La “ola azul” que se dejó sentir durante las elecciones de 2003 en Nuevo León, en esta ocasión se volvió tricolor, aunque en el Palacio de Cantera y en los ayuntamientos los colores seguirán iguales, las nuevas legislaturas tanto a nivel federal como estatal serán el reflejo del castigo que le dieron los electores a Acción Nacional.
El 2 de julio de 2003 el partido albiazul logró cambiar el panorama que tuvo la Cámara Baja durante la LIX Legislatura, ya que en esa ocasión el Revolucionario Institucional se quedó con 10 lugares de los 11 disponibles para mayoría relativa. Sin embargo, para la LX Legislatura los panistas se apoderaron de siete de los doce curules disponibles.
Incluso durante el periodo que está por finalizar en el Congreso de la Unión, los priistas pasaron a ser la tercera fuerza política. Nuevamente los papeles se han cambiado, y la ciudadanía decidió regresar a ellos el voto de confianza, tan sólo en Nuevo León recuperaron dos distritos, quedando así con siete lugares ganados en las urnas.
A nivel local, en la Cámara de Diputados el Partido Revolucionario Institucional volverá a ser fracción mayoritaria, luego de que hace tres años los panistas los derrotaran en los comicios quedándose a un sólo escaño de obtener la mayoría absoluta en el Congreso estatal.
Cuatro curules perdieron los albiazules por mayoría relativa, mismos que fueron otorgados al PRI gracias a la ciudadanía. El Distrito III de Monterrey, el XIV en Guadalupe, el XXI en Sabinas Hidalgo y el XXV en Linares decidieron volver a ser representados en el Poder Legislativo por los priistas; y aunque dos de los candidatos de estos distritos podrían entrar gracias a los votos obtenidos en las urnas vía representación proporcional, ventaja que al momento de las votaciones ha quedado atrás.
En tanto el Partido Verde regresa al recinto con dos curules a su favor, el Partido Nueva Alianza sigue haciendo presencia con dos lugares, mientras que el PT y el partido del Sol Azteca continúan con un escaño, siendo minoría y ayudando al PRI o PAN a conseguir los votos que necesitan para la aprobación de los dictámenes.
Durante la actual legislatura los albiazules se caracterizaron por la marca personal que tuvieron con las administraciones provenientes del tricolor, es predecible lo que se podrá ver durante las sesiones de la LXXII Legislatura estatal, el desempolvar el proyecto del Arco Vial es tan sólo una muestra. v