
Los muy lamentables hechos registrados hace unos días en una primaria en Newton, Connecticut; obligan a replantear el sistema social actual no solamente en los Estados Unidos, sino como dice el dicho popular “cuando veas las barbas de tu vecino cortar, pon las tuyas a remojar”.
Y aunque hablemos de realidades distintas entre los vecinos del Norte y Mèxico, es un hecho que compartimos las duras y las maduras; es decir, nuestra vasta frontera nos permite agilizar todo tipo de mercancías, incluyendo las armas y drogas.
¿Hace cuánto tiempo que nuestras autoridades, entiéndase, militares, estatales, municipales o federales, no realizan los tradicionales eventos para canjear armas por vales de despensa?
¿Hace cuánto tiempo que no vemos filtros reales en carreteras o avenidas de todo el país con el objetivo de detectar armamento y no solamente de extorsionar a los automovilistas con el argumento del aliento alcohólico por la temporada navideña?
Nadie puede negar que con la severa crisis en materia de inseguridad pública y la llegada de miles y miles de paisanos provenientes de Estados Unidos, lugar en el que es más complicado conseguir un libro que un arma, existen condiciones fatales para que los mexicanos tengan acceso a armamento de cualquier tipo.
¿Sabrán los integrantes del nuevo Gobierno de Enrique Peña Nieto a ciencia cierta, cuàntas armas están entrando a Mèxico con motivo de las fiestas navideñas?
Y voy mas allá, ¿sabrán cuantas entran pero se quedan en Mèxico?
Los tristes hechos registrados en Estados Unidos no deben ser soslayados de ninguna manera, por el contrario, son motivo para replantear las acciones del Gobierno federal en esta materia, involucrando a las otras esferas municipales y estatales.
Conviene recordar las tragedias registradas en el presente año en Estados Unidos, una nación en la que existen en promedio 312 millones de habitantes y en que, según estimaciones oficiales, ¡hay cerca de 300 millones de armas!
Es decir, ¡en promedio cada estadounidense cuenta con un arma de fuego de cualquier tipo, revolver, rifle de asalto, cohetes lanzagranadas, escopeta, etc!
Y luego con la doble moral que les caracteriza critican a Mèxico y gozan al colocarles a cada rato “alertas migratorias” buscando que sus ciudadanos no visiten nuestra nación por “insegura”…
¡Cuando en Estados Unidos mueren unas 30 personas diariamente víctimas de armas de fuego!
Las tragedias registradas en los Estados Unidos tan sólo el presente año son: el 27 de febrero en la Secundaria Chardon, en Ohio, un estudiante de 17 años iniciò un tiroteo en la cafeterìa matando a tres y lesionando a cuatro; luego el dos de abril del 2012 en Oakland, California, un joven entrò a su salòn de clases matando a siete de sus compañeros e hiriendo a tres. Mientras que el 20 de junio, en el Cine Century, en Aurora, Colorado, y precisamente en el estreno de la película “Batman, James Holmes, estudiante de medicina, accionò repetidamente sus armas matando a 12 e hiriendo a otros 59 personas.
El cinco de agosto, en el Templo Sikh, en Wisconsin, un hombre abrió fuego contra los asistentes mientras realizaban una ceremonia religiosa matando a siete y dejando lesionadas a tres mas. Y la mas dolorosa, hace apenas unos días, el pasado 14 de diciembre, en la Escuela Sandy Hook, luego de matar a su padre en su propia casa, el joven de 14 años Ryan Lanza, se dirigió a la escuela en la que su madre impartìa clases para asesinarla junto con otras 25 personas, 20 de ellos menores de edad.
¡Todos los menores asesinados a sangre fría tenìan entre cinco y nueve años de edad!
Pero la última acaba de suceder apenas el domingo, cuando una balacera en las inmediaciones del complejo de cines Santikos Mayan Palace, en San Antonio, dejó al menos una persona lesionada.
Pero eso no es todo, porque todo indica que la industria armamentista en Estados Unidos está en Jauja, ya que sus ventas han crecido más de un 30 por ciento entre el 2008 y 20012, por lo que en el año que está por terminar se registraron ventas oficiales de casi 17 millones de armas. El impacto de la industria armamentista en el vecino país, sumó casi los 32 mil millones de dólares en el 2012.
Los hechos recientes demuestran que no existe proporción entre el número de ciudadanos que tienen armas en su poder y el equilibrio mental que debe tener cualquier ser humano para poder ser confiables en su posesión.
Es una realidad que este tema debe ser reflexionado en serio y muy profundamente por los gobiernos de Enrique Peña Nieto y Barack Obama.
Sería interesante saber la postura de nuestros diputados y senadores no solamente en el Congreso de la Unión, sino a nivel estatal, para iniciar las discusiones serias y debatir acerca del serio problema que enfrentan ambas naciones por la venta indiscriminada y fuera de control de armas de fuego..
¡Antes que sea demasiado tarde!
Muchas Gracias