En Nuevo León es muy común que la mayoría de las personas acudan al Consulado Americano a realizar algún trámite, pero ¿sabías que existen alrededor de 45 cancillerías de diferentes países en el Estado?
Uno de ellos se encuentra en el edificio del Pabellón Tec, sobre la Avenida Eugenio Garza Sada, es el consulado de República Checa, que tiene más de 14 años brindando diferentes servicios.
Aunque sus oficinas no miden más de 20 metros cuadrados, ni se observan largas filas de personas, ni elementos de seguridad como en el americano, da servicio a los interesados en obtener alguna visa, ya que anualmente se realizan un promedio de 300 trámites anuales.
En el local 20 se encuentra Radko Tichavsky, quien es el cónsul Honorario de la República Checa; con sus ojos azules y buen sentido del humor se encarga de ayudar a las personas que deseen viajar a aquel país sea por negocio, estudio o incluso por placer.
“En un principio fue una labor muy dura de convencer a la República Checa que Monterrey era una ciudad importante en muchos aspectos, una vez ya establecido el consulado comenzó la labor de hacerles ver a los regiomontanos que nuestro país estaba en el mapa que es muy importante y un destino de muchos negocios y de estudios”, explicó.
“En este trabajo no percibo un apoyo económico, ni de la República Checa, ni del gobierno mexicano, es una aportación de la persona a la República Checa, el lugar, el pago para la secretaria, el tiempo de trabajo y principalmente la representación de intereses económicos, culturales, educativos, deportivos y por supuesto la agenda consular.
“Esta agenda es dar atención a los ciudadanos checos que tienen algún problema durante su estancia en México -aunque es poco frecuente- como un pasaporte perdido, emitir algún pasaporte provisional; además sirve como una especie de notaria porque notificamos validez de documentos y revisiones certificadas para los interesados en tramitar visas para la República Checa”, comentó Tichavsky”.
Sentado en la oficina donde atiene a la gente resaltó que no necesariamente se requiere de un pasaporte para poder ingresar al país, por ejemplo un pasajero que sólo desee ir como turista no necesita hacer dicho trámite; no obstante si requiere alguna información sobre los lugares turísticos también se los puede indicar el consulado.
“Los turistas pueden ir hasta tres meses sólo con su pasaporte mexicano, pero si alguien va a trabajar o estudiar a la Republica Checa debe tramitar la visa y eso es lo que hacemos en el consulado”, dijo el cónsul quien cuenta con 50 años de edad.
Para la visa de trabajo una vez que la documentación haya sido entregada, el tiempo estimado de respuesta sea positiva o negativa es de tres meses; en tanto, para la visa de estudiante se requiere de un periodo de dos meses.
“Para la visa de trabajo los requisitos son varios se tiene que hacer por medio del empleo que le estén ofreciendo, el interesado debe de tener una inscripción de trabajo en la República, así como una carta de aceptación de la empresa que lo va a emplear e indicar cuánto es lo que va a ganar y el puesto, lugar donde va a vivir, entre otros documentos como acta de nacimiento”, explicó.
Tichavsky dijo que dentro de los requisitos que el estudiante debe presentar es que no cuente con antecedentes penales, asimismo debe de tener una carta de aceptación de la escuela donde va a estudiar, presentar comprobantes de solvencia económica, así como seguro de gastos médicos por el tiempo de estancia en el país.
El costo varía dependiendo del tipo de visa, va desde 340 pesos. En el 2009 se otorgaron 133 visas, la mayoría de estudiantes y en el 2008 la cantidad de 45.
Asimismo el cónsul honorario comentó que los intercambios estudiantiles se han incrementado en los últimos años, el primer grupo fue de 20 jóvenes quienes emigraron de la República Checa a México y con el paso de los años aumentó sobre todo en Nuevo León en escuelas como la UDEM, ITESM y Conalep.
“Cuando iniciamos el trabajo había cinco becas gubernamentales, de intercambio para estudiantes, el intercambio entonces era de cinco estudiantes entre México y República Checa, pero ahora fuera de este convenio, Nuevo León rebasó el número al visitar a la República Checa más de 100 estudiantes al año, principalmente porque es un país seguro, el centro de Europa y un lugar un bello arquitectónicamente hablando, un ambiente amigable”, comentó.
El consulado abarca tres Estados: Nuevo León, Tamaulipas y Coahuila, con sede en Monterrey. Los meses más altos para realizar trámites son los de noviembre y diciembre, mientras que la época baja es en el mes de enero, en este lapso el consulado realiza visitas comerciales y preparan actividades, como el proyecto Checo-mexicano una Universidad en la cual se ofrecen las carreras de turismo alternativo y producción orgánica iniciado hace cuatro años con 18 alumnos.
Cabe mencionar que de 1936 a 1938 el consulado se encontraba ubicado en la avenida Madero y Zaragoza y era presidido por Joel Rocha, uno de los fundadores de la Universidad Autónoma de Nuevo León.
“En 1938 viene la ocupación Nazi a Checoslovaquia y se quitan todas las relaciones diplomáticas que era un territorio ya ocupado por los nazis. Para los años 60 había una representación comercial que duró pocos años, después no había consulado y hasta 1996 cuando se refundo el consulado honorario de Monterrey”, dijo Tichavsky.
El proceso para elegir o designar al cónsul honorario no es sencillo, se realizan ternas y la Secretaría de Relaciones Exteriores de cada país busca el perfil adecuado de cada candidato.
“Tiene que ser una persona muy bien relacionada en la comunidad y que tenga un vínculo con la República Checa, que represente los intereses de la República Checa en México”, dijo el cónsul.
Con más de 25 años de vivir en nuestro país, Tichavsky atiende a las personas que buscan realizar algún trámite en un horario de ocho a una y de dos a seis de la tarde de lunes a viernes.
Para las personas interesadas en viajar al mencionado país y que quieran mayor información pueden comunicarse al teléfono 83691605 o a través del correo [email protected], y no dejar abandonado a un consulado que se encuentra en la zona sur de Monterrey.
CONSULES NO TIENEN QUE SER
DEL PAÍS QUE REPRESENTEN
Originario del Estado de San Luis Potosí, Francisco E. Cué P. es el cónsul honorario de Filipinas en Monterrey, quien ha estado al frente desde julio del año 2006.
“La designación se da por las relaciones que yo establecí en Filipinas, estuve viviendo allá seis años y la razón de ser de vivir allá fue porque fui el representante de la empresa con la que trabajo (Cemex) allá en Filipinas de 1997 al 2003.
“Las buenas relaciones que tuve por allá, entre ellas con la presidenta sustituta Gloria Macapagal, quien me invitó a ser cónsul; qué pasa cuando yo regreso a México, me encuentro que el cónsul es una persona muy reconocida en todo el país, que es el Doctor Carlos Canseco y por razones de deferencia hacia él, tardó algo de tiempo en que me dieran la designación”, dijo.
En el bulevar Díaz Ordaz 333, colonia Unidad San Pedro, en San Pedro Garza García, se encuentra ubicado el consulado de Filipinas, donde un cónsul puede ejercer dicho cargo por periodos de tres años o, también pueden repetirlo dependiendo de la decisión del país que represente.
“Actualmente tengo precisamente una extensión, a partir de julio del año pasado. Nos dan los documentos de asignación del país, una credencial que acredita como tal. El gobierno mexicano tiene que aprobarnos, desde el municipio en el que vamos a estar, Estado, el Congreso, si aprueban entonces la Secretaría de Relaciones Exteriores nos extiende la patente de cónsul”, explicó Cué.
Las actividades que el Ingeniero de profesión realiza son varias, van desde asistir y atender a los nacionales filipinos que lo requieran en cualquier sentido, hasta la extensión de visas para mexicanos; aunque, si van por menos de 21 días al país no requieren de dicho documento.
“Va desde alguna persona que pueda caer en desgracia como ser detenido, y nosotros nos debemos de asegurar que tengan las asistencias que marcan las leyes mexicanas. Nosotros escuchamos esto en casos de Estados Unidos, cuando los compatriotas hacen algo, los cancelan, enjuician, y hasta les dan pena de muerte, en donde se han tenido que deslindar situaciones porque no tuvieron la atención consular; entonces nuestra atención es asegurar que se les trate de acuerdo a las leyes locales”, dijo.
El cónsul además tiene la autoridad para emitir visas para mexicanos o extranjeros que se encuentren en esta jurisdicción o en el caso de los filipinos que deseen tramitar un pasaporte; sin embargo este último documento él sólo lo tramita.
“Yo no los hago aquí, pero recibimos la documentación y la enviamos a la ciudad de México, ellos los hacen, nos los envían y nosotros se los entregamos a los filipinos”, comentó.
Por lo cual para los filipinos, los documentos que requieran como pasaportes, extensiones de pagos de impuestos, autenticar documentos puede hacerse fácilmente.
“Si un filipino estudió aquí, para que esos estudios sean validos en su país, hay que certificarlos, primero en la SEP y luego en la Secretaría de Relaciones Exteriores y nosotros lo que hacemos es decir que esa persona que está certificando el documento, es la persona que tiene la autoridad para hacerlo y nosotros tenemos espécimen de firmas, y decimos si el funcionario tiene la autoridad para hacerlo”, señaló.
Además si un ciudadano filipino perdió su pasaporte, se le puede extender un documento de viaje que es válido por un mes y sólo para un viaje, también se pueden emitir actas de defunción.
“Una serie de actividades consulares con la excepción de la emisión de pasaportes. Esta es la embajada de Filipinas para todos esos efectos, excepto para pasaportes. Nuestra función es completamente honoraria, ni para las personas que somos asignados, ni para el Estado”, dijo.
HAY POCO TRABAJO PARA
CONSULADO FILIPINO
El consulado de Filipinas brinda servicios a diferentes Estados de la República entre ellos Nuevo León, Coahuila, San Luis Potosí, Durango y Tamaulipas; no obstante, a pesar de ser cinco estados las solicitudes para tramitar visa son mínimas, pues sólo se generan alrededor de cinco a seis mensualmente.
Mientras que autenticar documentos se da uno cada dos meses, “la verdad es que mi trabajo consular es muy pequeño”.
“La gente en general no acostumbra a ir a su embajada, no sé por qué, quizá porque nunca nos lo dicen, pero la verdad tiene sus ventajas, porque en ese momento ya el consulado adquiere cierta responsabilidad, cuando la gente sabe que estás ahí, y que en un momento dado te pueden atender”, dijo. Comentó que la relación que hay en esta región con Filipinas se da en el ámbito de negocios de sistemas de software y Cemex que envían empleados, “fundamentalmente eso, y en algunos casos representantes de alguna religión”.
Los Filipinos que existen en Nuevo León son muy pocos, alrededor de 15 “he tratado de localizar más y a los que conozco les pido que si conocen a alguien más me envíen sus datos para cualquier apoyo que en un futuro necesiten y para mandarles alguna información sobre su país, como elecciones”.
En su oficina, donde emite las visas en menos de 30 minutos, el Cónsul Honorario explicó que los requisitos para este documento son sencillos.
“Tener un empleo o cuando menos la seguridad de un soporte económico. El estudiante que no esté trabajando que sus familiares demuestren que los gastos serán cubiertos y si es empleado que tenga una carta de su empleador y su comprobante de ingresos; no es fácil sólo que deben de cumplir con los requisitos, también se les pide el boleto de avión, el pasaporte”, dijo Cué.
Además deben llenar una hoja de solicitud y tiene una entrevista muy breve, prácticamente para dar algunos consejos como por ejemplo qué vacunas se recomiendan si viajan al país, así como los lugares turísticos, y aunque sólo vayan a pasar por Estados Unidos deben tener la visa de ese país, entre otras.
REPÚBLICA DE SERBIA
Pol Popovic Karic tiene cuatro primaveras ofreciendo sus servicios como cónsul honorario de la República de Serbia, fecha en la cual este abrió sus puertas a los regiomontanos.
Ubicado en el número 6206 de la calle Misión San Carlos en la colonia Misión Cumbres en Monterrey, el cónsul puede dar orientación a los ciudadanos de serbia que deseen tramitar algún documento.
Popovic llegó a ser cónsul debido a una invitación que un político de serbia le hizo, “el país de origen hace una investigación administrativa, académica, policiaca sobre su pasado, los amigos que tienes, luego de algunos años confirma la sugerencia del embajador y el ministro del país dirige una carta al estado mexicano y lo mismo México”, comentó.
Originario de Belgrado, República de Serbia, el también coordinador de la Cátedra de Investigación de Literatura Latinoamericana Contemporánea del ITESM, dijo que aunque no tiene una gran demanda de solicitudes de visas, es necesario el consulado para ofrecer otro tipo de servicios u orientación.
“Soy un puente de comunicación entre ambos países, apoyo en algunos procesos culturales, como traer películas de Serbia a la gente de Monterrey; ayudar a personas de Serbia que ocupen documentos como alguna acta de nacimiento”, dijo el cónsul originario de Belgrado, República de Serbia.
Popovic tiene 16 años de radicar en el Estado y considera que “mi trabajo en la entidad es importante, porque por ejemplo, si mi embajador viene aquí yo lo acompaño, igual si necesita alguna entrevista con el alcalde o gobernador, permitiendo una mejor comunicación”, comentó el también profesor universitario con más de 20 años de experiencia.