos para la pelea y es una especie que estrictamente va a morir.
“Dentro de la fiesta hay que hacerlos sangrar porque si no les va a dar un infarto por su temperamento. Cuando se tienta un becerrito en el rancho se le corta una oreja para que drene su sangre porque de lo contrario le dan convulsiones”.
“LA TAUROMAQUIA ES CULTURA”
Hace unas semanas, legisladores del Partido Verde Ecologista y el Partido Acción Nacional presentaron ante el Pleno del Senado una iniciativa para reformar la Constitución y elaborar una ley de aplicación general para prohibir los espectáculos con animales, entre ellos, las corridas de toros.
Sobre el futuro de la tauromaquia en el país y sobre todo de la escuela, los directivos se muestran optimistas, pues consideran que eliminar la fiesta brava sería terminar con una cultura.
“Va a continuar la fiesta brava en todas partes porque es una cultura, pero suponiendo que la aprueben, lo que puede pasar es que los animales simplemente se sigan toreando pero no a muerte, sin el sacrificio como sucede en corridas de diferentes países”, comentó Héctor Cuéllar.
Con respecto a la escuela, dijo, continuarán con sus actividades normales, ya que sólo imparten sus conocimientos taurinos.
Para Cuéllar, esta iniciativa no va a prosperar ni en el Congreso Local ni en el Senado porque, aseguró, la mayoría de los diputados y senadores son aficionados a la fiesta brava y saben que van a atentar contra una cultura.
Además, consideró que hay cosas más importantes que atender, como aprobar una ley que proteja a las mascotas e ir contra aquellas personas que los maltratan y no los atienden correctamente.
Los miembros de la Asociación de Periodistas Taurinos también invitaron a los legisladores a pensar en las personas que trabajan en los espectáculos taurinos y que mantienen a sus familias con sus ingresos.
“Nosotros en las plazas tenemos un personal de servicio de más de 30 personas, a las que les estamos dando el pan de cada día por las corridas de toros que se hacen dentro de la empresa, ¿qué pasaría con ellas?”
Pese a que está abierta la probabilidad de que puedan prohibir los espectáculos taurinos, lo que realmente les quita el sueño, revelaron, es la gente que no apoya el espectáculo, como los ganaderos y matadores.
De cualquier forma, se muestran renuentes a que la fiesta taurina muera en Monterrey, porque “es cultura, es arte, y a veces la gente no lo ve así, pero te da una formación como una persona”.
Lleva en la sangre amor por los toros
Alos 14 años muchas jóvenes tienen su vida enfocados en salir a divertirse con sus amigas.
Pero Milenia Arizbeth Salazar Hernández prefiere invertir su tiempo y energía en una actividad no muy común entre las jóvenes: la tauromaquia.
“Es algo de lo que siempre me preguntan mis amigas. Siempre me dicen: ‘¿Por qué te gusta?’, y les digo que ya son muchos años de estar en la fiesta brava, y como que se sacan de onda, pero pues nació de mí y de cualquier forma me apoyan”, afirmó entre risas.
La joven comenzó a interesarse en esta actividad desde muy pequeña, pues su padre le inculcó el amor a la fiesta brava.
“Me empezó a llamar la atención desde muy chiquita porque mi papá toreaba desde hace mucho tiempo, me platicaba sus anécdotas y me llevaba a la plaza de toros, me gustaba mucho ver cómo toreaban”, comentó.
Fue ahí cuando Milenia pensó algo que cambió su vida: “Si ellos pueden, yo también podría hacerlo”.
Tras decidirse a entrar de lleno a esta actividad, se inscribió a una escuela taurina en la Monumental y empezó a torear a los 10 años.
Actualmente, la joven becerrista ha participado en muchos festivales y ganaderías y se ha presentado incluso en la Monumental Monterrey.
Apenas es aspirante a novillera, pero Milenia ya piensa en realizar una carrera como torera profesional en un futuro.
“Me gustaría bastante ser torera, sería una gran experiencia en mi vida; ser una torera con mucha experiencia, sería extraordinario para mí”, comentó emocionada.
Milenia, que actualmente estudia el tercer año de secundaria, usa su tiempo libre para practicar.
Los jueves atiende la Escuela Libre de Tauromaquia, pero también en algunas ocasiones practica sus movimientos en su casa.
“Sé hacer muchos pasos como las manoletinas, no me salen muy bien pero sí me han enseñado mucho, las gaoneras, que es con el capote, los derechazos con la muleta, los pases por izquierda y muchos pasos me han enseñado”, mencionó.
Aunque muchas personas consideran la tauromaquia como maltrato a los animales, para Milenia es todo lo contrario.
“Para mí no es malo porque conozco mucho de la fiesta y siento que como ellos no conocen, no se saben expresar bien de la fiesta brava, piensan que es un significado malo pero realmente no se han metido mucho”, indicó.
Es por eso que la joven invita a todos los detractores a que primero investiguen sobre que trata la tauromaquia con gente profesional para ver si continúan teniendo la misma mala imagen sobre esta práctica.