La evidencia gráfica es irrefutable, cuando hay un juego contra un rival taquillero como Rayados o el América, en el Estadio Universitario existen muchas más de las 42 mil personas permitidas por el aforo del inmueble. Un riesgo para la seguridad.
Aunque la directiva del equipo asegura que el sistema que emite los boletos para los juegos de local de Tigres en el Estadio Universitario impide la sobreventa, la realidad es que en juegos importantes, como el pasado Clásico con Rayados o la visita del América, existe un sobrecupo de, al menos 3 mil 400 personas.
Fotografías tomadas durante estos encuentros revelan que las zonas que registran estos problemas son la General Sur, Preferente Sur, Preferente Norte y General Norte, que son las que tienen los boletos con los precios más accesibles.
La evidencia gráfica revela que el sobrecupo se registra en los pasillos de acceso al Estadio, donde se concentran la mayoría de las personas que observan paradas el encuentro y representan un riesgo para la seguridad.
Las zonas de Butacas Norte y Sur no presentan el problema de subrecupo pues son las que tienen los precios de boletos más altos.
Un conteo realizado en base a fotografías tomadas durante los encuentros entre Tigres y Rayados, el 23 de septiembre pasado, y Tigres y América, el 6 de octubre; confirmó que el sobrecupo en los pasillos de acceso en estas zonas es preocupante.
De acuerdo a la cuenta, en cada pasillo de cada zona hay un promedio de 134 personas que están viendo el partido paradas pues no cuentan con una butaca, pues todas se encuentran ocupadas.
Al considerar este numero se confirma que, al menos, en un encuentro de este tipo existen 3 mil 400 personas de más dentro del Estadio, quienes al encontrarse en los pasillos de acceso al Estadio, son un potencial bloqueo en caso de se vuelva necesaria una evacuación rápida.
Entrevistado sobre este tema, el director administrativo del Club Tigres, Alberto Palomino aseguró que el sistema de venta no permite emitir más boletos que las poco más de 42 mil butacas que hay en el estadio Universitario.
Palomino afirmó que lo que sucede en estos casos es que las personas hacen caso omiso de sentarse en sus lugares.
“El aforo del estadio son 44 mil 621 y no se vendió más de la capacidad, el mismo sistema no permite vender más del aforo.
“El tema es que mucha gente acude en pareja o de tres personas -sobre todo en las zonas no numeradas- y como no hay lugares juntos deciden quedarse de pie”, argumentó.
El directivo aseguró que ese es el motivo por el cual las personas bloquean los pasillos y las salidas, poniendo en riesgo de la muchedumbre al impedir la salida libre en caso de una emergencia.
“Por eso había personas paradas en zona gol y preferente, a pesar de los esfuerzos de Fuerza Civil y seguridad privada de decirle a la gente que se siente”, añadió.
Sin embargo el argumento del directivo se cae cuando se observa que en las zonas donde existe el sobrecupo, no hay asientos vacíos que pudieran ser ocupados por aquellos se encuentran a pie.
Además es una realidad que alrededor del Estadio Universitario opera una red de revendedores de boletos quienes tienen una mayor demanda precisamente en las zonas donde se registra el sobrecupo.
Cuestionados sobre este tema, autoridades del Ayuntamiento de San Nicolás y de Protección Civil del Estado aseguraron que no pueden hacer nada para impedir el sobrecupo al interior del Estado Universitario.
Esto es porque de acuerdo a la legislación actual, ellos tienen jurisdicción afueras y en los alrededores del Estadio y la vigilancia de lo que sucede en el interior es responsabilidad de los grupos de seguridad privada contratados por el club.
Cabe señalar que estos problema no se presentan en el estadio BBVA, de Rayados, donde los cuerpos de seguridad privadas sí se aseguran que todas las personas ocupen un boleto y no haya nadie viendo el juego de pie en los pasillos.