
Dicen los que dicen que saben, que el tiempo pone cada cosa en su lugar…
En el caso del Monterrey y sus problemas de varios tipos que tiene, sobresale el de su defensiva.
La llegada de Sergio Ramos tiene a muchos emocionados porque piensan que él puede ser el factor que resuelva el nudo ciego que traen por ahí, pero no necesariamente. El punto es que al tema de no tener los hombres idóneos para integrar un cuadro defensivo sólido, hay que sumarle que su entrenador no sabe cómo hacer jugar a todas sus líneas para que no le peguen atrás tan feo.
Varios se les han ido, y otros los han dejado ir, como Edson, que hoy es titular en la vulneradísima zaga central del Santos; Guzmán está lesionado, al igual que Salcedo; Érick Aguirre está en bajísimo nivel. A Moreno no lo quieren por viejo y a Tony Leone por nuevo. Se la juegan con Medina, que es lateral, no central y se nota, balbuceante al lado de Ramos, llevando en los costados a Chávez y Arteaga, dos jugadores que eran unas balas defendiendo y atacando y hoy más o menos hacen las dos cosas.
Pero más allá de los detalles que en lo particular tiene, agrégale la experiencia y el colmillo de figura mundialista de Ramos, su cancha recorrida, cualquier cosa que esto signifique. Para bien y para mal…
En síntesis: tienen un defensa de la sub40 que lleva ya dos goles (los mismos que Chuy Garza, un inquieto lateral que ni siquiera era titular en Tigres); otro central que como lateral apenas era regular y hoy es peor; y dos laterales que no son garantía. Eran figuras donde andaban, acá no. A eso añádele que el desorden en medio donde no todo mundo se aplica a marcar porque tres o cuatro se sienten figuras y no saben marcar debidamente… solo corretear al rival para que la tribuna los vea, pero marcar en serio, no tanto.
Agrégale que dos excelentes volantes que eran unas fieras, acá flotan en la media: Ambriz y Deossa salen a cumplir y a hacerle coros a Canales. Lo mismo que Cortizo, cuando no se cae cada que le pasa alguien cerca; Corona comenzaba a entonarse y tuvo que dejar el puesto a Ocampos, que está fuera de ritmo, luego de su mágica lesión que en la Final que le regalaron al América. Tecate tiene la culpa, quien le manda no ser argentino.
Rodríguez evita la fatiga y trota de un lado a otro tocando lateral, sin apuro alguno.
Berte, hace lo que puede y de pronto frente al arquero falla muy raro; Canales corre y corre y corre y las quiere todas, pero no siempre acierta, mientras los demás lo ven pasar y nadie se mueve para recibir.
El técnico, no tiene la menor idea de cómo hacer jugar bien un plantel de 80 MDD y por eso ofrecen espectáculos tan deplorables como el 1-1 ante la Máquina.
Por eso, ya le están buscando… no quieren llegar al Mundial haciendo estos papelitos…
Los Tigres recuperaron la sonrisa.
Nico Ibáñez, luego de “fallar” una y mil veces goles increíbles, volvió a anotar. Qué casualidad.
Nada más corrieron al DT que los hacía entrenar duro y recuperaron la memoria.
Los golpistas se salieron con la suya y ahora ya tienen quien los consienta y no les exija y ahora sí están a gusto. Bola de sinvergüenzas.
Lo que no saben es que pronto les caerá la Espada de Damocles sobre la cabeza.
Como cuando aquel plantel de Boca corrió a Lavolpe entre los que estaba Gago; hoy se lo harán a Gago…
Pronto, otros se lo harán la misma traición a esta bola de mercenarios vestidos de futbolistas que mantienen otros vividores de pantalón largo.
A cada santo le llega su fiestecita…
Por cierto…
Las Chivas vencieron al América en la Concachafa y luego empataron sin goles en la liga de mentiritas que dirigen los casineros…
El Santos rompió todas las quinielas venciendo al líder e invicto León; los Pumas volvieron a ganar ahora bajo el mando de Efraín Juárez, luego de escombrar el área y poner en su lugar a unos cuantos sicarios del fútbol que se estaban haciendo locos, haciendo como que jugaban.
Diferente sucedió en Tigres. Acá premian a los traidores; allá los corren. El cambio en Tigres es que antes jugaban a algo; hoy, el señor que lava los carros afuera del estadio pudo dirigirlos y se hubieran visto mejor contra la lavandería queretana.
El Toluca está intratable y le metió cinco a Necaxa, en tanto que Tijuana y Santos siguen sumidos en la ignominia…
Sigamos disfrutando esa farsa…