Hasta hace algunos años el jugar futbol, subirse a la bicicleta o andar en patines, eran las típicas diversiones de los niños, ahora la tecnología y las nuevas costumbres los han llevado a apoderarse del sillón para simplemente ver televisión o entretenerse con los juegos de video.
Sin embargo, estas nuevas formas de entretenimiento entre la población infantil han conllevado a problemáticas como el sobrepeso, ya que el ver caricaturas no es lo mismo sin un tazón gigantesco de palomitas.
La nutrióloga Lucía Aldape de Esqueda, explicó que esta actitud de sedentarismo aunado a la costumbre de las madres de familia de darles a los hijos lo que sea para calmar el hambre, han hecho que la obesidad poco a poco se convierta en una característica común entre los menores de edad.
Desde hace algunos años, México está al tú por tú con los Estados Unidos disputándose el primer lugar mundial en obesidad; la mejor salida además de una dieta balanceada es el ejercicio, por lo que la empresa Quitakilos le ha apostado a regresar a los niños a su peso en base de ejercicio formando un equipo de futbol, lo que también les ha redituado a devolverle la autoestima a los pequeños.
TODO VIENE DESDE LA CASA
Sin saberlo, cada madre cuando va a surtir la despensa está construyendo la salud alimenticia de su familia, y es que mientras agrega al carrito una bolsa de frituras o algunos refrescos para el “tentenpié”, lo que está agregando es el principal alimento que tomarán sus hijos.
Y es que, según la nutrióloga Lucía Aldape, los niños comen lo primero que ven en el refrigerador o en la alacena.
“Muchas veces las mamás les damos por fácil algo ya preparado, alimentos que les llamamos chatarra por la facilidad de que ya lo quiere, aquí está enfrente, se lo compro. No cargamos con frutas y lo más fácil y lo más cómodo es lo que venden en la calle.
“Los niños lo que más piden es lo que ven en la televisión y dejámos las cosas nutritivas para consumir otras cosas que pueden engordarte más, y aunado a esto si están jugando todo el día en el nintendo o en actividades en casa muy tranquilas, es decir casi sedentarios pues aún más”, detalló.
Por ello, es indispensable que dejen a la mano frutas y verduras, ya que el niño no va a partir una jícama o un pepino, pero si los ve ya listos sí los va a consumir.
“El ejemplo arrastra”, por eso es que si la mamá come frutas y verduras, eso es lo que también va a comer el niño.
“Si la mamá pone el ejemplo, el niño es más fácil que lo haga, por que como le vas a dar al niño lo que tú no comes, entonces de eso se trata este cambio, que lo haga toda la familia”, señaló Aldape.
Las modas extranjeras también nos llegan a afectar en el ramo alimenticio, y es que los “super combos” o los “extra paquetes”, han hecho también que nuestro estómago se llene de alimentos extra, que no necesitamos, y además en exceso son dañinos.
La experta en salud nutricional dijo que las franquicias en Estados Unidos presentan las porciones mucho más grandes, así como los buffets, por lo que esta tendencia ha llegado a permear también en nuestro país.
“Principalmente para Monterrey yo creo que sí ha sido importante la influencia de Estados Unidos, toda la mercadotecnia, el estar constantemente comiendo o tomando refrescos, sobre todo en el calor de aquí, pues te da sed y qué toman los niños, pues refrescos y en execso produce obesidad, si se toma uno no pasa nada, pero si están tomando refrescos todo el día por el calor en lugar de agua o una limonada, pues sí afecta mucho”, aseguró.
La experta señaló que hay creencias entre la gente respecto a la obesidad, como el clásico: está creciendo, se va a estrirar.
“Es el desarrollo lo que más importa en cuanto al tejido adiposo, si un niño padece de obesidad a los seis años, tiene un 25 por ciento de probabilidades de sufrirla en la edad adulta, pero si este niño tiene 10 u 11 años, la probabilidad se incrementa en un 75 por ciento”, explicó.
La también gerente del corporativo Quitakilos, dijo que los padres no toman conciencia de lo que les afecta a los hijos hasta que comienzan a ver los cambios.
“Vino una señora con una adolescente y la misma señora nos dijo que cuando bajó de peso que no era tanto como 12 ó 15 kilos, nos dijo ‘es que no me daba cuenta cómo era, ahora es otra persona, más alegre, su autoestima cambio muchísimo’, recordó.
Por otra parte subrayó lo importante que es llevar una buena alimentación en los pequeños, ya que comienzan a darse casos de enfermedades propias en los adultos, comienzan a atacar también en la niñez.
“Ya ves, el colesterol, hipertensión, diabetes, es una tristeza, como por no cambiar un hábito de alimentación ellos pueden llegar a tener esas enfermedades pudiéndolas evitar con sólo cambiar los hábitos de alimentación.
“La diabetes, si les llega a dar, es una enfermedad que tiene que ser controlada de por vida, entonces no podemos permitir que a los niños les pase eso, yo creo que ninguna mamá quiere que algún niño tenga alguna enfermedad, entonces lo podemos evitar dándoles una controlada alimentación”.
Los padres de familia siempre buscan darle lo mejor en educación a sus hijos, pero dentro de este rubro también se debe de ver por la educación alimenticia que es fundamental en el desarrollo de los pequeños.
ACTIVIDAD FISICA: LA MEJOR SALIDA
Los regalos perfectos para los niños podían ser una bicicleta, una cuerda, un balón de futbol, hoy ni pensarlo lo que más feliz haría a un niño es un juego de video, que lo entretendrá por horas frente al televisor.
Este cambio en la actividad infantil ha provocado también que el sedentarismo se apropie de la nueva generación de infantes, lo que aunado a la comida chatarra que ingieren, provocan el exceso de peso desde temprana edad.
Tratando de subsanar un poco este problema la empresa Quitakilos se aventuró a darle este plus de la actividad física, a los menores que estan inscritos en su programa de conferencias semanales.
Aldape de Esqueda, gerente de esta institución, dijo que la inquietud surgió durante la convivencia que les organizaron a los pequeños con motivo del Día del Niño, ya que la gran mayoría trataba de entrar a equipos deportivos o las niñas a academias de baile, y los relegaban debido a su complexión física.
“Hay comentarios que llegan a lastimar la autoestima de cualquier niño, la verdad te parte el alma los comentarios que hacen, hay un niño que nos dijo que le decía el mecánico porque está lleno de grasa, y son cosas muy crueles que les van diciendo a los niños y pues su autoestima les afecta”, mencionó.
De esta forma contrataron a una persona capacitada para que les brindara el entrenamiento físico que necesitan dos veces por semana. El programa comenzó a principios de junio, y ha dado buenos resultados, a la fecha los 25 niños participantes de entre 8 y 15 años han logrado bajar 150 kilos.
Adolfo Esparza Tovar, entrenador del grupo Quitakilos kids, señaló que más que un equipo de futbol, el objetivo es orientar a los integrantes a que se desarrollen desde el aspecto mental hasta el físico.
“Todo esto tiene un sistema neurolingüístico, por esos son los colores, por eso están acomodados de manera estratégica, entrenan 45 minutos de trabajo intensivo cuidando su ritmo cardiaco, trabajamos la intensidad del corazón para que se abra y empiece a bombear sangre para que ellos puedan esforzarse.
“El futbol lo vemos como una segunda o tercera etapa, la primera es el aspecto mental, en que ellos su autoestima se mejore, por que cuando lleguen aquí su autoestima, sobre su estado físico, muchos de los niños no sabían ni correr”, explicó mientras los pequeños corren en el circuito que él mismo les ha formado con conos y banderas.
Aunque es relativamente poco el tiempo que llevan trabajando en conjunto, Esparza Tovar reconoce que ha podido ver cambios, ya que algunos no sabían correr o tocar el balón y todos venían con problemas de autoestima.
El verlos correr y sonreir hace no concebir que cuando apenas comenzaron sólo sabían caminar con los hombros hacia abajo.
“Ellos ya pueden estar de igual a igual con sus compañeros”, explica el entrenador, “también su fortaleza mental va a estar igual o por encima de los niños ´normales´, lo más importante es que la integración física y mental de ellos está a un 80 por ciento”, dijo.
Cabe mencionar que el trabajo del conjunto se complementa con la participación de los padres, y es que cada martes y jueves de 6 a 7:30 de la tarde, participan en la actividad junto con sus hijos.
De igual forma el entrenador condiciona su participación en el equipo, a las buenas notas en la escuela y el cumplimiento de las tareas en el hogar.
El sol es intenso pero ni esto mengua las ganas de los pequeños que ya se han comprometido ha mejorar físicamente.