Quien ha dado la sorpresa del trimestre fue el alcalde electo de Monterrey, Adrián de la Garza, quien ha formulado la invitación al alcalde saliente de Apodaca, César Garza, para que se convierta en su próximo secretario del Ayuntamiento.
Sabedor de la experiencia y excelente manejo político de uno de los alcaldes que ha conseguido uno de los triunfos más holgados en la historia de Nuevo León, de la Garza Santos formuló hace unas semanas la invitación.
Para cuando estas líneas sean publicadas, se puede dar a conocer que César ha aceptado la invitación del alcalde electo.
¿Qué significa esto para la política estatal? Muy sencillo: que desde hoy el arrancadero de la disputa en pos de la gubernatura del estado ya no solo tiene a Adrián de la Garza como único competidor, sino que ahora se le suma César Garza, quien nunca ha ocultado sus aspiraciones.
La cosa se va a poner interesante.
En otros asuntos si algo quedó claro con todo el circo que se armó en la Cámara de Diputados y en Senado de la República para reformar el poder judicial fue que el gobernador de Nuevo León, Samuel García, no tiene ni voz ni voto en la dirigencia nacional de Movimiento Ciudadano.
Porque de ser así, y siendo público el apapacho hacia Samuel del presidente Andrés Manuel López Obrador, cualquiera de los cinco senadores naranjas pudo haber sido el voto que faltaba a MORENA y sus rémoras de partido para alcanzar la mayoría absoluta en el polémico tema de la reforma.
Vaya, quedó también muy claro la distancia y las diferencias que hay con el ex alcalde de Monterrey, Luis Donaldo Colosio, que Samuel ni se atrevió a pedirle que le echara la mano para consumar “el regalo de López Obrador” cuando está a días de entregar la banda presidencial.
Porque desde que empezó la lucha para aprobar unos, y rechazar otros, los nuevos legisladores de la alianza MORENA/PT/PVEM dijeron que cambiar la constitución para quitar privilegios a jueces, magistrados y a la burocracia del poder judicial sería el regalo con la cereza del pastel.
Y obviamente, antes de comprar el voto del panista Miguel Angel Junes Márquez, seguramente AMLO, Claudia Sheinbaum y otros jerarcas de MORENA habrán pedido a Samuel que convenciera a uno de los cinco senadores de su partido.
Pero Colosio seriamente no le iba a contestar el celular a Samuel. Más bien, seguramente el gobernador ni se atrevió a llamar al ex edil regio para que cambiara su postura de rechazar la reforma, misma que al final se aprobó la noche del martes 10 de septiembre.
Uno de los senadores de MC que se lleva -o se llevaba- de piquete de ombligo con Samuel que hasta lo llamaba “mi compadre” es Clemente Castañeda, ex coordinador nacional de su partido ¿pero qué creen?: es jalisciense del establo de Enrique Alfaro, quien pintó su raya de la la moda “fosfo-fosfo”.
En fin, mientras eso pasó en el Senado donde MC fue aliado del PRI/PAN/PRD con una viral exposición en redes sociales de Luis Donaldo Colosio, en el Congreso de Nuevo León sigue la parálisis porque los legisladores de MC están aliados con MORENA y sus rémoras.
El cuento de los morenos, naranjas, pietistas y verdes es que los del PRIAN les apandillaron la mesa directiva del Congreso que encabeza Lorena de la Garza, señalando a Jesús Elizondo (MORENA) como el Judas con olor a cabrito que se salió del redil, jugó con el enemigo y metió un autogol a su bancada.
Volviendo con la postura de Colosio -a quien por ciento se le extraña en Monterrey… pero para arreglar todos los pendientes que dejó (baches, caos vial, parques y áreas verdes descuidadas, entre otros)-, rápido tomó protagonismo no solamente en la bancada de MC, sino en el Senado.
Sin duda su tirada no es regresar a Nuevo León para volver a contender en 2027 por la gubernatura, y menos por el partido al que pertenece, sino su mira estará en la lejana sucesión presidencial de 2030 cuando ya haya madurado dentro de la política.
Por lo pronto los medios de comunicación nacionales, obviamente contrarios á los 4T, le dieron vuelo a sus declaraciones contra la reforma judicial, y él mismo usó sus redes sociales para reportar el alboroto dentro del Senado y cuando, supuestamente, fue rociado con gasolina.
Y descartado para la gubernatura, ¿a quién tendría Samuel para enarbolar la bandera naranja para gobernador(a) en 2027? No descarte, en serio no lo descarte, a su asesor de imagen Glen Villarreal, una vez que quedó sin curul y sin fuero en el Congreso local: dos gotas de agua.
Porque también quedó claro que Martha Herrera, la super secretaria de gabinete hasta antes de su derrota el 2 de junio en la fórmula con Colosio, no fue aceptada por el electorado. Y de esa lona será difícil que se levante en tres años. Estará disponible para una alcaldía o una diputación.
Por cierto: ¿alguien sabe del paradero de Agustín Basave? Aquel chico maravilla naranja de los panorámicos de las elecciones de 2021 junto a Samuel y Colosio que fue diputado federal?
En MC suenan los nombres de Martha Herrera, Glen Villarreal, el subsecretario Oscar Flores, y el mismo Miguel Sánchez, actual dirigente, para la renovación del comité estatal que tendría que llevarse a cabo en octubre.
Sin embargo, mucho en el destino que tome el partido naranja tendrá que ver con el resultado que tenga la impugnación que presentó ante la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación la pareja “fosfo fosfo” sobre la elección para alcalde de Monterrey.
Las cosas no pintan bien para Samuel y Marianis, pues han perdido todos los recursos legales que han interpuesto ante los tribunales como el Consejo General del INE.
Entonces, si al final se concreta el triunfo de Adrián, el liderazgo de la pareja “fosfo fosfo” quedará lastimado, pues sobrarán los militantes de MC quienes se cuestionen si el gobernador realmente tiene la fuerza y la influencia para dirigir los designios del partido.
En otros asuntos quien anda en cuenta de 3 y 2 -y eso que aún no jura como regidor de Guadalupe-, es Arturo Alejandro Salazar Martínez, quien protagonizó un bochornoso escándalo cuando, en estado de ebriedad, intentó huir de la Policía de Monterrey y provocó un fuerte accidente.
Lo más penoso es que días antes del incidente, Salazar Martínez y el resto de los integrantes del Cabildo participaron en una plática con el alcalde electo, Héctor García, quien les leyó la cuartilla respecto a cómo debían de comportarse y cómo debían de alejarse de escándalos.
Los datos que se tienen es que García aún no decide qué es lo que va a hacer con este joven regidor quien, aseguran, no es afecto a la bebidas espirituosas y esa noche fue una desafortunada excepción a su regla.