La empresa La Voz de Nuevo León S.A. de C.V. ha seguido prolongando su relación de negocios con los municipios de Guadalupe y Juárez, ambos en poder de la Confederación de Trabajadores de México (CTM), aunque con alcaldes postulados por el PRI y PAN, respectivamente.
En marzo de 2014, Hora Cero exhibió en su edición 217 los negocios del legislador priista, Óscar Alejandro Flores Treviño, quien según el acta constitutiva es uno de los socios de esa compañía que hasta enero de ese año había recibido pagos por 3 millones 667 mil pesos por diferentes conceptos.
Aunque en entrevista posterior a la publicación negó formar parte de la empresa, el diputado incurrió en mentiras: en el documento elaborado ante el notario Público 88, Gabriel Virginio Cantú Elizondo, su papá y líder de la CTM, Ismael Flores Cantú, aparece como socio mayoritario y él como minoritario.
En las dos administraciones de Guadalupe y Juárez, de febrero a septiembre pasado, ha recibido cheques por 707 mil 70 pesos, para alcanzar un total de 4 millones 374 mil 70 pesos… y lo que resta sumar en ambos trienios que finalizan el 31 de octubre de 2015.
En los pasados ocho meses de 2014, la compañía cobró 240 mil pesos en Guadalupe por concepto de publicidad, mientras que en Juárez registró 56 cheques de febrero a agosto por “trabajos de imprenta” que en total sumaron 467 mil 70 pesos.
En marzo del presente, el municipio guadalupense desembolsó 60 mil pesos por pago de publicidad para la razón social, la misma cantidad que pagó en mayo, pero dividida en dos cheques de 30 mil pesos cada uno.
En junio, en el mismo municipio, la compañía obtuvo tres cheques por 15 mil pesos cada uno, y uno más en septiembre por 75 mil, todos bajo el concepto de publicidad.
En Juárez, de poco a poco, la razón social logró amasar casi 400 mil pesos en pagos. Tan sólo en febrero, La Voz de Nuevo León de S.A. de C.V. cobró 17 cheques, el menor de 522 pesos y el mayor de 54 mil 331, para un total de 143 mil 743 pesos.
En abril, aunque la compañía de la familia Flores recibió más cheques que en febrero, el monto acumulado fue menor: 112 mil 343 pesos en total.
En mayo, la administración de Juárez erogó 59 mil 264 pesos en pagos; en julio 35 mil 264 y en agosto 116 mil 456; todos por el concepto de “trabajos de impresión”.
Ambos municipios, cuyos alcaldes César Garza y Rodolfo Ambriz fueron propuestos por la central obrera para contender en 2012, no han tenido reparo en convertir a la empresa -constituida el 17 de julio de 1997- en uno de sus proveedores favoritos.
Y aunque en la entrevista del 5 de marzo pasado el legislador tricolor afirmó que ya no era parte de la compañía que lidera su papá, cierto es que su nombre continúa apareciendo en el documento notariado.
Además, pese de los señalamientos hacia la empresa por parte de los dirigentes y partidos del PAN y PRD que cuestionaron cómo dos alcaldes apoyados por la CTM han dado contrarios a la empresa de su dirigente y del hijo diputado, los negocios no cesaron.
En 2009 obtuvo sus primeros contratos con municipios, acorde al apartado de transparencia del Congreso de Nuevo León, en donde se menciona que en la cuenta pública de Pesquería de ese año el municipio pagó 149 mil 500 pesos a La Voz de Nuevo León por concepto de 2 mil revistas de papel couché, de 76 páginas con impresión a color, hot melt y refilado, para el tercer informe del alcalde.
En el mismo reporte del Congreso se destaca que “no se localizó el soporte documental que demuestre que su adjudicación se efectuó mediante concurso por invitación a cuando menos tres proveedores, en cumplimiento a lo estipulado en el Reglamento de Adquisiciones Municipales”.
Tras ese negocio en Pesquería, que en la pasada administración la CTM tenía un control absoluto, la razón social de los Flores comenzó su expansión hacia otros municipios metropolitanos como fue Guadalupe y Juárez.