El reynosense Jaime García podría ser el segundo mexicano en todos los tiempos que gana la nominación al Novato del Año en las Ligas Mayores y, cuando faltan poco más de tres semanas para que termine la temporada, se encuentra muy cerca de conseguirlo.
Los últimos dos pitchers que han obtenido este galardón en la Liga Nacional lo hicieron con 14 y 16 victorias, meta que parece alcanzable para García, quien hasta el 14 de septiembre tenía marca de 13-8.
Dontrelle Willis, de Florida en 2003, y Jason Jennings, de Colorado en 2002, han sido los últimos dos pitchers en acreditarse esta nominación en las 10 temporadas más recientes. Los números de García son iguales o mejores que los de estos dos ganadores.
Más atrás en la historia, Hideo Nomo y Kevin Wood obtuvieron el premio con marca de 13-6.
De San Luis el último en ganar este premio fue Albert Pujols, en 2001 y en cuanto a pitcher, Todd Worrell en 1986, el año que Jaime García nació. Además de su buena marca en ganados y perdidos, el zurdo de Reynosa es el quinto mejor en efectividad, un renglón que pesa a la hora de nominar a los mejores del pitcheo.
Fernando Valenzuela, en su temporada de ensueño con los Dodgers en 1981, no sólo ganó el premio a Novato del Año, sino que también fue seleccionado como el Cy Young por su récord de 13-7 y efectividad de 2.48 en 25 aperturas.
La diferencia entre Valenzuela y todos los Novatos del Año que han venido después es que el sonorense completó 11 partidos y lanzó ocho blanqueadas, algo que en la actualidad no se estila.
Cliff Corcoran, de Sport Illustrated, publicó su lista de favoritos para Novato del Año de la Nacional y la encabezó con García, en una pelea muy cerrada con Jon Niese, de los Mets.
Sobre García escribió que “ha sido muy consistente y efectivo esta temporada. Sólo en una ocasión permitió más de cuatro carreras en un partido”.
Corcoran enlista entre los primeros cinco novatos a García, Niese, Buster Posey, catcher de San Francisco; Jayson Heyward, jardinero de Atlanta y Gaby Sánchez, primera base de los Marlines de Florida.
Posey comenzó en las menores y luego jugó la primera base hasta julio, cuando fue cambiado a su posición natural, que es la receptoría. El chamaco ha demsotrado poder y consistencia con el bat, amén que su equipo repuntó y pelea por clasificar.
Jason Heyward fue catalogado para triunfar desde el inicio de la campaña. Es un guardabosques rápido, de buena defensa y que puede conectar de corta y larga distancia. Los Bravos han comandado su división a pesar de no ser un equipo caro.
Por último, Gaby Sánchez es un muchacho al que los Marlines le dieron la confianza de jugar todos los días. Es el líder de los novatos de la Nacional en carreras producidas con 72.
Este año los novatos se dieron por decenas y además de los ya mencionados sobresalen Tyler Colbin y Starling Castro, de los Cachorros; Roger Bernadina y Ian Desmond, de Washington.
Otro llamado a este selecto grupo era Stephen Strasburgh, pero se lesionó el codo de lanzar luego de una marca de 5-3 con los Nacionales de Washington.
Para 2011 el gran nominado será el deserto cubano Aroldis Chapman, quien está tirando rectas de 100 millas por hora para los Rojos de Cincinnati, quienes decidieron no “quemarlo” este año para que esté vigente y pelee por el galardón el año próximo.
Dave Duncan, coach de pitcheo de los Cardenales de San Luis, opina que García tiene todos los merecimientos para ser el Novato del Año.
“Sus números hablan por sí solos, pero espero que no piense mucho en este tema por ahora”, dijo Duncan.
Tony LaRussa, el manager del equipo, fue mesurado como siempre y expresó: “No muchos pitchers han ganado este premio, pero eso no significa que sea imposible. Él siempre está al tope de la conversación sobre este tema”.
TEMPORADóN
Jaime García hizo bien las cosas desde el principio. Es más, desde 2009 se concentró en su condición física y en cuidar su brazo que venía de una difícil operación.
Se presentó temprano al campo de entrenamiento de los Cardenales con una invitación en la mano y sin la seguridad de un contrato de Ligas Mayores.
En la pretemporada demostró que tiene la mentalidad de los ganadores. Se ganó su lugar como el quinto abridor del equipo y a partir de ese momento se volvió necesario para el club.
Con Adam Wainwright y Chris Carpenter como caballos de batalla, García se coló como el tercero en la rotación y no ha perdido una sola salida. Es más, su participación en el Juego de Estrellas se vio frustrada precisamente porque estos dos compañeros tenían mejores número que él y fueron electos al partido estelar.
Jaime García debutó con una victoria sobre Milwaukee y su compatriota Yovani Gallardo. En su segunda apertura dejó en un hit a los Mets durante siete entradas.
Pasaron 14 juegos que algún equipo le hiciera más de cuatro carreras limpias en un partido.
El 22 de agosto tiró su primera blanqueada del año ante un rival que está encendido como son los Gigantes de San Francisco.
En una encuesta realizada en julio entre los peloteros, García fue catalogado como el pitcher con la segunda mejor curva de la Liga Nacional, sólo atrás de su compañero Wainwright.
Y a pesar de que el extenuante calendario de las Ligas Mayores está llegando a su final, García se consolida con tres victorias consecutivas entre el 22 de agosto y el 3 de septiembre.
Desgraciadamente sufrió un tropezó en su apertura del 8 de septiembre ante los Cerveceros de Milwaukee al permitir siete carreras limpias en apenas cuatro entradas de labor.
Previo a este partido, García había contenido a los Cerveceros en apenas tres carreras durante 25 entradas. En sus 26 anteriores aperturas nunca había recibido tanto castigo. Su peor salida fue contra los Reales de Kansas City, cuando le hicieron cinco carreras.
El lunes 13 de septiembre cayó ante los Cachorros 5-1, permitiendo sólo dos carreras limpias y ligando por primera vez dos derrotas en la temporada.
Tomando en cuenta que hasta el 14 de septiembre a la temporada 2010 le quedaban 20 partidos por disputar, al zurdo de Reynosa le podrían tocar cuando menos otras tres salidas, en las que puede regresar a su nivel y seguir poniendo los números necesarios para que los periodistas que eligen al Novato del Año se fijen en él.
Lograr 15 triunfos sería un gran marca para un joven que en su primer año completo demuestra que tiene la casta para jugar en las Ligas Mayores.