Después de dos meses de conflictos por el presunto involucramiento de su hermano Manuel Jonás y de su secretario de Desarrollo Humano, Miguel Ángel García Domínguez, en actos de extorsión al casino Red, el alcalde de Monterrey, Fernando Larrazabal Bretón, salió bien librado y hasta se puede decir que fortalecido.
El Comité Ejecutivo Nacional del PAN lo dejó libre de toda culpa y el alcalde no perderá sus derechos políticos, por lo que su idea de ser senador sigue en pie.
Tras la salida de su hermano de las celdas del Sedeco de San Nicolás -luego de que la parte acusadora del Casino Red le otorgara el perdón- y que la Comisión de Orden del Consejo Nacional del PAN, lo absolviera, el edil comentó que las últimas 10 semanas han sido las más difíciles de su carrera política, pero como siempre lo ha dicho, seguirá trabajado por el municipio, pues la verdad del casino Red saldrá en las próximas semanas.
“Estas últimas 10 semanas han sido las más difíciles de mi carrera política; han sido semanas que me han servido para meditar muchas cosas, pero también en donde yo tengo la certeza que cuando se mezcla lo jurídico con lo político, lo único que se busca y se genera es confusión en los ciudadanos”, comentó el jueves 17.
“El tiempo y las cosas ponen a cada quien en su lugar, yo soy alcalde por tres sencillas razones: porque tengo la conciencia tranquila, porque seguiré hablando con la verdad y, la tercera, cuando se mezcla lo político a un tema jurídico esas son las consecuencias, las averiguaciones van a seguir, y el peso de la verdad no hay cómo se esconda”.
Pidió al gobierno de Nuevo León explicar todas las filtraciones que se dieron durante el caso y el interés de un medio de comunicación por perjudicarlo.
“La verdad habrá de salir conforme van pasando las semanas, yo seguiré siendo alcalde de Monterrey, seguiré como siempre lo he hecho, siempre de frente al ciudadano, trabajando para una mejor ciudad y con la conciencia tranquila de que la verdad habrá de salir”, expresó.
El alcalde aseguró que no dará más declaraciones en cuanto al tema de su hermano Manuel Jonás, para no seguir confundiendo a los ciudadanos.
“No quiero ya seguir politizando un tema que es jurídico, ni quiero abonar ya en ese tema; quiero que el tema jurídico lo vea estrictamente los abogados, porque lo único que estamos ocasionando cada vez que hay una declaración, es que lo jurídico queda abajo y se convierte en un tema político y la gente lo que menos necesita es confusión.
Dijo que seguirá trabajando de frente a los ciudadanos, mirándolos a los ojos, hablándoles con la verdad y haciendo una mejor ciudad de Monterrey, lo que es su obligación.
Asimismo agregó que lo principal es encontrar la verdad y aplicar la justicia.
En cuanto al regreso del secretario de Desarrollo Humano, Miguel Ángel García, el munícipe dijo que dependerá de la decisión del mismo funcionario.
“Él tomó esa decisión personal, la Secretaría de Desarrollo Humano continúa con sus actividades…vamos a esperar a que él tome la decisión”, concluyó.
LA NOVELA
Jonás Larrazábal saltó a la luz pública el 31 de agosto luego de que dos medios de comunicación publicaron videos y fotos del hermano del alcalde de Monterrey recibiendo dinero en el casino Red.
Días después fue difundido un nuevo video donde aparece acompañado del secretario de Desarrollo Humano regiomontano, Miguel Ángel García Domínguez. Según se aprecia en las imágenes, al parecer ambos sobornan al representante del casino Red.
El 1 de septiembre, Jonás Larrazabal fue arraigado por un plazo de 30 días que establece la ley para integrar la averiguación por los delitos de cohecho y delincuencia organizada de los que se le acusaba.
El escándalo alcanzó a Fernando Larrazábal y tanto panistas como priistas exigieron el 5 de septiembre que se separara de su cargo hasta que la averiguación terminara. Pero el edil no hizo caso y en un “acto de rebeldía” decidió quedarse y afrontar las consecuencias.
El que no corrió con la misma suerte fue García Domínguez, quien tuvo que pedir licencias el 8 de septiembre para esclarecer su presunta participación en la extorsión.
Gustavo Madero, dirigente nacional del PAN, viene a Monterrey el 13 de septiembre y se reúne con panistas de distintas corrientes. Un día después el CEN se deslinda del tema y manda a Nuevo León el análisis del caso.
Pero Larrazábal se adelanta y para el día 18 cambiaba la jugada al seno nacional, donde pediría su juicio interno.
El 25 de octubre compareció ante la Comisión de Orden del PAN y lo hizo de nuevo el 9 de noviembre.
El munícipe dijo estar agradecido porque los miembros de la Comisión Nacional de Orden del albiazul le dieron derecho de audiencia, y escucharon atentos su exposición y sus argumentos para no separarse del cargo de manera temporal.
El martes 15 de noviembre los acusadores otorgan el perdón a Jonás y este sale libre luego de 66 días de arraigo y 19 en prisión.
Ese mismo día, el PAN determina que será en Nuevo León donde se determinará, mediante votación, los candidatos a las diputaciones federales y senadurías de 2012.
Dos días después, el jueves 17, el CEN del PAN decide que Fernando Larrazábal está libre de toda acusación y que seguirá siendo un panista ejemplar. v