“No te metas con mi …fémur”, fue quizá la tonada más pegajosa, aunque no la ganadora del II Festival de la Canción Anatómica que organizó la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia (FMVZ).
En el marco de las festividades del aniversario 35 de la facultad, el certamen de (des)composición musical fue creado pensando en el apoyo didáctico que le sea útil a la asignatura de Anatomía dirigida, y en la que participaron 92 estudiantes del primer semestre.
“Anatomía no es una materia tan difícil, pero sí medular en la formación de médicos veterinarios”, aseguró Guillermo Dávalos Aranda, director de la facultad.
En opinión del doctor, la intención primordial del festival musical es que los estudiantes se diviertan y aprendan, ¿de qué forma? utilizando los términos de anatomía como nombres de huesos, órganos o tegumentos intercalados en las canciones.
Ni la métrica ni la correcta anatomía empleada en la rearticulación de esos poemas juveniles puede, y debe, ser tan estricta pues, aseguró Dávalos, la finalidad sigue siendo el ingenio para volver a zurcir canciones populares.
“Para que pueda rimar hacen la mención de una extremidad posterior, por ejemplo, con un hueso del coxis o de la cabeza, de forma que los muchachos saben que el hueso no corresponde a lo que están mencionando, pero rima”, expuso.
“Anatomía es una de las materias con las que se enfrentan los jóvenes que vienen de preparatoria, -explicó el director-, corresponde a un grupo de materias básicas en donde teníamos un índice reprobatorio alto”.
Al realizar este tipo de actividades combinando la actividad artística, inicia una nueva fase de la eficiencia terminal en un porcentaje muy aceptable, pues aprenden divirtiéndose y desenvolviendo sus aptitudes artísticas.
“Es la segunda edición hablaron de canciones pícaras o llamativas pero que nada tienen que ver con el medio artístico. Utilizan simplemente las pistas y van articulando los distintos huesos del cuerpo que les son más difíciles de aprender”.
En el Festival de la Canción Anatómica los premios fueron simbólicos. En realidad lo interesante es la creatividad y la participación entusiasta de los jóvenes por esforzarse en su propio aprendizaje.
En el certamen donde se otorgaron los “fémures” de oro, plata o bronce, participaron 92 estudiantes de primer semestre agrupados en 18 canciones. Algunas fueron presentadas de manera individual, por parejas, quintetos o grupos. El evento se llevó a cabo el viernes 7 de noviembre.
GANADORES
El fémur de oro le fue otorgado al grupo “Primero B” que presentó un potpurrí con las adaptaciones de Qué bello, Al pasar, Cartas a Eufemia, Es mejor así y p…to, esta última del grupo Molotov.
El segundo lugar lo ganó Reynaldo Moreno Sánchez con Esqueleto del bueno, adaptación de un tema de Raily Barba; y también empatado con Aldo Alemán con su Anatomía Veterinaria, en alusión a la canción del grupo Reik.