“Te voy a decir algo y sólo te lo diré una vez: Tú no vas a conseguir trabajo porque eres gay”, fueron las palabras que en marzo pasado el personal de una agencia “head hunter” dijo a Adrián Romero, un hombre de 40 años, declarado homosexual, quien a su defensa sólo pudo tomar sus cosas y marcharse.
Esa fue la primera vez que el vecino del poniente de Monterrey se sintió discriminado por su preferencia sexual y desprotegido legalmente para defenderse del atropello.
Y es que en Nuevo León la comunidad LGBT (Lésbico Gay Bisexual y Transgénero) es vulnerable a este tipo de actos, debido a que en la entidad no se cuenta con leyes que protejan los derechos de mencionada minoría, que tan sólo en la mancha urbana de Monterrey es víctima de cerca de 50 crímenes de odio al año, acorde a datos de la alcaldesa regiomontana, Margarita Arellanes.
“Debemos de trabajar para que nuestra zona metropolitana sea más incluyente y más tolerante”, mencionó la edil, en el marco de la carrera 5K contra la homofobia el 19 de mayo.
La discriminación aún está en las escuelas, los trabajos, las instancias de los tres órdenes de gobierno y las calles, pero no en la agenda legislativa, que ya ha puesto en la congeladora diversas iniciativas presentadas por asociaciones civiles y organismos en pro de la diversidad sexual.
Tan sólo en la legislatura pasada la Ley para prevenir, combatir y eliminar la discriminación del Estado fue la décimo sexta iniciativa más votada por los neoloneses dentro de la consulta ciudadana “Tu palabra es Ley”, pero de nada le sirvió obtener mil 145 votos, ya que terminó en el buró del rezago.
Y mientras la sociedad avanza a paso lento, pero seguro en el tema de la tolerancia y aceptación de la comunidad LGBT, sus integrantes esperan, que a la brevedad, sus propuestas sean escuchadas en el pleno del Congreso del estado.
“Hay una incongruencia, mientras que la sociedad avanza en el terreno de los derechos humanos a la Cámara de Diputados no le interesa y no los discute. Creemos que la sociedad está pidiéndoles a los diputados que hagan algo al respecto”, mencionó Mario González, presidente de la asociación civil Explórate.
Y aunque el panorama permanece sombrío, una esperanza se vislumbra en el horizonte en las figuras del diputado independiente, Erick Godar Ureña y la alcaldesa de Monterrey, Margarita Arellanes, políticos que recientemente se han sumado a la lucha por los derechos de la comunidad.
El legislador propuso el 7 de mayo reformar el Código Civil del Estado para legalizar las bodas entre personas del mismo sexo, mientras que la munícipe participó a mediados del mismo mes en un evento contra la homofobia, en el que aprovechó para exhortar a los legisladores a que atiendan las iniciativas presentadas por la comunidad LGBT.
“Es un tema que está sujeto a un estudio, pero al que el Congreso del Estado no le puede sacar la vuelta. No puede ser que este tipo de iniciativas siempre terminen en las comisiones durmiendo el sueño de los justos. Más que nada yo creo que es el momento de tomar el tema y que los diputados dentro de su ámbito de responsabilidad tomen una determinación”, manifestó Arellanes Cervantes.
Para Mario González, quien durante ocho años ha trabajado a favor de la diversidad sexual y los derechos humanos de sus miembros, considera el simple hecho de que funcionarios públicos expresen empatía por su causa es sinónimo de avance.
“Creo que en ese sentido, que una edil se manifieste, e igual el diputado que presentó la iniciativa, son como aproximaciones hacia la modificación de las leyes, incluso Margarita Arellanes invitaba a los diputados que no echaran al cajón las iniciativas, sino más bien que las pusieran en la mesa, se hablara de ellas”, expresó González.
VOCES SE SUMAN
La conclusión es simple: la Legislatura no avanza a la misma velocidad que la sociedad en la lucha contra la homofobia, ya que mientras a nivel nacional el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred) muestra que siete de cada 10 mexicanos aceptan el matrimonio entre personas del mismo sexo, pocos estados han reformado sus Códigos Civiles para reconocer dicha unión.
Nuevo León siempre se ha caracterizado por ser un estado vanguardista en este rubro, pero otras entidades como Coahuila, Quintana Roo y el Distrito Federal se le han adelantado.
“Tiene que ver con coyunturas, en el DF no es aceroso que esté el PRD en el gobierno y desde ahí impulsen estas iniciativas. En Coahuila fue como un caso muy excepcional, fue un momento histórico cuando la diputada del PRI, Julieta López Fuentes, puso en la mesa la iniciativa y que tenían mayoría en el Congreso. Pienso que acá lo que falta es eso, que haya más consenso, alguien que presente la iniciativa, pero que convenza a la mayoría”, indicó Mario González.
En diferentes ocasiones grupos a favor de la diversidad sexual se han manifestado al exterior del recinto legislativo para urgir a los diputados que aprueben la Ley para prevenir, combatir y eliminar la discriminación, pero hasta el momento no han sido escuchados. Ahora se le suma la iniciativa sobre el Matrimonio Civil Igualitario, pero también la voz de importantes actores políticos.
El 19 de mayo, por primera vez se realizó una carrera contra la homofobia en Monterrey y en un hecho inédito la alcaldesa del municipio realizó un pronunciamiento a favor de los derechos de los homosexuales de manera institucional.
“Es un esfuerzo en donde se busca dejar a un lado todos esos odios que puedan existir por las preferencias sexuales y desterrar este mal que es tan arcaico y que entorpece la convivencia social en cualquier ciudad y comunidad”, mencionó la edil.
En su discurso, Arellanes Cervantes señaló que el municipio de Monterrey tiene el compromiso de promover el respeto a los derechos humanos de todas las personas que integran el municipio y se comprometió a que su administración será incluyente con todos los grupos.
“Queremos ser un solo Monterrey, pero no nada más en infraestructura, educación o prosperidad social, también en cuanto aceptarnos como personas, que podemos pensar distinto, pero que todos tenemos el mismo objetivo: tener una ciudad más sólida y fuerte de mayores oportunidades.
“Reconocer que Monterrey es la casa de todos”, exaltó la munícipe.
Y es que por primera vez en la historia, la cabeza de la administración de Monterrey se sumó a la lucha contra la homofobia, una acción que al parecer del presidente de Explórate, predice una nueva voluntad de la clase política.
“Que la alcaldesa de Monterrey, Margarita Arellanes, haya participado y hecho un pronunciamiento, si no oficial, por lo menos personal, creo que es un avance, que sí debe generar un impacto en la gente que lo escuchó”, comentó el activista.
Para los organizadores de la carrera 5K, la presencia de la edil trascendió más allá de su asistencia, ya que al ser un personaje importante de la política estatal, emanada de un partido conservador, su postura contra la homofobia podría ser imitada por ciudadanos y demás políticos.
“Siempre quisimos que Margarita Arellanes fuera a la carrera, no teníamos la seguridad de que asistiera, por lo que sí considero como un acto de valentía de la alcaldesa el apoyarnos porque es como ir en contra de los estatutos del partido”, dijo González.
ACTUALIDAD
México ocupa el segundo lugar de América Latina en el número de crímenes por homofobia, de los cuales el 9 por ciento se registran en el área metropolitana de Monterrey.
En 1990 la OMS suprimió a la homosexualidad de su lista de trastornos mentales, ya que reconoció que la orientación sexual no se elige ni se debe de intentar modificar; sin embargo, aún existen personas que se rehúsan a aceptarla y a juzgar a quienes en su opinión “la padecen”.
Han transcurrido casi dos meses desde que los derechos de Adrián Romero fueron pisoteados en una agencia de colocación sólo por sus preferencias sexuales. El capítulo humillante de aquella tarde fue el primero en su vida, pero seguramente no el último de la comunidad LGBT mientras la Legislatura no los arrope.
Aún así, Adrián continúa luchando por conseguir un nuevo empleo, el cual está optimista de encontrar. Y es que a pesar de las dificultades, los homosexuales transitan por un camino cada vez menos hostil.
“Hay cierta generación que ya lo acepta la homosexualidad y lo ve normal, son la gente como de los 35 para abajo. Los de 40 a 50 lo aceptan, pero no muy bien y los más grandes todavía se resisten”, mencionó Adrián Romero.
La carrera 5K contra la homofobia, desarrollada la mañana del 19 de mayo, demostró que los regiomontanos están incluyendo cada vez más a las minorías en sus actividades.
Fue una carrera en la que participaron cerca de 300 personas, en su mayoría heterosexuales, quienes dijeron “basta” a la discriminación.
“Ya era necesaria una carrera de este tipo. En todo el país se hacen eventos en contra de la homofobia, pero pareciera que son eventos exclusivos de los grupos vulnerables, de la comunidad gay, pero nunca se había hecho un evento que fuera de la comunidad en general, en donde la sociedad saliera y dijera ‘aunque no somos homosexuales estamos en contra de la discriminación’ y para nosotros eso es lo interesante”, dijo Mario González.
Aunque el éxito del evento no radicó en el número de asistentes, sino en el mensaje que transmitieron, el buen sabor de boca que dejó en los organizadores los animó a darle continuidad el próximo año, aunado al apoyo que ya les aseguró la alcaldesa de Monterrey.
Aunque falta trabajo por hacer, pero cada vez son más las voces que se unen para pedir que los derechos de la comunidad LGBT sean velados no sólo de manera moral sino también legal.