Camila Jaber es una apneísta (alguien que bucea sin usar tanque de oxígeno), que requiere 200 mil pesos para representar a México en el Mundial de Apnea, Roatán 2017.
Desde su niñez, Camila Jaber deseaba convertirse en una sirena, esperaba pasar sus días contemplando la belleza del mar desde sus profundidades y ahora, a sus 21 años de edad, espera consolidarse como apneísta representando a México en el Mundial de Apena, Roatán 2017.
Es originaria de Ciudad del Carmen, Campeche, pero donde nació su amor por el agua, la naturaleza y el medio ambiente, fue al mudarse a Quintana Roo. Actualmente reside, estudia y entrena en Monterrey, Nuevo León.
Por casualidad, como lo refirió la amante de la naturaleza, llegó a su vida el deporte que la acercó a su sueño: apnea, el cual consiste en bucear de manera libre (sin tanque de oxígeno).
Para este deporte, poco común, se requiere relajación mental, buena alimentación, hidratación y buenos reflejos para poder soportar la falta de dióxido en la sangre y las altas presiones de agua.
Cuando un apneísta se adentra en el mar, se disminuye su ritmo cardiaco, se contraen los vasos sanguíneos para elevar los niveles de oxígeno y el bazo libera más glóbulos rojos para brindar oxígeno a los órganos vitales.
“Empecé a practicar apnea cuando tenía 17 años… mi papá coincidió en una salida de pesca con un personaje de apnea y ahí fue cuando descubrí la existencia de este deporte en el que exploras el mundo marino sin ayuda externa”, expresó Jaber.
Siempre había practicado buceo, pero no le agradaba la falta de movilidad bajo el agua debido al tanque de oxígeno, por lo que cuando realizó su primera apena en el mar Caribe Mexicano, encontró lo que había buscado por años.
“Mantengo muy presente el primer momento que sentí la presión del mar, el abrazo, el voltear a ver hacia arriba y ver esa masa de agua sobre mí y el sentimiento de paz que emergía dentro de mí”, recordó la seleccionada nacional.
Posteriormente, decidió seguir practicando en todo lo que estaba a su alcance, en cenotes, el mar y al concluir sus estudios de preparatoria le dedicó seis meses completos al deporte que ama.
Cursó distintas certificaciones para convertirse en instructora y fue ahí donde conoció a competidores de apnea, por lo que se interesó en conocer su nivel de competencia y se preparó.
Jaber explicó que para disputar en apnea por primera vez, tuvo un gran entrenamiento basado en exploración, y al competir por primera vez rompió récord nacional, lo que fue muy satisfactorio para ella y su familia.
En el 2016 participó en la Copa Mundial Vertical Blue donde obtuvo el cuarto lugar, pero nuevamente rompió su récord nacional.
Sin embargo, el apnea es un deporte poco común, por lo que la falta de apoyo y patrocinio para los competidores es deficiente, por no decir nulo, y de no conseguir los fondos suficientes no podrá acudir al Mundial de Apnea, Roatán 2017 para poner el nombre de México en alto.
Para practicar dicho deporte, se requiere: entrenamiento, fuerza física sin crear volumen, flexibilidad, tolerancia a la presión y técnicas de compensación.
Pero la más importante, que menciona la competidora nacional es la del entrenamiento en profundidad, que es la que aumenta los costos de preparación para cada competencia.
“Creo que eso es lo más complejo, buscar un lugar adecuado para entrenar, la profundidad que se requiere para la preparación, que se ejerza la misma presión de agua como en el mar”, señaló Camila.
La deportista busca el apoyo de la comunidad para reunir la cantidad de 200 mil pesos mediante Inixar, la cual es una plataforma que promueve el crowfunding (financiación colectiva).
Y es que, a la fecha, Camila sólo ha recaudado 37 mil pesos y le resta poca más de un mes para que concluya el proyecto en la plataforma. Para hacer una aportación visita la página https://www.inixar.com/, donde se describe el proyecto de la apneísta.
En pro del medio ambiente
“Como atleta creo que es importante tener otros sueños que impulsen tu desempeño, como tener un mensaje que difundir, en mi caso es el de promover el cuidado del mar con nuestras acciones diarias”, señaló la joven.
Para ello se prepara estudiando la carrera de Ingeniería en Innovación y Desarrollo con enfoque en Sostenibilidad, estudios que combina con su labor de instructora de apnea.
“Desde que era chica comprendí los problemas ambientales a los que el planeta se enfrenta”, recordó.
A pesar de residir en uno de los estados con las mejores playas, Camila Jaber, mencionó que decidió mudarse a Monterrey, puesto que se vio atraída por la oferta académica, ya que su preparación profesional también la considera de suma importancia.
“También quería desenvolverme en un ambiente diferente, me gustaron sus montañas”, agregó.
La joven explicó que la carrera que eligió es porque le preocupa la falta de acceso que tienen las comunidades alejadas de la urbe a los servicios públicos vitales, como el agua.
Asimismo, refirió que le gustaría desarrollar proyectos educativos que ayuden a las diferentes comunidades rurales a independizarse en base a su propia producción.