A pesar que a finales del 2015 entró en vigor una reforma al Código Penal para el Estado de Nuevo León para castigar con cárcel a quienes maltraten a los animales, los delitos contra las mascotas continúan.
En esta ocasión la víctima fue un perro adulto de raza beagle llamado Romeo, que fue encontrado a lo alto del cerro Del Mirador, al sur de Monterrey, amarrado, desnutrido, sin alimento o agua y con severas heridas.
Las causas de su abandono se desconocen, al igual que la identidad de la persona que lo dejó a su suerte.
Fue el pasado sábado 16 de enero cuando a través de las redes sociales se denunció su abandono.
Su caso atrajo especial atención de los cibernautas debido a las lesiones que fueron provocadas por la fuerza con la que fue amarrado, ya que la presión a la que fue sometido su cuello le provocó uveítis, es decir, la inflamación de la úvea del ojo, que se encarga de distribuir la sangre en la córnea.
Las imágenes publicadas vía Facebook mostraban a Romeo con los ojos severamente enrojecidos e inflamados, al grado de no poder cerrar el párpado, y su cuerpo evidenciaba un estado de desnutrición avanzado.
Esta publicación se compartió cientos de veces, la gran mayoría, con comentarios de indignación por el hecho.
Miembros de la organización Pet Love rescataron al can y lo trasladaron a una clínica veterinaria para atenderlo.
“Tenía signos de estrangulamiento, esto ocasionado al momento de querer zafarse se lastimó, lo que le provocó una serie de heridas en el cuello y uveítis”, explicó Francisco Cavazos, médico veterinario de Meds for Pets, lugar que se encargó del cuidado de Romeo.
Después de someterlo a diversos análisis, el can dio positivo para erliquia, lo que empeoró su salud e impidió que los médicos pudieran administrarle los antibióticos que necesitaba.
De acuerdo con Cavazos, Romeo nunca recuperaría su visión al 100 por ciento a causa del daño en sus globos oculares.
El apoyo por parte de la comunidad no se hizo esperar, pues además de brindar apoyo moral, dejaron donativos tanto monetarios como en especie para ayudar a su recuperación.
Durante una semana, Romeo fue tratado como “rey” en la clínica veterinaria las 24 horas del día. Fue alimentado, bañado y cuidado y lo más importante: recibió el cariño de decenas de desconocidos que fueron a visitarlo mientras se recuperaba, mismas que él agradecía como mejor sabía hacerlo, moviendo la cola y dando “besos”.
Las ofertas para adoptarlo no se hicieron esperar, pero por indicación de los médicos veterinarios, el can quedó internado hasta que su salud mejorara.
Pese a los esfuerzos de los veterinarios, las “buenas vibras” de quienes seguían de cerca su caso, y las ganas de vivir de Romeo, su débil cuerpo no aguantó más y murió el pasado 23 de enero, exactamente una semana después de que fue encontrado en el completo abandono.
Al darse a conocer la noticia de la muerte de Romeo, inmediatamente las redes sociales reaccionaron sobre el deceso del can.
Desde condolencias hasta disculpas al perro por lo que tuvo que sufrir fueron compartidas, pero lo más común fue la exigencia de un castigo para quien sea el responsable de su muerte, aunque se desconozca aún su identidad.
¿Qué dice la ley?
El pasado 22 de diciembre entró en vigor la reforma al Código Penal local, en el que se incluyó el apartado “Delitos de maltrato o crueldad contra los animales domésticos”.
Esta nueva legislación proclama que las personas que lesionen a las mascotas podrían pasar de 3 días a 1 mes en la cárcel y pagar multas de 3 a 15 salarios mínimos
“Si las lesiones ponen en peligro la vida del animal doméstico se aumentará en una mitad la pena señalada”, cita el Código Penal.
Si las heridas le causan la muerte al animal, se establece que el responsable podría pasar de 15 días a 6 meses en prisión y pagar una multa de hasta 15 salarios mínimos.
También establece que la autoridad puede sustituir total o parcialmente la pena por tratamiento psicológico de hasta 60 días, o por la prestación de trabajo comunitario de 10 a 60 días.
Para evitar los casos de maltrato, la Secretaría de Desarrollo Sustentable del Estado de Nuevo León, a través de la Coordinación de Protección Animal, puso a disposición de la ciudadanía una vía de contacto para denuncias otros casos de abandono o maltrato a los animales domésticos.
Para realizar una denuncia vía telefónica puede llamar al 2033-2124 o vía correo electrónico a protecció[email protected], especificando el domicilio exacto del infractor.