Hasta el año pasado, el mayor peligro durante una peregrinación era que un conductor imprudente arrollara a las personas del contingente, pero ahora, dentro de la psicosis que se vive en Monterrey, una estampida o quedar entre fuego cruzado podría ser un nuevo peligro para los feligreses.
Hace apenas unos días, el domingo 24 de octubre, asistentes a un baile en el palacio municipal de Monterrey resultaron heridos al escapar de lo que creyeron era una balacera y que realmente fueron sólo sonidos parecidos a detonaciones.
Además, las adecuaciones viales tras el paso del huracán Álex aumentan los riesgos de embotellamiento a la hora de las peregrinaciones.
Es por ello que tanto la iglesia como el ayuntamiento de Monterrey invitaron a los participantes a no lanzar cohetes durante sus marchas y tratar de tomar rutas previamente diseñadas hacia la Basílica de Guadalupe en la colonia Independencia.
En los alrededores del templo, ubicado al sur de Monterrey, poco a poco se ha visto la presencia de estos grupos que iniciaron sus recorridos desde el pasado 12 de octubre.
Caramelos, artículos religiosos, matachines, flores e imágenes de la Virgen de Guadalupe son el retrato de una de las mayores tradiciones en México y que los miles de regiomontanos celebran año con año.
El director administrativo de Tránsito de Monterrey, Óscar Cano, explicó que se tienen dos puntos establecidos para iniciar los desfiles; uno de ellos es en la Alameda Mariano Escobedo y otro en la Macroplaza.
“Se estableció que de ahí partan todas las peregrinaciones para irse por Pino Suárez, hasta llegar a la colonia Independencia, tomar posteriormente la calle Libertad hasta llegar Castelar y entrar directamente.
“Se estima que el traslado sea de una hora 20 minutos. Hasta el momento van poco más de 10 peregrinaciones las que han salido de dicho punto, y precisamente el fin de semana es cuando se ve más afluencia”, comentó.
Ante la psicosis que se vive en Nuevo León, el funcionario dijo que la recomendación para la ciudadanía es que no utilice juegos pirotécnicos.
“Nosotros confiamos en la buena organización por parte de los organizadores y que atiendan las recomendaciones que se les están haciendo, es preferible que no lancen juegos pirotécnicos y que inviten a todos los peregrinos a que partan de los puntos que fijamos. Consideramos que como está ahorita colapsada la vialidad es una buena opción de salir de esos puntos para tener el control en lugar de tener peregrinaciones y caos por todos los municipios, es una buena opción”, dijo Cano.
El ayuntamiento de Monterrey delimitará carriles en las rutas establecidas exclusivos para el uso de los feligreses. Por lo pronto serán 40 elementos con patrulla, motocicleta y elementos de pie quienes se encargarán de apoyar a las peregrinaciones; sin embargo, estos se incrementarán a 120 una vez que se acerque el día 12 de diciembre y el número de fieles aumente.
El funcionario pidió a la comunidad a que acate las recomendaciones de Tránsito, la Arquidiócesis de Monterrey, Protección Civil, Policía Regia y Estatal para evitar algún accidente.
“Para que tengamos saldo blanco en estas peregrinaciones”, comentó.
CANTOS EN LUGAR DE PIROTECNIA
Juan José Martínez Segovia, director de Comunicación Social del Arzobispado de Monterrey, subrayó que lo más importante es llegar al templo y no la distancia que se recorra, además en estos tiempos son mejores los cantos que los “cuetes”.
“Sabemos que es una tradición de muchísimos años, pero hay que recordar que el peregrinar no significa caminar mucho, sino ir a encontrarse con la madre de Dios.
“Pedimos a los peregrinos ser cautelosos en el uso de los ´cuetes´, ya que la actual situación puede provocar que la gente confunda la detonación de estos objetos, nosotros recomendamos optar por los cantos para anunciar que van en camino”, comentó.
Martínez Segovia recordó la importancia de manifestar la fe católica y mantener una tradición mexicana como venerar a la Virgen de Guadalupe, por lo que subrayó que la comunidad debe ser prudente para no generar conflictos viales.
La peregrinaciones han sido programadas para el horario de mañana y tarde; sin embargo, este también podría ampliarse conforme se acerque la festividad.
ESPERAN BUENA RESPUESTA
A pesar de la ola de violencia que los regiomontanos viven día a día, la Basílica de Guadalupe espera una buena respuesta por parte de los feligreses. Juan Pedro Alanís Marroquín, uno de los sacerdotes del templo, comentó que la situación de inseguridad provoca en la comunidad buscar una esperanza.
“La situación de violencia es muy fuerte, muy pesado el ambiente, pero precisamente necesitamos no enclaustrarnos y buscar la manera de hacer la vida hasta donde se pueda y no quedarnos encerrados. Se esperan más fieles, a pesar de la inseguridad. Nada amedrenta a los fieles, domingo a domingo viene la gente al templo, es algo impresionante que se va a mantener incluso incrementar.
“Cada año uno piensa que va a disminuir el número de peregrinaciones; anteriormente se pensaba que por la crisis y pues no, la tendencia se mantuvo, entonces yo espero que se mantenga y que los hechos de violencia no afecten, porque al final de cuentas considero que la peregrinación tiene un sentido de esperanza.
“Como que ante toda la violencia la gente necesita un espacio, una experiencia que le haga ver las cosas de manera diferente, entonces la gente vendrá a pedirle a la Virgen para que haya paz y tranquilidad en los hogares”, dijo.
“Toda la ciudad es peligrosa, pero sería más si no venimos organizados, si van a traer niños que los cuiden. En ese sentido tenemos la satisfacción de que en muchos años no se ha dado ningún problema fuerte, un accidentado fuerte, ni tumultos, zafarranchos, siendo que es una cantidad impresionante la que acude y esperemos que este año no seA la excepción”, comentó Alanís Marroquín.
Aseveró a pesar de que el “cuete” es un elemento festivo utilizado desde hace varios años, los peregrinos deben mejor orar en lugar de lanzar juegos pirotécnicos.
“En otros tiempos se pudo hacer de manera normal, ordinaria, ahora hemos visto que es conveniente la indicación de que los fieles mejor traten de no tronar los ´cuetes´ por seguridad de ellos mismos, y de las personas que no saben que hay peregrinaciones pueden asustarse y así favorecer a un clima de mayor paz hasta donde se pueda”, dijo.
Destacó que las peregrinaciones que ya han acudido a la Basílica han acatado las recomendaciones y confía en que continúe la misma situación de seguridad y tranquilidad.
Cabe mencionar que hasta finales de octubre se tenía un registro de poco más de 350 peregrinaciones, para concluir el próximo 12 de diciembre con 2 mil 800.
“No nos asustamos porque por lo general la gente va separando su peregrinación conforme se va acercando el día, el año pasado fue igual, el año pasado fue la misma tendencia”, dijo.
El sacerdote informó que el año pasado se tuvo un incremento de 40 peregrinaciones.
La tendencia, aseveró Alanís Marroquín, es que en los últimos días cercanos al 12 había pocas peregrinaciones registradas como grupo organizado, pero el número de familias era incalculable.
TIEMPOS VIOLENTOS
Alanís Marroquín aseguró que la aparición de la Virgen de Guadalupe se dio precisamente en tiempos violentos, similares a los que actualmente vivimos.
“La aparición de la Virgen de Guadalupe se da en el marco de la gestación de México, antes de que el país fuera tal, había pueblos indígenas y vienen los españoles, se hace un conflicto pero entonces propiamente la Virgen se aparece en ese contexto de problemas donde la gente tenemos gritos de esperanza, de vivir en paz.
“Yo esperaría que para este año la gente con mucha fe viniera y que le pidiera a la Virgen su intercesión con Jesús para que tengamos paz”, comentó.
El sacerdote agradeció a la Policía y Tránsito de Monterrey, Cruz Roja y Protección Civil, ya que la organización durante el 2009 fue excelente y todo marchó con orden y paz. El operativo de seguridad se montará del 20 de noviembre al 12 de diciembre.
IMPREDECIBLE DESTINO
DE VENTAS
Los caramelos, los chupones, imágenes religiosas, entre otros objetos están a la vista en la calle Castelar a unos escasos metros de la Basílica de Guadalupe, es el negocio de Juan de Dios Herrera López, quien tiene toda la vida de habitar en la colonia Independencia y ser testigo de la gran cantidad de fieles que acuden anualmente al templo, aunque en este 2010 el panorama para vender sus productos es impredecible.
De una palabra depende: Violencia. Y no es para menos, la inseguridad se ha adueñado de diferentes sectores de Monterrey y pueden ocasionar que la gente opte por quedarse en sus hogares y no visitar a la Virgen de Guadalupe.
“Está difícil la situación, pero esperemos que las ventas sigan normales. Invitamos a la gente a que siga viniendo y de pasadita se lleve algún dulce, artículo religioso, y que no teman a la inseguridad, la bendición de la Virgen mata todo, que no tengan miedo. En estas semanas ha llegado poca gente, pero los domingos es cuando se refleja mayor cantidad”, comentó.
En cuanto a la utilización de “cuetes” en estas fiestas en el marco del 12 de diciembre, el comerciante opinó que dependerá de cada peregrinación, aunque es lamentable que se tenga que llegar a esos extremos, siendo que es una tradición de años.
“Se vive la psicosis de la violencia, oyen un trueno y piensan que es un balazo. Llega gente y oye una cosita y dice: ¡ya están tirando balazos!, entonces influye mucho, pero es decisión de cada peregrinación, uno qué más quisiera como vecino que siguieran con la tradición de tirar ´cuetes´, sabías que era una peregrinación, se veía la gente y se veía bonito”, dijo.
El gobierno municipal y la Arquidiócesis esperan que se presente un saldo blanco y que las oraciones de los miles de peregrinos pongan por fin un alto a la violencia que predomina en Nuevo León.