
Alo largo de 2010, un total de 74 mujeres perdieron la vida en Nuevo León . Esta escalofriante cifra fue casi triplicada en los 12 meses del año 2011 al registrarse 216 pérdidas, lo que ha llevado a la entidad a convertirse en una de las menos segura para las damas.
Aproximadamente un 75 por ciento han muerto al quedar en medio del fuego cruzado, por errores en los que se ha denunciado como responsables a las fuerzas de seguridad o por “pertenecer” a un grupo delictivo.
Desafortunadamente el panomara para este 2012 no es nada alentador, y es que en las primeras tres semanas de enero ya se tenían registradas la pérdida de 13 mujeres, todas víctimas de la violencia social.
En 2009 murieron 39 mujeres. El año anterior fallecieron alrededor de 28 y en el 2007, 24 dejaron de existir, según cifras recabadas por el Instituto Estatal de la Mujer en la entidad.
De las damas que fallecieron hasta diciembre de 2011, 25 han sido víctimas de agresiones en el hogar. Número que ha permanecido en los últimos años.
La violencia contra las mujeres en los últimos 10 años ha escalado en cantidad y en brutalidad, se han encontrado los cuerpos mutilados en bolsas y dejados en terrenos baldíos, cajas de plástico o colgados en puentes peatonales.
Del 2000 al 2010 se contabilizaron 320 defunciones. Actualmente Monterrey es el municipio que encabeza la lista de homicidios contra la mujer, al contabilizar 118 seguido por 16 de Guadalupe y 12 de San Nicolás.
Uno de los hechos más violentos se registró en agosto de 2011 en el municipio de Allende, cuando fueron encontrados dos cuerpos mutilados en el interior de dos cajas en la carretera Cadereyta- Allende; uno correspondía a Kathia Cavazos – sobrina de la secretaria de Desarrollo Social, Juana Aurora Cavazos-, y el de su amiga Kendy Cavazos.
Y fue precisamente en ese mes donde se registraron más casos de feminicidios al sumar 59, de los que 36 ocurrieron en el ataque al Casino Royale; el segundo periodo es julio con 23 y octubre con 21.
Según cifras de la Procuraduría de Justicia en Nuevo León, del 2009 a octubre, muerieron 2 mil 824 personas, entre hombres y mujeres.
Datos de la Procuraduría General de la República revelan que en el 2009, Nuevo León se posesionaba en el lugar 14 en feminicidios, y ahora se encuentra dentro de los primeros seis a nivel nacional.
Se estima que en ocho entidades del país han perdido la vida mil 235 mujeres, en los últimos 18 meses. De dicha cantidad el 25 por ciento se le atribuye al crimen organizado, ejecuciones y delincuentes; mientras que el 23 por ciento de los casos se desconoce el motivo; y el 9 por ciento por problemas intrafamiliares.
Encabezando la lista se encuentran el Estado de México con 320, mientras que en Chihuahua de enero de 2011 a agosto se habían registrado 229 muertes violentas contra las féminas,Tamaulipas con 169, Sinaloa 168, Jalisco 142, y Nuevo León con 198, hasta hace unos meses.
Además se tiene un registro de 3 mil 282 desapariciones forzosas con fines de trata y esclavitud sexual, según información del Observatorio Ciudadano Nacional de feminicidios (OCNF), siendo las entidades de Chihuahua y Veracruz quienes están a la cabeza.
La violencia que se da hacia las mujeres no respeta clases sociales y se agudiza en las familias que viven en la pobreza, mezclado con bajos índices de escolaridad, violencia intrafamiliar y celos.
El reporte titulado Feminicidio en México: Aproximación, Tendencias y Cambios, indica que en los últimos 25 años se han registrado en México 34 mil 176 muertes de mujeres, cifra de la cual casi 7 mil ocurrieron entre 2005 y 2009.
El Instituto Estatal de la Mujer y la Secretaría de Desarrollo Social del Gobierno del Estado promueven campañas, talleres, conferencias y cursos para que las mujeres jóvenes y madres de familia tengan las herramientas para salir adelante y no decidan irse por el camino equivocado; sin embargo, a pesar de esto, las estadísticas siguen en incremento.
LAS VÍCTIMAS
En la guerra de los delincuentes muchas féminas han perdido la vida al quedar en medio del fuego cruzado.
El caso más polémico es el de la joven estudiante de la Facultad de Artes Visuales, de la UANL, Lucila Quintanilla Ocañas, de 21 años de edad, quien fue alcanzada por las balas la tarde del 6 de octubre de 2010 en la Plaza Morelos, cuando pistoleros perseguían a un celador del Penal del Topo Chico.
En el ataque también resultó lesionada Viviana Chávez Silva, de 54 años de edad, quien luego de permanecer casi un mes hospitalizada, perdió la batalla contra la muerte.
Meses después, en abril de 2011, otra alumna universitaria de la Facultad de Psicología, Gabriela Pineda Aguilar, murió de manera trágica, cuando fue arrollada por la patrulla 383 que era conducida por Nicolás Álvarez Romero, policía que segundos antes había sido asesinado.
En el mismo mes, una balacera entre miembros de la delincuencia organizada y elementos del Ejército Mexicano dejó como salo 6 personas muertas, entre ellas a una mujer inocente que viajaba en una camioneta acompañada de sus hijos.
En mayo, Eduarda Cordova Mendoza, vecina de la colonia municipal al norte de Monterrey, murió en su propio domicilio al recibir un impacto de arma de fuego.
En julio, un comando atacó el Bar Sabino Gordo, hecho en el que perdieron la vida 20 personas, entre ellas cuatro mujeres.
Hace casi cinco meses, 36 féminas murieron en el incendio del Casino Royale, y otras 23 en diferentes hechos.
En tan sólo 5 días del mes de noviembre -y en diferentes hechos- seis mujeres perdieron la vida a causa de impactos de balas. Los cuerpos de las mismas quedaron tendidas frente a casetas de policía, a pocas cuadras de parques públicos.
En el 2010, se dieron 27 bajas de civiles, entre hombres y mujeres; y para septiembre del año en curso las estadísticas de personas inocentes marcaban 104 muertes.
ES ALARMANTE CIFRA
DE MUERTES
María Elena Chapa, presidenta del Instituto Estatal de la Mujer en la entidad, comentó que la cifra de 216 mujeres asesinadas en 2011 es alarmante, la más grande que ha tenido la historia de Nuevo León, debido a la pobreza en la que se encuentra el país.
“Entró una variable importantísima que es la variable de violencia social o comunitaria. Hay muchos casos que sólo tenemos la referencia periodística, no tenemos la relación suficiente para saber causa de muerte, parentesco o familiaridad.
“Las muertes sociales de mujeres que son encontradas en lotes, en tambos, que han sufrido la narcoviolencia por llamarle de alguna manera y es obvio que estos números están respondiendo a una violencia social existente que si bien en algunos grados se ha disminuido, persiste la violencia en distintos grados y órdenes.
“Si vemos el otro factor es la violencia, donde informes mundiales señalan que México es uno de los seis países más violento del mundo, como país, a nivel de Irak y otros que están en plena guerra, me parece que el país completo ha sufrido convulsiones de distinto orden y uno de ellos es la narcoviolencia”, sostuvo.
Enfatizó en que se tiene que rescatar a las mujeres como agentes de paz, “eso se traduce en que de la paz de la familia pasas a la paz social y de la democracia en la familia, pasas a la democracia social, es valido mencionarla si logras que ciertos grupos conglomerados hacia el interior de su familia conserven cierto estadíos de paz, podrás logar que una comunidad viva en tranquilidad”, dijo.
Aseguró que el tema de la violencia es muy reciente, por lo que tardará años en generar una cultura de cambio y de respeto a las mujeres.
CASOS DE VIOLENCIA INTRAFAMILIAR OCUPA
UN 25 POR CIENTO
De los 200 casos de féminas privadas de la vida hasta noviembre de 2011, un 25 por ciento pertenece a decesos a causa de violencia intrafamiliar.
Para lograr que las cifras no se incrementaran en dicho rubro, el Instituto Estatal de Mujer, ha trabajado con un equipo de más de 50 personas entre psicológos, abogados, trabajadores sociales, asignados a diversos municipios del Estado.
Chapa destacó que aunque la violencia física se redujo, la psicológica sigue presente.
“Cuando tipificamos el delito de violencia psicológica como Ley, que es uno de los cinco tipos de violencia, mucha gente dejó de identificar lo que sufría o padecía como violencia física y lo pasó como psicológica, no las golpean o maltratan, pero violencia psicológica sí hay; se redujo la violencia física y se incrementó la violencia psicológica que sufren las mujeres en el hogar por sus parejas”, dijo.
En el 2007 se publicó la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, que establece la coordinación entre la Federación, las entidades federativas, el Distrito Federal y los municipios para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres, así como los principios y modalidades para garantizar su acceso a una vida libre de violencia que favorezca su desarrollo y bienestar conforme a los principios de igualdad y de no discriminación, así como garantizar la democracia, el desarrollo integral y sustentable que fortalezca la soberanía y el régimen democrático establecidos en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
“De esa ley, hay 46 propuestas de reformas a códigos civil y penal, en cosas que parecen sutiles, pero son importantes, por ejemplo el delito de trata, se aprobó, pero no los colaterales como turismo sexual, comercio sexual; la ley es amplia, buena, pero hay que especificar en algunos casos cómo se están dando los fenómenos de violencia y aterrizarlos para que los jueces tengan elementos legales para no tener problema.
“Tenemos que hacer el mayor de los esfuerzos para bajar un poco los niveles de violencia, es un trabajo de todos, de jueces, magistrados, gobierno, ciudadanía, de todos; si no ponemos nuestro granito nos lleva la situación a otras mucho más incómodas de las que estamos viviendo”, contó.
Por ello consideró que se tiene que rescatar a la mujer como agente de paz social, sólo así se logrará una paz social y se evitarán más muertes al crear una verdadera cultura en beneficio de todos.
El 25 de noviembre se conmemoró el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, con el fin de hacer eco en todos los hogares y que el trabajo y los derechos de las mujeres sean reconocidos.
Otro de los problemas a los que se enfrentan las féminas, es a la discriminación. El Consejo nacional para Prevenir la Discriminación (Conapred), señala que las mujeres han logrado resistirse y rebelarse, pero desgraciadamente las consecuencias de estas prácticas conducen a una discriminación que se manifiesta en todos los ámbitos de la vida. Debido a que se les agrede de forma física, verbal, emocional, sexual y económica.
NO SE DEBEN LASTIMAR
MÁS FAMILIAS
Juana Aurora Cavazos, secretaria de Desarrollo Social en Nuevo León- quien perdió a una de sus sobrinas a causa de la violencia social-, dijo que los hechos violentos comprometen a las autoridades y a la comunidad a trabajar por Nuevo León.
Señaló que no se debe permitir que se sigan perdiendo vidas, ni lastimando familias, como ha ocurrido en los últimos años.
“Lamentamos mucho que en México se estén dando síntomas tan difíciles para la sociedad como es el tema de la inseguridad y ha tocado desgraciadamente a las mujeres este tema. Lo que tenemos que hacer es revertir la ola que está sacudiendo a México, insisto, es una ola de inseguridad que sacude a todas las entidades. No quisiéramos que ninguna familia se vea lastimada en su inmediatez, con acciones que duelen, que te lastiman, te marcan para toda la vida y que quieres darle certeza y seguridad de crecimiento a los jóvenes, a las familias, estoy convencida de que el mejor mensaje para las familias es estar muy cercanos a nuestros hijos, a nuestras hijas”, expresó.
Manifestó que como gobierno tienen la responsabilidad de dar oportunidad de crecimiento a las familias para que tengan acceso a los derechos sociales, ya que la inseguridad se derivó de la falta de oportunidades y ahora al mal hay que ahogarlo con acciones de bien.
Consideró que no es responsabilidad de un gobernante o de una sola persona, sino que toda la ciudadanía debe de tomar acciones.
“Aquí el llamado que hago es que si los 4.6 millones de habitantes del Estado de Nuevo León moviéramos un dedo en forma positiva para revertir esto, sería el mejor ejército que puede combatir la violencia”, dijo Cavazos.
“Creo que Nuevo León es grande, su gente también, creo que podremos revertir la situación que actualmente vivimos cuando logremos visualizar que tomar en México un rumbo de timón fuerte, que tiene que ver con la desigualdad, pobreza y marginación, debemos trabajar sí en la entidad, pero el Estado no puede solo, necesitamos trabajar a nivel nacional, en revertir y dar golpes de timón importantes revertiendo la desigualdad, marginación y pobreza”, comentó.
Dijo que en el país se ha incrementado la pobreza, donde miles de familias padecen de algún derechos social como a la educación, seguridad, salud, servicios básicos en la vivienda.
“Si nosotros garantizamos que la población en general sufra lo menos posible, estaremos garantizando que no habrá un joven que quiera irse al otro lado de la calle a afiliarse a las bandas delincuenciales, habrá mujeres que elijan mejor ser madres trabajadoras y honestas que prefieran sacar adelante a sus hijos”, mencionó.
“Para poder construir el Nuevo León que queremos necesitamos de la solidaridad y colaboración de todos y será cuando verdaderamente podremos cambiar y transformar las cifras que ahorita verdaderamente nos dan tristeza”, dijo solloza.
LA PREVENCIÓN ES FUNDAMENTAL
La prevención es la mejor herramienta para lograr que la cifra de mujeres asesinadas no se incremente. Por su parte la Secretaría de Desarrollo Social y el gobierno del Estado, creó una red en principio de 28 centros comunitarios, ubicados en polígonos de pobreza en toda la entidad.
“El gobernador del Estado ha visto un área de oportunidad a partir de esta infraestructura social, ahora ya tenemos 40 centros comunitarios en la red, llevamos diferentes acciones que van focalizadas para toda la familia”, contó.
También existe el programa de Jefas de Familias, donde se da atención a miles de familias entregándoles una despensa y un apoyo económico de 500 pesos mensuales, donde todas las dependencias aportan alguna actividad de fortalecimiento como cursos de desarrollo humano, educación básica y servicios de salud.
“Nosotros les abrimos todo el abanico de lo que hay en el gobierno porque a veces hay desconocimiento, no saben qué proporciona qué, entonces al tenerlas como un padrón cautivo podemos darle un seguimiento y poderlas ayudarlas en su crecimiento.
“Esto va mucho en el tema de prevención, porque la mujer trabajadora a la que le brindas o le desahogas parte de su carga tan pesada y les proporcionas el curso de desarrollo humano y la acercas a las oportunidades, seguramente estas jefas no van a irse a otro tipo de tentaciones que hay ahorita por parte de grupos criminales que al verse mermados ya en reclutar hombres, pueden verse tentados y acercarse a las mujeres”, mencionó Cavazos.
Además con el nuevo Centro Bicentenario de la Independencia, instalado en la colonia Independencia, una de las más conflictivas en Nuevo León, ofrecen 106 talleres de robótica, mecatronica, cultura ambiental, entre otros.
Y a través del programa aula.edu, que son convenios con las universidades donde les proporcionan becas 100 por ciento.
“Las mujeres siempre buscan la superación, en el Centro Bicentenario tienen equipo de computo de primera, sus tutores, libros, se les desarrolla su alma mater en la universidad y el que puedan decir conquisté mi título es muy importante”, dijo.
“Uno de los grandes problemas sociales ahorita es que la mujer destina parte de su tiempo para trabajar fuera del hogar, pero aquellas que las puedes capacitar para que puedan promulgar estar en su casa, contribuyendo a la economía familiar eso hace que haya menos problemática social con los jóvenes en el entorno. Son una válvula de escape a tantas necesidades que tiene la comunidad”, señaló la funcionaria estatal.
Para que ya no se sumen más mujeres a las filas de la delincuencia se tiene que hacer una campaña de concientización, fortaleciendo principalmente los valores.
HAY QUE RESCATAR
LAS FUTURAS GENERACIONES
Juana Aurora Cavazos destacó la necesidad de rescatar los valores, principalmente en la juventud, porque sus hijos serán el futuro de México.
Señaló que la cultura de “el tener” ha sido uno de los grandes males por los que las generaciones se están perdiendo.
“A mí, mi madre me enseñó a trabajar todos los días, cosa que he hecho siempre, pero también era una persona muy desapegada a lo material y hoy hemos privilegiado mucho el `tener´, y éste es uno de nuestros grandes males; queremos tener grandes cosas, cuando la felicidad no es el tener.
“Tenemos que ver, qué nos funcionó en el pasado para rescatarlo y seguirlo promoviendo, yo creo que la solución de muchos de nuestros problemas está en la familia, que sigan prevaleciendo los valores”, dijo.
La funcionaria estatal dijo que es importante detectar la violencia en casa, y no permitir que el hombre abuse de la mujer.
Subrayó que lamentablemente uno de los factores por el que se han perdido los valores es por “copiar” acciones del extranjero, por ello es necesario fortalecer el núcleo de la familia, con políticas públicas.
En el Censo de Población y Vivienda 2010 en Monterrey había una población total de 2 millones 438 mil 601, de los cuales 1 millón 204 mil 716 eran hombres y 1 millón 233 mil 885 mujeres. Desafortunadamente una parte importante han perdido la vida al quedar en medio de la lucha entre grupos delictivos, todo por el problema de fondo: la pobreza y falta de oportunidades que existen en México.