Cualquier día, antes de salir al teatro para instalarse en el personaje de Roxie Hart del musical Chicago, Bianca Marroquín mantiene su identidad al estar en contacto a través de la ‘blackberry’ con sus familiares y amigos que dejó en Matamoros, la frontera donde vivió su infancia y adolescencia.
La primer mujer mexicana que pisa los escenarios de Broadway, fue una de las invitadas de honor al Festival Internacional Tamaulipas en su décima edición, luego de haber sido la homenajeada del mismo dos años atrás por el ex alcalde de Matamoros, Baltazar Hinojosa, quien le entregó Las Llaves de la Ciudad.
Sólo Pido se estrenó en la Ciudad de México hace tres semanas, aunque en realidad la premier fue en 2006 en Matamoros, durante la ceremonia de reconocimiento a la tamaulipeca, en donde su mamá (q.e.p.d) tuvo oportunidad de verlo.
“Ya existía –el espectáculo– pero un poquito más sencillo y más austero desde hace dos años, y mi mamá lo alcanzó a ver.
Como estaba en plena temporada de Chicago, pedí permiso para ausentarme por un día. Me acuerdo que era un jueves, hicimos el show en Matamoros y al día siguiente me regresé a Nueva York, pero fue muy especial porque la ilusión de mi mamá era que me reconocieran en mi pueblo”, recordó con cierta nostalgia.
Aclaró que luego del fallecimiento de su mamá ocurrido en mayo del año pasado, le hizo unas modificaciones al libreto original para hacerle un homenaje.
SOLO PIDE SER EVITA O…
Marroquín habló de sus futuros proyectos que están en negociación y de los que tiene en mente. Por un lado está en pláticas para representar La Novicia Rebelde y, por otro, tiene gran interés de interpretar el protagónico de Evita.
“Estuve a punto de hacer a Evita. Me quedé vestida y alborotada porque estaba la puesta en Londres y buscaban remplazar a Elena Roger, la chica argentina que la interpretaba y querían otra hispana.
En ese momento yo estaba haciendo Chicago en Broadway y me hablaron para hacer la audición, total me quedé. Incluso me dijeron que iba a hacer junio, julio y agosto del año pasado, pero cerró la obra un mes antes de que empezaran los ensayos”, señaló la también bailarina y pianista.
Agregó que otro de sus anhelos es llevar al cine o al teatro la vida de la actriz Shirley McLaine por ser un personaje que ha admirado desde pequeña, además de que algunas personas la han asociado con ella por su físico.
“Quiero hacer la vida de Shirley McLaine porque he sido fan de ella desde niña y vi su película Terms of Endearment; me encantó esa señora y luego me interesé por todo su trabajo. Además, me han comparado alguna vez con ella desde que empecé a salir en Chicago”, expresó Bianca.
La tamaulipeca manifestó sentirse muy orgullosa de sus raíces y aseguró que mientras está en Nueva York todos los días se acuerda de sus seres queridos y mantiene contacto con ellos por medio de la ‘blackberry’, su fiel compañera.
Su vida es un musical
Bianca Marroquín –la primer mujer mexicana que ha colocado su nombre en las marquesinas de Broadway–, provocó lágrimas, risas, pero sobre todo una sonora ovación por parte del público reynosense que presenció su espectáculo Sólo Pido, en el X Festival Internacional Tamaulipas.
Días antes se presentó en Matamoros, ciudad en la que la actriz, cantante, bailarina y compositora pasó su infancia y en cuyo honor interpretó “Mi Matamoros Querido”, el éxito que el desaparecido Rigo Tovar convirtiera en un himno para sus paisanos y que ahora será entonado internacionalmente gracias a la versión sui generis de este musical.
La menuda figura de la estrella de Broadway se contoneaba al ritmo de: “A orillas del río Bravo hay un linda región…”, uno de los primeros temas con los cuales la artista narró la historia de su corta pero interesante vida dentro de los escenarios.
Visiblemente emocionada, Marroquín inició la narración sobre su trayectoria artística, la cual se remonta a sus primeros años de vida cuando con un piano de juguete con el que simulaba que estaba complaciendo a un público imaginario.
“Todo empezó con un pianito Fisher Price que me regalaron mis papás cuando cumplí tres años”, reveló la joven que da vida a Roxie Hart, la protagonista de Chicago, el musical que la lanzó a la fama primero en México y posteriormente en la Meca del teatro: Nueva York.
Relató con un divertido popurrí su gusto por el baile y cómo se inscribió a su primera academia de ballet en Matamoros, para luego seguir estudiando jazz en Brownsville, Texas, seguido del flamenco; luego también se interesó en aprender danzón, aun cuando no correspondiera a su edad y época.
Con todas estas herramientas, la promesa de los musicales de Broadway continuaba con la ilusión de que alguien descubriera su talento, porque hubo momentos en que se sentía frustada y decepcionada de luchar en vano.
“A veces quien pone los mayores obstáculos es uno mismo”, confesó a manera de preámbulo para contar con un tema de su autoría esa etapa donde se encontraba llena de miedos e inseguridades, pero que finalmente superó gracias al apoyo de su familia.
Bianca Marroquín mostró esa faceta como compositora y pianista con “No Pierdas la Fe en Mí”, una melodía dedicada a una amiga de la infancia que murió en un accidente, y “Sólo Pido”, en homenaje a su mamá, quien falleció en mayo de 2007.
Recordó con humor cuando fue a su primer audición en el Tecnológico de Monterrey –en su época de estudiante– pues tuvo la particularidad de participar con los hombres, porque no alcanzó a realizar el casting de mujeres.
Fue así como fue seleccionada para el musical de La Bella y la Bestia en su versión para México en donde Marroquín debutó como Cuchara. Sin embargo, ella estaba feliz puesto que ya formaba parte del “show bussines”.
RESCATISTA DE MUSICALES
La tamaulipeca continuó con su biografía artística al recordar que la siguiente producción en la que participó fue Rent, pero como suplente de una de las actrices.
En vez de desesperarse, la entonces desconocida pero multifácetica artista lo tomó con filosofía y dijo que se sentía muy importante al ser “la rescatista de musicales”, pues ella salvaba a los compañeros que por alguna causa no acudían a la función.
Por tal motivo Bianca retomó algunos temas de sus participaciones en ambos puestas en escena y no podía dejar de bailar y cantar el tema de Roxie Hart, el protagónico de Chicago con el que alcanzó notoriedad primero en el Distrito Federal y hasta la fecha sigue cosechando éxitos en Broadway.
Para seguir con el ambiente neoyorquino, la homenajeada del FIT de hace dos años también deleitó con algunos acordes de “All that Jazz”, se despidió con “Cabaret” y “New York, New York”, ambos éxitos de la legendaria Liza Minnelli.
El vestuario fue simple pero sobrio, ya que sólo realizó seis cambios en los que destacaron dos brillantes vestidos de colores verde y lila que la hicieron lucir como la gran estrella del espectáculo a sus 32 años.
Sólo Pido fue concebido por Bianca Marroquín y producido por Federico González Compéan y Federico Alemán, además de seis músicos y cuatro bailarines que acompañan a la actriz y cantante en este viaje de éxitos y fama, con la promesa de regresar siempre a su lugar de origen.